¿Eres nueva escribiendo?
¿Quieres crear una buena historia?
Aquí hay simples consejos que te ayudarán a darle ese toque especial a tu historia.
Recuerden, no hay historias malas ni tampoco malas ideas, al contrario, solo necesitan de un poquito de a...
1. Piensa en dos personajes principales para tu historia, que sean las personas más importantes de tu novela.
Piensa en los eventos pasados de sus vidas, en sus debilidades y fortalezas, en amores pasados, etc. y llega a conocer a tus personajes perfectamente, se el personaje.
Los personajes son una gran parte de una novela de romance. Para que parezca real debes pensar en que los personajes tengan defectos.
Nadie es perfecto, así que ¿Por qué habrías de crear personajes perfectos? Sin embargo, el hacerlos verse perfectos entre ellos está bien siempre y cuando haya defectos imperceptibles.
Nota: No hagas que tus personajes se obsesionen entre sí o en una sola cosa. El lector debería poder conocerlos más allá de la historia romántica (a menos que sea el enfoque de tu historia).
2. Escoge sus edades.
Todo depende a qué tipo de personas va dirigida (adolescentes o adultos).
Por qué al escribir una historia de romance para adultos debes pensar que los personajes de quince años de edad no será una gran éxito. Lo mismo sucede si aplicas el sentido contrario, es decir si estás escribiendo un romance de adolescentes, trata de no hacer personajes de treinta o cuarenta y tantos años, pues esta es la edad de la mayoría de los padres de los jóvenes que estarán leyendo la historia, y en vez de imaginarte al personaje, apuesto que imaginaras a tus papás.
A los adolescentes y jóvenes adultos les encantan más las novelas de romance así que sería mejor si tus personajes tuvieran entre 18 y 24 años de edad.
Dirige las edades de tus personajes al grupo de edad que desees que lea tu novela.
3. Decide cómo será el entorno.
Si es en el futuro, es probable que no se parezca al mundo real. Si estás escribiendo un romance paranormal trata de crear tu propio mundo; básate en el subgénero de tu historia de romance. No tienes que ser demasiado específico si no quieres, pero a tus lectores les parecerá mejor poder visualizar la historia si pueden ver el panorama del entorno.
Además, el entorno puede ayudarte a crear mejor a tus personajes, por ejemplo, si viven en un lugar donde siempre está soleado, tal vez uno de los personajes quiera vivir en un lugar donde llueva.
4. Piensa qué cosas hacen que realmente tu historia sea un romance.
Incluye eventos que estén relacionados con el romance como las citas y los desamores.
Piensa en ideas interesantes, no las mismas que otras historias han usado; tal vez la ex pareja de uno de los personajes está celosa de la relación y quiere reconquistar al personaje o los padres no aprueban la relación y seleccionan una pareja diferente para el personaje. No olvides usar otros personajes para tu libro como ex parejas, padres (si es sobre adolescentes) y amigos.
5. No escribas siempre lo típico.
"Un día de campo con mariposas por doquier" o algo como "matrimonio, divorcio, cita, matrimonio, divorcio, cita, engaño, rompimiento".
Ten en mente que deseas que tu novela sea una de las que sobresale de las del resto. ¡Se original!
6. Dale a la pareja una problemática durante el trayecto.
Me refiero que no caigas en la típica escena donde el joven conoce a la chica, se enamoran y son felices para siempre, eso es algo repetitivo.
Haz la historia interesante, por ejemplo, "El joven conoce a la chica y no se caen bien hasta que él la ve emborracharse en una fiesta, la ayuda por lástima y se da cuenta del porqué ella es así" o también "El es un joven empresario que años después de haberse graduado se reencuentra con una compañera de la escuela con la cual eran muy amigos, pero raramente ella lo odia".
Dependiendo del tipo de novela que estés escribiendo crea diferentes problemas para tus personajes como que ella puede ser un fantasma, él es 10 años mayor que ella y su familia no lo aprueba, ella es discapacitada o que él es del futuro.
No sé, ¡Algo loco!
7. Escribe una diálogo creíble.
Por ejemplo: "— Eh, soy Ana, ¿Te conozco?" Es un tipo de diálogo que suena real.
Puedes crear diálogos cursis como: "—Tienes los ojos más hermosos"; sin embargo, no hagas toda la novela con comentarios cursis. Las novelas deben ser pasionales. Dales emociones.
Incluye palabras descriptivas. Por ejemplo las palabras "padre" o "chido" suenan poco profesionales y tienden a disuadir a los lectores. ¡No te rebajes!
8. Termina la novela bien.
Puedes escribir una novela de romance increíble pero si el final no es satisfactorio, será recordada como "buena" o "me gustó" pero "el final fue malo".
No te apresures en escribir el final sólo porque estás cansado de trabajar laboriosamente capítulo tras capítulo. Es mejor finalizar la novela cuando el joven y la chica se quedan juntos. Esto hará a los lectores muy felices porque quieren que los chicos se queden juntos para siempre. Por ejemplo Romeo y Julieta.
9. Usa gramática, ortografía y puntuación apropiadas.
Puede que esté de más pero... ¡Ten cuidado con las faltas de ortografía!
Nadie quiere leer algo que no se entienda.
Espero que todo esto les sirva! Hasta el próximo consejo chicos!
Se despide, Mariana.
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