YUNCHAN- la visita inesperada

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Yunhyeon

Ya habían pasado tal vez dos, tres, no cinco, no siete, si exactamente siente semanas desde que no vuelvo a ver a Chanwoo cuál era la razón, El despacho de contabilidad, ¿Por qué? Fácil había tantos papeles por los cuales atender que ya no he tenido tiempo de ir a esa cafetería, que para ser honesto extraño ir, extraño el rico aroma de café pero hay algo que extraño as que el café ¿Qué es? Simple extraño a esa persona de sonrisa sincera, esa que les da la las personas cuando está atendiendo sus pedidos.

¿Qué hacía ahora? Fácil de contestar me encontraba en el despacho mientras escuchaba los enormes truenos que me indicaban que la lluvia no cesaría pronto, cada gota que caía podía escucharse chocar contra las ventanas de cristal. Estaba concentrado haciendo papelería de público en general y más cosas importantes como ordenación de documentos, cuando escuche que alguien toco la puerta del despacho contable.

Trate de ignorar aquel golpe, ya que quien pensaba tocar a estas horas de la noche, aparte de quien querría salir con estas condiciones climáticas. Seguí haciendo lo que se suponía que tenía que hacer, cuando de nuevo sonó la puerta. Levante mi vista y mire por unos segundos aquella puerta metálica, deje salir un enorme suspiro pero decidí levantarme del asiento.

Camine unos cuantos pasos, tome una de las cortinas para observar de quien se trataba, pero ese intento fue fallido porque me encontré con un chico parado haya fuera mojándose con esas enormes gotas de lluvia, no podía ver su rostro ya que una gorra tapaba gran parte de su cara.

Suspire un poco pero no dude dos veces y abrí la puerta para encontrarme con aquel chico bajito de la cafetería, su mirada era triste y llena de desilusión.

-ah puedo ayudarte en algo. El levanto su mirada y solo asintió.

-Necesito que.... Ayudes a Chanwoo. Cuando escuche aquello fue como si algo muy frio me recorriera en la columna vertebral.

–Qué pasa con él. Trate de sonar natural. – oh perdón pasa. Sin más me hice a un lado para que entrara.

-A enfermado, hace unas semas fui a visitarlo porque tiene tiempo faltando a la cafetería, cuando entre a su departamento me encontré que estaba ardiendo en fiebre. Lo mire unos segundos.

-Bueno y porque bienes a decirme esto a mí, yo no soy nada él, a quien deberías de avisarles seria a sus familiares no a mí. El me miro tristemente.

-Chanwoo no tiene familiares en Seúl, él vive solo. Cuando escuche aquello algo dentro de mí se ahueco. –Por eso vine hasta aquí, porque he visto como lo mirabas y sé que tú sientes algo por él cierto. Mire a aquel Joven de baja estatura y pensé "tan obvio soy".

-Pero esto es diferente. Aquel chico de mirada caída me miro afligido.

-¿Por qué? Tú lo quieres no. lo mire unos segundos cuando baje la mirada al suelo.

-Sí, lo quiero, pero él no me quiere a mí, Ni siquiera se da cuenta de mi presencia cuando voy a la cafetería. Aquel chico de baja estatura comenzó a reír bajito.

-Valla si ambos son unos tontos. Lo mire mal por unos instantes. –El siempre te miraba cuando llegabas, siempre volteaba hace a esa ventana donde te encontrabas, siempre nos hablaba de ti. Estaba a punto de interrumpir pero aquel chico bajo siguió hablando. –cuando dejaste de ir a la cafetería Chanwoo se miraba diferente, Ya no se encontraba ese brillo en sus ojos, todos en la cafetería tratamos de no prestarle tanta atención, pero después comenzó a faltar, comenzó a dejar de asistir, ahora creo que si nos preocupamos por él, si más decidí verlo y me encontré con un Chanwoo metido en la cama ardiendo en fiebre, eso fue lo más doloroso para mí, sin más me apure a llevarlo al hospital y me informaron que si hubiera dejado pasar unas horas más él pudo haber muerto de calentura. Cuando escuche esa mínima palabra sentí como si me fuera por un hoyo sin fondo.

-Yo...Yo no sé qué decir estoy muy conmocionado. El tomo una de mis manos y lentamente dejo un pequeño papel en ella.

-No digas nada, solo espero que llegues a visitarlo. Sin más aquel chico pequeño volvió a colocarse su gorra abrió la puerta y salió del despacho, aun la lluvia estaba, lentamente cerré la puerta y abrí aquel papelito que contenía un número de teléfono y una dirección. Teléfono 444-23-009, Dirección privada edificio #13, Departamento #4, seguía una y otra vez leyendo aquel papel.

"Que debo de hacer" "Que"

LES TRAIGO OTRO CAPITULO DEL YUNCHAN QUE ES LA PAREJA MAS LINDA, A QUERIA HABISARLES QUE YA TERMINARE ESTA HISTORIA DEFINITIVAMENTE, ESPERO QUE LES GUSTE Y NOS VEMOS EN EL PROXIMO Y ULTIMO CAPITULO.

IN LOVE WITH YOUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora