Camina por el hospital, mira del lado a lado de nuevo, sus pensamientos lo estaban consumiendo de una forma mortal. Las palabras de ese hombre lo habían dejado atontado.
¿Porque todo lo que decía sonaba tan correcto ?
Hablaba como si supiera quien era, pero no lo sabia, era un completo extraño de la realidad.
Se sienta en una silla desocupada muy cerca de donde su mujer había dado a luz, se sienta recto como siempre, con un gesto serio. La boca sellada y los ojos fijos en un lado de la habitación. Iba vestido de una forma formal, le gustaba sentirse importante o un " hombre de negocios" aunque lo había dejado de ser hace bastante tiempo. Las horas pasaban y nadie le mencionaba nada al respecto del bienestar de el bebe o su padre. Las enfermeras procuraban ignorarlo y los doctores le daban respuestas sueltas. Jugaba con sus manos, entrelazándolas, buscaba una forma de distraerse, pero ir a su "mundo" no era una opción acertada, siempre que quería escapar su cuerpo no lo dejaba era como si siempre quisieran sabotearlo.
Su estrés subía, igual que sus preocupaciones. Habia entrado en una sicosis mental, su cuerpo actuaba por si solo. Los sentimientos se habían apoderado, ya no importa lo que el quería o lo mas razonable.
"Respuestas""
"Respuestas"
"Respuesta"
Se levanta de la silla y camina de forma apresurada, examinando las caras de todos. Buscando a su objetivo. La furia se ve en sus ojos, busca el numero donde debería estar su esposa. Camina tan rápido que las enfermeras lo esquivan múltiples veces.
Hace tanto que no se enojaba así, se sentía extraño. Normalmente era un hombre tranquilo, sin preocupaciones. No trabajaba, tenia suficiente con lo que le había heredado su padre antes de fallecer.
Ve los números de las habitaciones, todo pasaba tan rápido. Camina a paso veloz hasta la puerta, hasta quedar frente a ella, ojea la puerta de madera, poniendo su mano en la perilla, sintiendo el frió del metal tocando la yema de sus dedos.
Entra con seguridad, mirando al piso, acomoda su fleco, James tenia un pelo relativamente largo, no suficiente para hacerse una coletilla, pero si le llegaba maso menos abajo de las orejas.
- ¿ Interrumpo?
Pregunta de manera sarcástica, ve a su esposa quitando la mano del cuello de ese hombre, poniéndose de un color pálido, intentando escusar sus actos. Las palabras no le salían.
Después ve al hombre, con una mano recostada en la cama, sosteniendo todo su musculado y gran cuerpo, lleno de tatuajes, pero el que mas le llamaba la atención era el de águila, que le rodeaba todo el brazo.
El águila, le parecía una animal majestuoso, así era como James pensaba que era ese hombre. Majestuoso, mejor que el, mas apuesto, mas actitud y el, el era un perdedor. El águila tenia algo en el pico, como una nota.
"We are learning to fly"
- Si, si interrumpes- dice el hombre que hace poco estaba besando a su esposa, su nombre es Astor.
- !Astor cállate¡- dice la mujer, intentando cerrarle la boca con su mano.
- Cariño, no quieres que te castigue,¿ verdad?- le hace una mueca, seguida de una sonrisa burlona.
La chica baja la cabeza, avergonzándose. James en el otro lugar estaba parado, analizando la situación. Viendo los movimientos de cada uno.
- Creo que debería irme y cariño, no me voy a ser cargo de la bebe. Ya tienes suficiente con este...."macho" de aquí.
El hombre de cuerpo tatuado se para frente a James, con la espalda recta, viéndose firme y apuesto como siempre. Lo mira de arriba a abajo. Y sonríe una vez mas. James sigue perplejo.
- Astor vete- le ordena Roxi, con lagrimas en los ojos. Que hacia que se le corriera el poco maquillaje que tenia, llevaba una bata blanca, que le cubría toda la parte delantera del cuerpo.
- Ya voy ya- sube sus manos de forma juguetona y abre la puerta. - Hey Rox, si quieres que te vuelva a hacer el "trabajito", solo llámame- Le guiña un ojo y sale de la habitación.
James se sienta en un sillón blanco, pone sus manos en medio de las rodillas, suspira varias veces. El cuarto era abierto, con una pequeña ventana y un lindo cuadro. Pasaron unos minutos, minutos que parecían
horas.
- ¿Hace cuanto?- pregunta James, con una voz chillona y cortada.
-¿Que?, yo... el y yo.. ¡te amo!.
- ¡NO!, no Roxana, para con tus mentiras- grita, exaltando la voz, sin darse cuenta se había levantado.
- Fue una vez, yo.. yo no sabia, Astor me dijo que me amaba.
- ¿ no sabias que?, que me iba a dar cuenta, que hiciste lo incorrecto al cogerte al imbécil o ¡no! espera, no sabias que te habías casado con un hombre y pensaste que lo hiciste con una cabra.
James ríe sarcásticamente, poniendo sus manos en el rostro, que ahora estaba cubierto de lagrimas - cuidado cariño, porque Astor te puede castigar.
- ¿de quien es la niña?
Roxana entra en shock, las palabras no salían, mueve la cabeza de lado a lado.
- Yo.. no se.
------------------------------------------------------------------------------------------------------
Pobre Roxi...... Maten me XD
Ok no, como cuando soy extremadamente tarde, les conté que llegamos a las casi 280 visitas, puede ser poco pero aunque XD
No tengo mucho que decir, así que pidan para que sea mas constante, porque sea tonto XD, si el capitulo tiene alguna falta o no entienden por favor díganlo para arreglarlo porque soy muy nueva y enserio quiero que les guste..
Y el capitulo quedo un poco corte pero ñee
"We are learning to fly"
"Estamos aprendiendo a volar"
( si ven esto digan pollo XD)
ESTÁS LEYENDO
El que no quiere ver
Fantasyes sobre una niña que pierde a su madre y vive con su padre. Todo era feliz.. pero ¿Que pasa cuando no quiere ver?