La forma

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-Da igual, hay que hacerlo o si no mi familia sufrira

-esta bien, es algo larga

-soy todo oidos

-bueno, primero tienes que tener 4 velas y tiza, con la tiza tienes que hacer un cuadrado lo más perfecto posible, tendrás que llevar puesta una túnica negra y con la capucha en la cabeza puesta también, tienes que poner una vela en cada vértice de el cuadrado que dibujaste con tiza, sin prenderlas, ya que al final de todo el ritual se prenderan y de esa forma sabrás que el espíritu se ha ido, luego de poner las velas tienes que poner una olla en medio de el cuadrado con agua y un fogón abajo, luego de eso tendrás que poner en la olla sangre de TODAS y cada una de las personas que fueron y han sido atormentadas por el fantasma, luego de tener la mezcla de las sangres tendrás que colocar este osito de peluche...- dijo entregandome el osito

-¿por que el osito?

-es de su hijo

-está bien, continúa

-luego de echar el osito a la olla este se evaporara haciendo una figura de una cara satanica con el vapor y luego de inmediatamente tendrás que echar un rosario bendito, sólo de esa forma podrás librarte al fin

-pero, ¿tiene que ser sangre de todos?¿hasta los muertos? ¿hasta mía?

-sí, de todos

-está bien, muchas gracias

- no hay de que- dijo mientras sonreía y se marchaba

esa misma tarde fui a comprar la tiza, las 4 velas y la túnica

me fue bastante difícil en general buscar la túnica ya que no la vendían en ningún lado pero luego de buscar el día completo sí la encontré

días después decidí ir a buscar la sangre de todos y cada uno de los afectados pero primero decidí investigar más sobre aquel fantasma, así que le pregunté a mi madre sí es que acaso conocía a alguien de ese estilo y dijo que no, le hice la misma pregunta a mi abuela y respondió lo mismo que respondió mi madre

al día siguiente fue el entierro de mi abuelo, mi abuela lloro ríos enteros, fue horrible yo también lloré bastante hasta que vi al fantasma justo sentado en la rama de un árbol mirándome, riéndose de mi sufrimiento, fui hacia allá

-de que te ríes estúpida

-de que gracias a mi tu abuela es viuda jajajajajajajajajaja- dijo entre risas

-cállate perra

-¿como me dijiste?-preguntó seria

-P E R R A, mala madre, viuda

-estas muerto-dijo tirándose encima mío para tomar control sobre mi cuerpo

luego de varios minutos luchando por que ella no lograra entrar a mi cuerpo se aburrió y fue a poseer el de un guardia de el cementerio, quién llegó con una pala

-suelta eso idiota- dije enojado

-jajaja no, ahora vas a morir- dijo pegandóme con la pala en el brazo

-¡AAAA!- grite de dolor

-¿duele?

-sí- dije secamente quitándole la pala y golpeandolo

luego de unos 30 minutos logré que ella saliera de el cuerpo de el guardia sin que yo lo matara

esta se canzo y luego de unos minutos discutiendo se fue

finalmente llegamos a mi casa y nos fuimos todos a dormir, todo iba bien, hasta que el despertado de mi habitación sonó a las 3:00 am, al escucharlo sonar lo apague y me di vuelta para dormir nuevamente cuando escuche

-hola...- justo detras de mi

yo simplemente ya bastante despierto me di vuelta  y no vi a nadie, sólo vi la sombra de un árbol que se reflejaba en las puertas de mi closet mientras estas eran movidas por el viento

pasaron largos minutos y pensando que fue mi imaginación volví a darme vuelta para dormir, cuando cierro los ojos escuche

-hola...-pero esta vez frente a mi

abrí los ojos y otra vez no había nadie, lo único distinto que había esta vez fue que la puerta de mi casa estaba abierta, me levanté y fui al baño a lavarme la cara, al prender la luz la vi reflejada en el espejo, al darme vuelta para verla ya no estaba

-¿hola?- pregunté muy asustado

-hola...- me respondieron en el mismo tono que las dos veces anteriores- jajajajajajajajajaja- se escucho luego de un par de minutos

asustado fui a despertar a mi madre a su habitación, pero para mi sorpresa ella ya no estaba en su cama ni en ningún lado

-¿madre?- pregunté al ver que no estaba en ningún lado

-jajajajajajajajajaja- obtuve como respuesta nuevamente

-detente

-te lo advertí- dijo mientras se prendía la luz de el pasillo

fui a ver que había y vi que todas las paredes de la casa ahora estaban rojas, pero un rojo de color sangre, todo absolutamente todo tomó ese color, la luz, los muebles, las puertas, los espejos, todo... menos... la puerta que daba hacia el sótano, esta estaba en su color natural, blanco cremoso

ya paralizado por todo el miedo y por los pensamientos que pasaban por mi cabeza sobre que habría pasado con mi madre abrí la puerta

a diferencia de la casa el sótano estaba en su color natural... negro

sólo se escuchaba murmullo bajo las escaleras así que decidí bajar

al bajarme de el último escalón la puerta se cerró, fui corriendo hacia arriba y cuando trate de abrir la puerta esta estaba cerrada con llave, no se abría

me di vuelta y vi una luz demasiado débil viniendo de abajo

El día que cambió mi vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora