Summer Love (Clexa)

Capítulo 3

Jake salió de la casa con una maleta en cada mano. Abrió el maletero del coche y las metió con rabia. Abby salió de la casa llorando y se dirigió a él, diciéndole algo, pero desde donde estaban Clarke, Raven y Octavia apenas se escuchaba nada.

- Joder... Parece que la cosa es seria - Dijo Raven - A esto te referías antes ¿No? Cuando me enviaste el mensaje.

- Sí... pero no sabía que era tanto - Contestó Clarke - Vale que mis padres últimamente no hacían más que discutir pero es que... ¡Creo que se está yendo de casa! ¿Qué hago? ¿Voy?

- Quizá sea mejor esperar - Dijo Octavia que todavía permanecía en el asiento trasero del coche - A ver si lo solucionan... - Jake le gritaba a Abby y Clarke pensó que nunca en la vida había visto así a su padre.

- Parece que está muy enfadado... - Dijo Raven – Nosotras... Deberíamos irnos. Si necesitas cualquier cosa estaremos pendientes del teléfono ¿Vale?

- Sí... Gracias chicas. Luego os escribo... - Clarke abandonó el coche y caminó rápidamente hacia donde se encontraban sus padres - ¡Papá! ¿Qué es lo que ocurre? - Preguntó la chica acercándose a ellos.

- ¡¿Que qué es lo que ocurre?!... ¡Pregúntale a tu madre a ver si ella te dice lo que pasa! - Gritó él, mientras Abby no hacía más que llorar desconsolada.

- Mamá.. ¿Qué está pasando? Por favor... - Preguntó Clarke preocupada y con lágrimas acechando con salir de sus ojos al ver la situación, pero su madre no contestó. Se volvió hacia su padre en busca de respuestas pero Jake tampoco decía nada - Papá... - Su voz rota apenas se escuchaba.

- ¿Sabes qué es lo que pasa? ¡Te lo voy a decir! - Le contestó Jake - Tu madre es una mentirosa... ¡La persona más hipócrita que conozco!

- ¿Pero por qué dices eso? - La chica sintió como su pecho se encogía.

- Me engaña a mi... te engaña a ti... ¡Nos engaña a todos! - Gritó Jake - ¡Eres...! ¡Eres...! - Dijo dirigiéndose hacia Abby, pero no llegó a terminar la frase - Mejor me voy de aquí, no quiero hacer algo de lo que después pueda arrepentirme

- ¿Por qué no entras y hablamos las cosas? - Le preguntó Clarke suplicando.

- Cariño... no hay nada de qué hablar - Le dijo acariciándole la mejilla - Tú no tienes la culpa de los errores de tu madre...

- Pero papá...

- Estaré en casa de tu abuela hasta que encuentre un sitio donde irme a vivir - Le dijo Jake a Clarke dándole un beso en la mejilla. Después subió al coche y se fue.

Clarke no entendía absolutamente nada, y su madre tampoco parecía que le fuera a explicar lo que acababa de pasar. Abby se metió dentro de casa sin mediar palabra, dejando a la chica fuera, sola, sintiendo como aquella oscuridad que le rodeaba se cernía sobre ella.

Su padre se había ido. Aquel que siempre había adorado a su madre, que siempre la había complacido, que siempre la había tratado con cariño...

Le desconocía, pero en el fondo sabía que si había tomado esa decisión, era porque detrás de todo aquello tenía que haber una razón realmente importante, si no, su padre no habría tomado una medida tan drástica.

Clarke se armó de valor y entró en casa, encontrándose a su madre llorando en el sofá. La chica la miró. Estaba desconsolada, abatida y casi sin fuerzas, sentada en el sofá con una caja en las manos. Abby se percató de la presencia de su hija y la miró.

- Lo siento, Clarke... lo siento de verdad - Dijo de forma entrecortada mientras las lágrimas seguían cayendo por sus mejillas.

- Mamá... no tienes porqué contármelo ahora - Le dijo Clarke, aunque en realidad quería saber qué era lo que había ocurrido, qué motivo había para que su padre se hubiera marchado de casa - Será mejor que hablemos mañana por la mañana... Deberías ir a acostarte, es muy tarde...