Enamorado De Una Fujoshi

Capítulo 2

Es realmente extraño que de la noche a la mañana Jaden se acerque a mí.

No es que me moleste, de hecho, he intentado acercarme varias veces a él. Sin embargo esto me huele a gato encerrado.

— Oye Cristian — Llamó la atención — ¿Me prestarías tu celular un momento?

— Claro. Pero... ¿Para qué? — Hablé sacando mi teléfono y entregando lo.

— No te preocupes, es sólo para anotar mi número. Si somos amigos debemos estár contactados ¿No?

— S-Sí, eso... creo.

Anotó su número y el mío para después entregarme nuevamente el teléfono.

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— Logan — Llamé la atención de mi pareja el cual estaba en el sofá — ¿Crees que algo le ocurre a Jaden?

— ¿Por qué lo dices? — Dejó la vista de la tv y la dirigió a mí. Si de Jaden trata él no duda en atender rápido.

— Hoy antes de que fuera a clases me preguntó cómo nos conocimos.

— ¿Y eso qué tiene de malo?

— Él ya lo sabía. Y hasta donde sé el doctor no ha dicho que su problema le de fallo en el disco duro.

— ¿Podrías dejar tu urbanismo? Jaden no es un robot. Aunque tienes razón Jaden ya sabía de nuestra historia.

— Eso es raro. Habrá que preguntarle.

— Jaden no nos dirá — Logan sonrió por lo bajo — Él sacó eso de ti, hasta que no esté listo no lo dirá.

— ¿Y por qué lo sacó de mí? — Interrogué cruzando mis brazos.

— ¿Quién se estuvo casi un mes en saber lo que siente, mal intento de Onodera? — Su comentario obligó a mis mejillas sonrrojarse — Oh vamos — Se levantó del sofá y con sus brazos y rodeó mi cuello — No te pongas así, es un juego cualquiera.

Se acercó más a mi y lo besé.

Con nuestros diecisiéte años de pareja y sigo sintiendo lo mismo. Desde esa vez que acepté mi amor por él.

Desde esa primera vez que lo besé.

Desde la primera vez que lo abracé.

Desde la primera vez que lo hice mío.

Cuando sus labios gimieron mi nombre por primera vez.

Creer que todo eso sigue intacto, intocable, impecable.

Y lo más increíble es que aún no existe razón para que deje de ser así.

— ¿Sabes algo Logan? — El levanta su vista en dirección a mí — Creo que es hora de darle de comer a gatito.

— Pues es curioso porque... — Suelta su mano de mi cuello y la desciende hasta mi miembro — Gatito tiene hambre.

Solté un gemido ahogado gracias a que apretó seductoramente mi pantalón. Lo tomé estilo princesa y lo llevé a nuestra habitación.

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— Entonces ¿Eres adoptado? — Vaya, jamás creí que Cristian fuera tan curioso.

— No, no soy adoptado.

— ¿Cómo no vas a serlo? No han existido pruebas de embarazos masculinos.

— Nunca dije que salí dentro de un hombre.

— ¿Entonces?

— ¿Conoces la eyaculación artificial?

— Sí.

— Bien, mis padres hablaron con una agencia, alquilaron un vientre y mezclaron su esperma.

— Eso quiere decir que...

— Sí, básicamente soy la creación de tres seres. Aunque me parezco más a Logan y Jhon. Y a mi "madre" sólo la he visto dos veces en mi vida.

— Vaya... eso es... sorprendente.

Ya habíamos salido de clases, y justo ahora íbamos a su casa. ¿Por? En la última clase el profesor de sexualidad nos dijo para hacer un trabajo, y para mi buena o mala suerte me tocó con Cristian.

En estos momentos me encuentro mirando por la ventana, viendo las casas, los árboles de los parques y las nubes pasar, es algo incómodo estar en el auto de Cristian, es más, no sabía que él tuviera carro.

— ¿Jaden me estás escuchando? — ¿Le molestaría que le diga no?

— N-No. ¿Qué dijiste?

— Suspiró — Te pregunté si querías ir a una fiesta junto a mí y mis amigos.

— Pero... ¿No deberíamos hacer el trabajo?

— Eso es para dentro de dos semanas. Podemos reunirnos en cualquier otro momento. Además saldremos antes de que lo pienses.

— E-Está bien, pero... — Wow... estoy tan interrogador como él — ¿Por qué deseas que vaya?

— A la fiesta irán tres idiotas que odio, pero ellos no lo saben, y posiblemente lleven un montón de putas y se olvidarían de mi existencia, así que si te llevo podré tener alguien con el cual hablar.

— Y si esa es tu inquietud ¿Por qué simplemente no vas?

— Serán los dieciséis de mi hermanastra, no puedo faltar.

— Oh... entonces con gusto te acompaño.

— Bien, te dejaré en tu casa y paso por ti en tres horas ¿Te parece?

Yo asiento mientras le regalo una sonrisa, no me habría imaginado que mi casa queda a una cuadras de la casa de Cristian.

Ahora sólo será de vestirme para la fiesta... necesitaré la ayuda de Logan si es que quiero estar decente para esa fiesta.