Caminaba durante el día como un perro hambriento en busca de un jugoso manjar. Normalmente no me atrevía a hacerlo a esta hora ya que mis gustos son complacidos bajo la luna.
No me importaba si aquel pequeño ser que jugueteaba por los calles o por los parques, era débil; de hecho, eso me motivaba más aún.
Cada vez que lo hacía, mi mente solo recordaba aquellos momentos en los que yo pasé por eso.
Solo quería compartir mi dolor con los demás. Eso estaba bien ¿Cierto?
Debido a que este sector goza de una baja seguridad, eso me facilita las cosas, y muchas veces los que viven dentro de esta área tienen miedo a denunciar este tipo de hechos debido a que creen que fueron ejecutados por pandilleros locales.
¡Ja! Ingenuos.
Pobres simios como esos no serían capaz de hacerlo con la delicadeza y...belleza con la que yo lo hago. A pesar de ser una persona no muy estable mentalmente, sé como hacer que mi victima no se sienta nerviosa.
No...eso solo dificulta las cosas. Sé como tratarla. Con paciencia y con una sonrisa en el rostro. Eso demuestra una increíble predisposición mía y de la persona que selecciono.
Hasta aquel día. Todo era así.
En una de mis rondas nocturnas, aviste una victima, una linda jovencita con el cabello rubio y ojos celestes, una tez blanca que hacía que mis sentidos se alborotaran.
Me acerque a ella y le pregunté:
-¿Qué haces tan sola a estas horas pequeña?-Busco mi casa- respondió derramando lágrimas.
-Oh! Ya veo niña- le dije pensando en aquel trofeo- ¿Quieres que te ayude a encontrarla?
Ella no respondió y se puso a llorar.
Le dí un abrazo y luego caminamos por el vecindario, obviamente yo hacia aproximaciones hasta mi casa, mientras le ofrecía a la niña algunos dulces, algo típico.
Ella los aceptaba, era tan tierna e inocente.
Cuando llegamos al portón de mi casa, le dije que pasara que en la mañana seguiríamos buscando a sus familiares.
Con desconfianza ella entró. Solo podía pensar en que el plan resultó con éxito. Esa noche sería divertida.Le ofrecí un té caliente con un componente que debilita el sistema.
Al tomarlo ella se sintió cansada.
La lleve a la cama, ella no sabía lo que ocurría, yo solo comencé a sacarme la ropa, solo pensaba en lo que me tocó, solo pensaba en esa pequeña niña.Pero, de repente todo se tornó oscuro, los ojos de la niña se volvieron blancos y ella se levantó poco a poco.
Me aleje de la cama.Ella quedo de pie sobre la cama y la oscuridad parecía nacer desde lo más profundo de su interior. Se quitó la ropa lentamente; y toda su tez blanca quedó expuesta, se acerco a mi.
Yo trataba de alejarla a patadas, pero todos mis esfuerzos eran inútiles, su cuerpo consumía todo mi ser, y parecía que todo lo que soy comenzaba a desaparecer.
Aunque hubiera sido muy afortunado que solo quedara en esa idea; a medida que se acercaba se inclinó un poco y pude ver como todo mi cuerpo era destrozado, como si una podadora pasara sobre mí.
Grité. Y ella me miro y sonrió.
-¿No le gustaba de esta forma señor?- me preguntó- con todos sus antecedentes pensé que le gustaría.
-¡Aléjate monstruo!- grité
-¿Monstruo?- exclamó inclinando la cabeza- pero...yo solo quiero invitarle algo.
Extendió su brazo y al abrir la mano me mostró un dulce.
Luego, todo se volvió oscuridad, hasta que desperté en este lugar.
-¿Recuerda usted algo mas?- preguntó.
-No, eso es todo- respondí tajante.
-Sabe- comenzó a hablar ese sujeto- al día siguiente los policías dieron con el paradero de la niña; ella se encontraba dormida en su cama; le preguntaron acerca de como llegó a es lugar y si lo conoció, a lo que ella dijo:
"Si, un señor amable me trajo hasta aquí y me ofreció que me quedara a descansar, me dio de comer y me dio mucho sueño, me trajo hasta la cama y...empezó a sacarse la ropa...no podía moverme...solo podía verlo...pero en un momento él se quedó quieto, como si viera algo detrás de mi...pero estábamos solos...gritó y se cayó, daba patadas al aire tratando de alejar algo...luego, me quede dormida. Hoy cuando desperté tenía una nota junto a mi"Me quedé sorprendido, ese lugar, ese lugar...
-¿Quiere que lea la nota señor?- preguntó el sujeto.
Quede en silencio, todavía pensando donde demonios me encontraba, ¿por qué me defendí de algo que no se encontraba allí?
-La nota- continuó sin esperar respuesta- dice:
"Ví tus actos y quedé sorprendido, es hora de que disfrutes de una mejor estancia"
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DOCE: Antes De Morir
Short StoryLa muerte es un poema que dedicamos al final de la vida... La muerte es la última melodía con la que bailaremos... La muerte es una broma que te cuenta el peor de los cómicos... La muerte es la oscuridad que le pondrá luz a tu vida... Un abrazo de u...