Humanoide (BillDip)

Capítulo I: Mundo desconocido.

Hola a todos!!!

Bueno, este fanfic se me ocurrió cuando escuchaba Tokio Hotel y pues tuve que escribirlo XDDD. De hecho, esta historia estará inspirada en el álbum de Humanoid, y dependiendo del capítulo y parte de la historia, les publicaré la canción que sirvió como inspiración.

Empezamos con la canción que nombra al álbum: Humanoid.

Bill esconde muuuchos secretos, que veremos poco a poco y ya no digo más porque spoileo XDDD. Espero les guste el capítulo, si es así, voten y comenten por favor.

No me maten por no actualizar los otros fics, espero que el siguiente a publicar sea El bosque de los ciervos o el Mayor misterio del océano.

Ya saben, Gravity Falls NO me pertenece.

Capítulo I: Mundo desconocido.

Humo...

Una explosión...

Es el fin... de nuevo...

Jugarse la vida de toda una especie...

Nada funcionaba...

Siempre era la misma historia...

Contra el amor...

Contra la lucha...

Contra las reglas...

Contra el poder...

Contra todo...

La soledad duele...

No confíes en nadie... y enfócate en tu objetivo.

Sus ojos se abrieron, parpadeó un poco para acostumbrarse a la luz. ¿Dónde estaba? Se sentó tocándose la frente. Sintió que estaba en un lugar mullido. Bajó la mirada y vio que estaba en algo rectangular y acolchado, y que otro rectángulo más delgado lo cubría hasta su cintura. Parecía que esas cosas no poseían vida.

-Por fin despiertas.

Miró hacia el lugar de donde provino esa voz y vio un ser vivo parado frente a él recargado en la puerta. Tenía el cabello gris en diferentes tonos, unos rectángulos en sus ojos y usaba ropa que parecía muy holgada y suave. Miró a su alrededor y pudo ver que el cuarto donde estaba tenía cosas muy desconocidas para él, y al mismo tiempo, todo se veía muy primitivo.

-¿Quién eres? –Preguntó con desconfianza. A pesar de no ser de aquél mundo, estudió algunas lenguas primitivas, aunque no comprendía más que lo básico.

-Mi nombre es Stanford, pero puedes decirme Ford. ¿Cómo te llamas? –Dijo el hombre acercándose al ser frente a él. El otro lo miró un poco confundido. No entendió bien lo que dijo aquella criatura, pues habló rápido. Pareció que Ford comprendió, pues puso una mano en su pecho- Ford. –Dijo para señalarse. Luego tocó el pecho del desconocido esperando que éste entendiera. Pero al otro no le daba mucha confianza ese hombre, aún así no le quedaba de otra. Se tocó con su mano derecha el pecho.

-Bill. –Dijo con desconfianza. Bill detectó otra presencia cerca y volteó rápidamente a la puerta alertando a Ford creyendo que iba a atacar. Se puso en guardia y tocó debajo de su chaqueta un arma que llevaba en caso de que el alíen o lo que fuese, atacara. Vio rápidamente hacia el lugar que Bill miró y pudo ver un mechón de cabello castaño que se asomaba detrás de la pared para no ser visto. Bajó la guardia y se relajó un poco.

-Ya te vio, Dipper. -Bill miró a Ford fugazmente para mirar de nuevo hacia la puerta. Pudo ver entrar otro ser con la misma estructura que Ford pero era más bajo y menos arrugado. Quizá era más joven. El chico se acercó con miedo hacia Bill, lo cual fue muy obvio para todos, se podría decir que el chico temblaba un poco. Ford lo tomó de un hombro para darle confianza. –Tranquilo, sólo lo asustaste. –Dipper miró a Ford con cierto miedo y luego miró al ser extraño. –Creo que deberías presentarte. Toca tu pecho para señalar tu nombre.

Dipper hizo lo que dijo Ford. Tocó con su mano derecha su pecho. –Dipper... -Dijo con voz temblorosa. Para Bill, ese ser no representaba ninguna amenaza, así que lo miró solamente con el ceño fruncido y tocó su pecho.

-Bill. –Mientras Ford le explicaba a Dipper algunas cosas que Bill no entendía debido al idioma, miró sus manos e hizo una mueca. Sus manos estaban quemadas debido a la explosión y debía curarlas. Miró sus brazos viendo algunas venas fuera de su lugar, con razón se sentía tan débil. Tocó su cara esperando no encontrar más heridas, pero por su sentido del tacto, creyó que sí estaba mal. Luego, el hombre que se presentó primero salió dejándolo solo con el chico nervioso, el cual evitaba mirarlo a la cara.

Bill siguió tocándose la cara tratando de adivinar la gravedad de su estado. Dipper lo miró un momento. -¿Te duele mucho? –Bill lo miró sin entender, y miró a otro lado sin querer responder. Dipper abrió un cajón buscando algo y Bill alzó la cabeza poniéndose en alerta, pero el ser sólo sacó algo pequeño que parecía inofensivo y que el tal Dipper le extendió. –Espejo. –Bill miró el espejo, luego a Dipper. Extendió su mano con cuidado tomando el objeto entre sus manos sin saber qué hacer. ¿Eso era para curar? Dipper le hizo mímica para señalar que debía poner el espejo frente a él. Bill lo hizo pero no dejaba de mirar fijamente al chico, luego, lentamente giró sus ojos hacia el espejo viendo su reflejo. Entendió a lo que el chico se refería. Miró su cara y se preocupó. Definitivamente sus heridas tardarían en sanar.

Dipper por fin se había animado a mirar su rostro aprovechando que el extraterrestre estaba muy ocupado mirándose a sí mismo en el espejo. Parecía tener piel humana pero ésta tenía un tono entre amarillo y bronceado, pero en su frente faltaba un pedazo de piel pero por debajo tenía lo que sería el cráneo pero era de... ¿Metal?, y se veían algunos cables, su cabello era mitad rubio y mitad negro, corto de la parte trasera y largo del frente, podía hacerse un flequillo.

Era alto, quizá medía 1.90, y era delgado. Usaba un traje de cuerpo completo que parecía una armadura de metal negro con toques dorados. Sus guantes estaban quemados, al igual que sus dedos y un poco sus brazos, dejando ver algunos cables fuera de su cuerpo. Pero lo más llamativo eran sus ojos. Uno era dorado con la pupila alargada y negra, como si fuese un gato, y el otro era totalmente rojo y brillaba, como si fuese una luz. A Dipper le parecía un humanoide.

Bill notó que el chico lo miraba fijamente y volteó a verlo de manera desafiante. Dipper bajó la mirada y se encogió de hombros. El rubio alzó una ceja sin comprender. Dipper subió lentamente la mirada y vio con timidez a Bill, el cual no había cambiado su expresión. -¿No... no entiendes nuestro idioma? –Preguntó lentamente, y aunque no podía traducirlo tal cual, Bill entendió el mensaje.

-Poco... -Dipper rápidamente miró a Bill con asombro, sus ojos se abrieron mucho debido a la sorpresa. –Cosas básicas...

Bill le restó importancia a saber un poco del idioma, se parecía un poco a otro idioma que conocía.

-¿De dónde eres? –Como Dipper aún se sentía amenazado, su voz era nerviosa, tímida y hablaba con lentitud, permitiendo que Bill lo pudiese entender un poco. Bill miró el rectángulo que lo cubría y lo apretó entre sus manos. No deseaba hablar de eso. –Entiendo... -Dijo el castaño sin saber qué más decir. El momento se había vuelto incómodo...

Bueno, desde el principio lo fue, además de extraño, es decir, ¿Cuántas veces en tu vida, tu tío construye un portal extraño y un día en una prueba del aparato, sale un chico, herido, que emanaba metal líquido de algunas partes de su cuerpo y estaba inconsciente?