Atraido a una gordita

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El fin de semana acabo ya era lunes de vuelta a la rutina diaria.
Me levanto me pongo los audífonos y solo comienzo a correr. Aun recuerdo la noche del domingo fue una de las mejores noches que he tenido. Mi mente aun tiene grabado ese momento en que las rosas caían y solo observaba su sonrisa. Al pensar esto una sonrisa se me formo en los labios.

Luego de terminar la rutina me dirigía a mi casa lo mas rápido posible. Al llegar a casa como supuse quien estaría ahí para complicarme la vida, sí ella, Kendra.

-¿Que quieres ahora?- le dije entre suspiros ya que había corrido.

Ella en silencio toma su bolso y busca algo saca un sobre blanco. Mi mente lo que pensó en ese momento fue me sacara de mi casa o mi trabajo como siempre. Ella lo tira en la mesa.

Cogí el sobre, la miré, ella sonríe y se coloca amabas manos en su cintura junto a mover su pierna con ansiedad.

Tomo un bocado de aire y comienzo a abrirlo. Introduje mi mano y sentí algo suave y liso pero a su vez pegajoso. Eran fotos las saqué de aquel sobre, al ver cada una era yo y Arianne. La vez cuando la toque detrás de la universidad. La noche del domingo besándonos y yo arrodillado.

-¿Que es esto Kendra? ¿Otro de tus juegos? ¿y que haces con estas fotos?- le dije en tono preocupado.

-No, no es un juego Lemuel. Sabes tengo ganas de llamar a mi padre y sabes que lleva esto ¿no? 5 segundos de publicidad inmediata y un gran arresto para ti.- me dijo con ironía mientras daba vueltas a mi cuerpo deslizando su dedo. Yo rodaba los ojos.

Tome su mano, le había dicho que no se atrevería y al parecer eso invocó al diablo.

-¿Quieres ver como lo hago?- ella tomo su celular comenzó a marcar rápidamente. Me di prisa antes de que siguiera la llamada tome su celular colgué la llamada.

-¿Que quieres a cambio para que no publiques eso?- le pregunté

-Termina esa relación en cuanto antes y estemos juntos luego de un tiempo se anunciará la boda. Es todo luego de las tres te llamaré para confirmar que hayas terminado.

-Eres lo mas sucio que hay sobre la faz de la tierra.- dije

-Pero aun así te gusta como te hago el sexo salvaje, mi amor no lo niegues.-sonrie, me acaricia la mejilla, me guiña un ojo y se va.

¿¡Por que!? ¿¡Por que a mí?! Suena el celular. Era mi mánager.

*Llamada*
Lemuel: ¡Diga!

Mánager: Lemuel, recuerda tienes cita a las 2:30 con la revista Tú de adolescente ya sabes eres un hombre que deja de que hablar. Hasta las pubertas te desean.

Lemuel: Casi lo olvidaba. Entonces estaré ahí a las 2:30.

Mánager: Hasta luego.

*Fin de llamada*

No estaba bien del todo. Sentía que el mundo las oportunidades de felicidad se fueran. ¿Que haré con Arianne? Era lo único que en mi mente rondaba.

Me fui a dar un baño como siempre, escogí un conjunto de ropa. Y luego fui al auto. Iba a tiempo pero el tránsito estaba pesado. Por poco causaba un accidente. Todo era como si no estuviera ahí.

Llegó a la universidad y lo primero que veo es a la hermana de Arianne tomando fotos. Al yo verla ella se cohíbe como si hubiera echo algo mal.

Ponche y me dirigí al salón. Tome asiento en mi escritorio y comencé a escribir en un papel para los que le daba clase de 1:30 a 3:00.

Ella llega emocionada aún era eso de las 7:10. Se va a la parte de donde se sienta que es atrás. Me textea diciendo que vaya a donde ella a la parte de atrás donde se guardan los libros que es un pequeño salón. Voy a donde ella.