El Bosque de Valtyr

Danzando con Elfos

Dando unos cuantos pasos al frente Camus dio una media vuelta hacia sus acompañantes y empezó a hablar sacándolos asi de su ensimismamiento.

—¡Bienvenidos sean entonces mis estimados humanos a Eluvem, El gran claro en el bosque! — las palabras de Camus sonaron mas fuerte de lo que en verdad eran y los invitados estaban un poco inquietos, ninguno de ellos comprendía muy bien lo que estaba pasando, hace tan solo unos segundos estaban caminando en el bosque y ahora se encontraban frente a una ciudad salida de la nada, Tom y Lucas intercambiaron miradas nerviosas mientras que Regulus aun se encontraba mirando con asombro los titánicos arboles frente a él.

—¡Por favor sean tan amables de acompañarme!— Camus fue quien finalmente rompió el silencio que se había impuesto una vez más, y con un ademan de la mano y media vuelta empezó a caminar a paso ligero hacia la ciudad, mientras que los demás elfos ya habían desaparecido en los interiores de la ciudad junto con el cuerpo de Oscar.

Las calles eran simples pero espaciosas, tal vez unos veinte metros de extremo a extremo, a lo largo de las calles habían una gran cantidad de viviendas realmente apretadas entre si, y cada una parecía estar hecha a gusto, pues los materiales que las componían iban desde piedras preciosas hasta algunas realmente extrañas que parecían un árbol con puerta; mientras avanzaban centenares de elfos jóvenes, con apariencia de niños jugueteaban en ellas y fue nuevamente la voz de Camus lo que devolvió al grupo a la realidad.

— Los elfos somos seres inmortales y de eterna juventud, sin embargo tenemos un tiempo de maduración y cada elfo tiene un periodo diferente, pueden diferir entre un par de décadas a unos pocos milenios, en este tiempo el elfo se desarrolla y tiene tiempo para aprender y familiarizarse con su rol dependiendo de la rama que provenga y la familia a la que pertenezca.

Todos estaban tratando de digerir esa información, pero empezaron a darse cuenta que las apretujadas viviendas empezaban a desaparecer para dar paso a imponentes edificios y las calles empezaron a ensancharse aun mas, cuando la ultima vivienda desapareció de la vista se encontraron parados frente a una imponente edificación que abarcaba por lo menos unos centenares de metros por lo que se alcanzaba a ver, pero era probable que fuera incluso más que eso teniendo en cuenta solamente la entrada de la ciudad.

— ¡Bienvenidos a la casa de los Sylf!— dijo Camus sin siquiera dar la vuelta mientras empujaba las puertas, sin hesitar Camus entro, al otro lado de las puertas todo se veía terriblemente oscuro pero basto pasar por el umbral para que todo se iluminara era como estar en un lugar totalmente diferente, un vasto espacio al aire libre en el interior del recinto se encontraba justo delante de ellos, una extensión de grama lo cubría y una fuente adornaba el centro.

Pasar por el umbral fue una sensación desagradable para los humanos, fue como pasar a través de una cortina de agua y les hizo recordar al momento antes de llegar a la ciudad.

— ¿Esto es la casa de tu familia Camus?— Pregunto Regulus finalmente cuando se sacudió para quitarse de encima la incomoda sensación.

Camus quien se mostro complacido al darse cuenta que finalmente empezaron a sentirse lo suficiente cómodos como para formular preguntas contesto — En efecto, esta es la casa de toda la familia Sylf y de hecho es la construcción mas antigua de Eluvem— dijo mientras les mostraba una sonrisa llena de autosatisfacción.

—Eso quiere decir que tu familia es la más antigua en este lugar, ¿No es así?— señalo Tom quien estaba mirando fijamente la fuente.

Una pequeña mueca se formo en el rostro de Camus justo antes de responder, como si la respuesta fuera amarga en su boca — En efecto, somos la familia más longeva viva— Tom entendió de inmediato la situación y decidió abstenerse de preguntar nada mas sobre ese tema, mientras que Lucas por su parte se disponía a formular una pregunta.