Friendzone|Joel Pimentel.

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—¡Joeeel! Ya apúrate, no quiero llegar tarde

—Ya voy Naty, dame unos segundos para poder encontrar mi billetera—dije alzando las almohadas— ¡Aquí está!

—¡Por fin! Ahora vámonos

—But first, let me take a selfie —dijimos ambos riendo

Tome mi celular para poder tomar varias fotos, entre las muchas escogí una para subirla a Instagram y como pie de está puse "Día de amigos ¡a divertirnos @nattyriv!" recibí unos likes entre esos de Yoyo y Sebas. Salimos de mi casa para dirigirnos a la plaza comercial, iríamos al cine como primera parada en ese día, al llegar vimos la cartelera y nos decidimos por "La noche de las bestias". Compramos palomitas y refrescos, entramos a la sala, minutos después de muchos trailers de películas comenzó la que esperábamos. Después de casi dos horas salimos de ahí hablando del filme

—Opino que... La próxima vez tenemos que venir a ver Suicide Squad 

—Sólo si te pintas el cabello como Harley Quinn—reí. 

—Estás loco, como si mi mamá me diera permiso

—Buen punto, ¿ahora a dónde?

—¡Boliche!—dijo casi gritando

Yo sólo sonreí y asentí, caminamos hacia el lugar. Después de jugar casi una hora y ganarle fuimos por un helado, ella de chocolate y el mío de galleta. Nos sentamos para poder degustar de ellos , Naty sacó su celular y tomó una foto para subirla a IG

"Más momentos así. Este día es de lo mejor, gracias amigo"

¿Vieron? Friendzoneandome desde siempre. Al terminar ella decidió ir a una pista de patinaje, algo lejos pero cuando salíamos solo los dos no teníamos hora de llegada a casa por lo tanto acepte. Nos la estábamos pasando excelente hasta que... Zabdiel llamó.

—Es hora de irnos Joel—dijo algo desanimada

—¿Por qué? 

—A Zab no le ha agradado la idea de que sólo estemos nosotros, no quiero problemas con él.

—Pero era... Es nuestro día, Natalia

—Lo sé, lo sé, en serio perdón

Salimos de la pista y del lugar. Si decía que no estaba enojado diría una gran mentira, Zabdiel fue capaz de arruinarnos nuestro día, yo iba callado y serio.

—Oye, no te enojes

—Es que no puedo creer que por él que solo tienes 2 años de conocerlo lo prefieras. Cuando nuestra amistad es de casi 10 años

—Cuando te enamores lo vas a entender

—Cuando me enamore haré todo lo posible para no ser como Zabdiel.

Camine más rápido dejándola atrás nunca lo había hecho pero no podía seguir ahí, escuche que me llamaba pero no voltee casi corrí para alejarme de ella, llegue a casa azotando la puerta de la entrada, mi mamá muy asustada se dirigió hasta ahí

—Perdón mamá, no fue mi intención

—¿Qué haces aquí? Apenas son las 6, te esperaba hasta las 9 o más tarde ¿Pasó algo?

—Zabdiel, eso pasó—contesté caminando hacia uno de los sofás y tirándome en él. Mi madre caminó hacía mi, yo alce mi cabeza para que ella se pudiese sentar y después acostarme en sus piernas

—¿Qué pasó? Cuéntame

—Estábamos en la pista de patinaje y él le llamó no se con exactitud que le dijo pero ella me pidió que nos regresáramos porque a su novio no le gustó la idea de que sólo estuviéramos los dos... ¡Mamá! ¿Entiendes eso?—dije algo exaltado— ¡Lo prefirió a él! ¡A ÉL!

—A ver hijo, tranquilo, pronto ella se dará cuenta de que el famoso Zabdiel no es para ella

—¿Pronto? ¿Cuándo? Me estoy cansando de esperar

—Para grandes cosas mucho tiempo se requiere—dijo mi abuela, era la frase de un poeta.

Yo solo las mire, tal vez tenían razón, mi abuela me dio un chocolate, para que me sintiera mejor. Salí al pequeño jardín con una cobija, la extendí en el pasto y me acosté sobre está, conecte los auriculares y me los puse, la música comenzó a inundar mis oídos, observaba las estrellas, después cerré los ojos concentrándome en la canción "Prettiest Friend", sentí como alguien llegó a mi lado pensé que era uno de los perros pero después alguien quito uno de mis audífonos y se acostó a mi lado, abrí mis ojos, me encontré con Natalia, ella me sonrió.

—Perdón—salió de mi boca como un susurro.

—No, te tienes que disculpar, no quería que nuestro día terminará estando enojados, te vi desde mi casa acá así que vine a que terminará viendo el cielo

—¿Y Zabdiel?

—Se terminó yendo con unas amigas—hizo una mueca.

Y seguía sorprendido que ella continuará así su relación, pero tal y como ella lo había dicho terminamos nuestro día viendo el cielo estrellado y riendo por anécdotas de la infancia.  

n/a

¡Hoolaa! Ya tenía tiempo que las había abandonado, peerrrrdón, pero aquí el capítulo, espero que les haya gustado, si es así dejen sus votos y comentarios me harían muy feliz.

¡Nos leemos en el próximo capítulo, bye!