Mi Profesor Vampiro (En Edición)

Capítulo 18

Habíamos viajado todos para ver qué tan cierto era eso de que aquí en el mar Índico podríamos encontrar a una sirena, Simón se había quedado en el pueblo para avisar si veía a Stéfan o algún licántropo, Matías Sofía, James, Evolet, Hellen y yo si habíamos viajado hasta aquí

Habíamos conseguido un pequeño bote en el que podríamos viajar todos, teníamos que llevar el bote hasta mar abierto y luego derramar sangre de vampiro, no sería tan difícil lo que me preocupaba era la petición de las sirenas

Después de 4 horas navegando supimos que estábamos lo suficientemente dentro de mar abierto como para poder rociar mi sangre, le pedí a James qué le pasará la daga aunque yo no estaba contento con que vinieran ninguno de ellos, pero no me dejaron más opción, puse mi mano cerca del agua y corté la palma con la daga, no tardaron en salir varias gotas de sangre

Ahora sólo tendríamos que esperar para ver si vendría alguna sirena

No pasaba nada, ya llevábamos aquí una hora sin resultado ya todos estábamos aburridos cuando de repente se escuchó un ruido bajo el agua, Evolet fue la primera en ponerse alerta luego le seguí yo y después todos los demás, de pronto aparecieron tres sirenas

Una de cabello tan rojo Como la sangre, otra con el pelo tan rubio que parecía de oro y la última con el cabello negro como alas de cuervo

-Vaya vaya, que tenemos aquí? mis queridas hermanas-dijo la rubia se acercó al bote y pude ver su cola la cual era de un tono verde apoyo los codos en el borde del bote y subió, sus pechos eran tapados por su cabellera larga la piel de las tres era demasiado blanca que parecía traslucida

-Veo qué hay 3 vampiros, una bruja un cazador y miren una humana-continuo la rubia-querida no sabes qué es peligroso estár rodeada de entes sobrenaturales?-

-Agneta, deja en paz a la humana-dijo la pelirroja

-Está bien, Achlys tú ganas-

-Resolvamos esto antes de qué Acantha suba y decida ayudar a estas pobres almas en desgracia, sin querer pedir cobro alguno-dijo la sirena de pelo negro uniéndose a las otras dos

-Porque Adara? porque ella es la toma las decisiones entre nosotras, si es la más pequeña-protesto la pelirroja

-Por favor Achlys no peliemos aquí no frente a ellos-dijo la sirena de nombre Adara

-Díganos qué es lo que desean?-pregunto Achlys

-Saber mi prometida ha sido secuestrada por licántropos y no aparece su energía en el mapa por lo que creemos que puede estar bajo el agua-dije yo

-Porque siempre nos vienen a invocar para que busquemos a alguien, que no saben que tenemos cosas más importantes que hacer?-

-Agneta no te quejes y sólo hazlo-dijo Adara

-Si lo hago yo entonces seré la que haga el trato-

-Que es lo que quieren?-pregunto Sofi-

-Vaya es una humana muy valiente-Dijo Agneta

-Agneta, dejame a mi hacer el trato-rogo Achlys

-Bien, hazlo tu-

Achlys se puso frente a mi y serró los ojos,

-No puedo, Adara, este vampiro esta bloqueado-

-Tienes que poder, Acantha me quitó mis poderes-dijo Adara

-Agneta que hay de ti?-

-No funcionan-

-Agneta, Adara, Achlys, que es lo que estan haciendo?-salio a la superficie una sirena de cabello castaño, largo

-Acantha, tratando de ayudar a estas almas en desgracia eso es todo-Dijo Adara

--Que es lo que habéis solicitado?-

-Saber donde está mi prometida-dije yo

-Bajo el agua no está, si es lo que deseáis saber-

-Cómo lo sabe?-pregunto Jem

-Las profundidades están muy tranquilas desde hace meses, nadie a estado en regiones maritimas-

-Jem, yo le creo-

-Demonios Acantha, como puedes dar la información sin pedir nada a cambio-reclamo con enfado Achlys

-Achlys es acaso que no recuerdas que ya murió una de nuestras hermanas, no podemos arriesgarnos, además yo mando aquí y se hará lo que yo diga-

-Claro-dijeron las tres al unisono

-Gracias, como puedo pagar su ayuda-dije yo

-Con nada vampiro, sólo salgan de estos mares y me daré por bien pagada-dijo Acantha y se sumergió, no tardaron en segirlas las otras tres sirenas

Regresamos al hotel, Sarah no estaba bajo el agua, ahora teníamos que investigar sobre los lugares con energía positiva y negativa que hay en el planeta, mi paciencia se agotaba, no podía estar sin ella