365 días junto a ella|Ross Lynch y tú|

Capitulo 10

Ross volteo a ver a Laura, con un cierto desagrado, había arruinado una de las charlas más largas con ____, donde al parecer se habían llevado mejor que nunca.
Ross: ¿Qué sucede Laura? –Se recargo en la puerta-
Laura: Estaba aburrida y vine aquí –entro-
Ross: Laura, no soy un payaso para divertirte cada vez que estés aburrida –Cerro la puerta-
Laura: No lo eres hermoso, pero si eres mi novio –Tomo sus mejillas y lo beso-

Narra Ross

Recuerdo cuando conocía Lau, ella era dulce y tierna, ahora es una fría, que solo me quiere para salir a pasear, la verdad no se qué sucede con ella, siento que las cosas son diferentes, sus besos ya no son los mismo, sus abrazos ya no los siento como antes, al estar con ella no es lo mismo, pero no entiendo porque no la dejo.

Ross: Lo siento, pero estoy cansado, y ya es tarde –Miro el reloj, marcaban las 12:23-
Laura: ¿Quién eres? ¡El Ross Lynch que conozco no es un ñoño! –Molesta-
Ross: ¿Soy un ñoño por querer dormir, al estar cansado? -Cruzo los brazos-
Laura: Sabes, mejor me voy, antes de que me pegues lo estúpido –Se giro y salió-

Ross solo la miro, ahora sí, ya no sabía quién era esa chica, la que era su novia, rió ante lo ridícula que se ve al pelear con él, se giro y subió las escaleras, iría con ______.
Entro a su habitación, ella estaba acostada de lado, su cabello estaba de lado, con una camisa blanca sin mangas, y un short negro.
Ross subió a su cama y le dijo al oído.

Ross: Ya se fue –Con una dulce voz-
Tu: ¿Tan rápido? –Sonrió-
Ross: Ammm...si, venía a molestar –rió-
Tu: Mmmm, bueno prometí no decir nada –Se giro para acostarse boca arriba-
Ross: ¿Seguimos platicando? –Se acomodo recargado en la cabecera de la cama de ella-
Tu: La verdad estoy cansada, pero si quieres platicamos –lo miro-
Ross: Bueno, seguimos mañana, lo bueno que es sábado, así podemos salir o no lo sé, hacer algo juntos, para empezar de nuevo, ¿Qué opinas? –Sonrió-
Tu: Estupendo –Sonrió amable-
Ross: Bueno, me voy para que descanses –se deslizo por la cama hasta bajarse- hasta mañana, descansa –le dio un beso en la frente-

Ross sonrió y salió de su habitación, las cosas estaban mejorando entre ellos, aun que aun no es hora de cantar victoria.  

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