Capitulo 1

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Martes

Me desperté al día siguiente y mi madre me dijo que ya era tarde para ir a la escuela.

Me desvestí rápidamente y entre al baño. En la ducha no dejaba de pensar en lo ocurrido el día anterior, me preocupaba la relación con mi madre, aunque yo sabía que nada volvería a ser como antes.

Salí del baño, me vestí con el uniforme, y me mire en un espejo.

- Aguanta Samantha, solo unos días más y ya- dije a mis adentros.

Al bajar las escaleras lo primero que pude notar eran las cajas de la mudanza

- genial, lo que me faltaba.-Pensé

-Buenos días hija- me saludo mi madre algo nostálgica.

-Hola madre-

-Aquí está el desayuno, pero apúrate que vas tarde- dijo mi madre señalando un plato con huevos revueltos, una taza con cereal y leche y un vaso con chocolate caliente.

No dude en sentarme a comer, tenía mucha hambre, porque no había comido nada en la cena. No alcance a comerme todo entonces mi madre decidió meter el resto en mi bolsa de almuerzo.

Me cepille los dientes y salí de mi casa corriendo hasta el paradero del autobús.

Me subí en el y dije buenos días a la conductora, fui hasta el fondo del autobús y me senté al lado de Juliana, la amiga que me había apoyado todos estos años en la escuela de Canadá, y tristemente pronto la iba a dejar atrás.

-Hola Juli- le dije.

-Hola- me saludo ella devuelta.

-Juli ¿estudiaste para la prueba de ciencias?- le dije. Juli me miro con cara de preocupación y me dijo que se le había olvidado estudiar y me pidió que por favor la ayudara. Fui sacando el cuaderno y el libro de ciencias para estudiar y estudiamos hasta que llegamos al colegio.

Tan pronto que la conductora abrió la puerta del bus guarde el libro y el cuaderno en mi maleta, me pare del asiento y con Juli fuimos hasta la puerta del bus.

Fue tan solo poner un pie en el piso y ver a las personas más repugnantes y estresantes en la faz de la tierra.

María Camila, siempre con novio diferente. Sofía, la gomela y adicta al maquillaje. Manuela, la deportista y obsesionada con su cuerpo. Lucia la inteligente del grupo y por ultimo Susana la más amable de todas.

A Juli tampoco le dio alegría que ellas estuviesen allí .Tan pronto vía a Susana la salude y sus "amigas" me empezaron a mirar raro, realmente a mí no me importaba que pensaran ellas así que las ignore al igual que Juli.

- No entiendo como Susy cree que ese grupito de chicas son sus amigas, incluso Lucia la trata mal.- le dije a juli muy molesta.

-A mí tampoco me gusta como tratan a Susana- me respondió ella

En realidad, no sé por qué me molestaba tanto pero si me preocupaba por Susy. Ella fue por mucho tiempo mi mejor amiga pero no le gustaba como nos trataban las populares, así que decidió cambiar de imagen y alejarse de nosotras.

Con todos los pensamientos que tenía en mi cabeza, de repente me choque con la persona que tenía delante y me caí al piso. Los pocos segundos que estuve en el suelo, lo único que quería era que no fuera él. Levante la cabeza y ahí estaba el chico que me hacía sonrojar. Me había gustado  Alex  desde el primer día de clases, me parecía muy lindo y a veces podía ser un poco amable  pero también era muy egoísta y gilipollas de vez en cuando. Me volteo los ojos en gestó de fastidia me levanto mis cosas y me las entrego. Luego Juli me ayudo a pararme.

Cuando me termine de levantar vi al fondo del pasillo a mis otras mejores amigas Sue, Melody, Sarah y Clara, Juli también las vio y salió corriendo a saludarlas, yo inmediatamente seguí a Juli hasta ellas.

Cuando llegue todas estaban calladas y me miraban de reojo lo cual me hizo sentir algo incomoda.

Desde que recibieron la noticia de mi partida habían estado comportándose conmigo de una manera extraña y algo reservadas.

Después del silencio incomodo la que hablo fui yo. Les pregunte sobre la prueba de ciencias, luego me preguntaron que quien se había caído y Juli respondió por mí.

No sé porque siempre tenía tan mala suerte, de todas las personas en la escuela justo me tenía que chocar con Alex, el único chico que me había gustado a lo largo de mi vida.

De un momento a otro sonó la campana para entrar a clases, todas entramos juntas al salón y nos sentamos en nuestros respectivos puestos.

Estuve todo el día distraída, no podía concentrarme, en lo único que pensaba era en todas las cosas que iban a cambiar. Dicen que en la vida existe un antes y un después, un suceso que lo cambia todo, y ese suceso era este, o al menos eso creía.

Al llegar a casa, lo primero que hice fue cuadrar con mi madre algunas cosas de la mudanza, cuando terminamos estaba muy cansada así que subí a mi cuarto y me di una ducha.

Después me puse la pijama y como no tenía tareas dibuje lo primero que se me vino a la cabeza, por alguna razón eso me hacía sentir mejor y estar segura de mis decisiones, siempre hacia eso cuando estaba preocupada.

Mi madre paso al frente de la puerta de mi habitación y me dijo que ya era hora de dormir.

Y eso fue lo que hice ya que estaba muy cansada y al día siguiente tenia colegio.
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