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Danny se hallaba durmiendo en su cama con una bella sonrisa plasmada en su rostro, una tan grande que sorprendería a cualquier productor de la disquera de Sumerian que tuvo que ser testigos de los ataques de estrés y llantos de parte del vocalista.

Su sonrisa transmite tranquilidad y paz. Ben tiene mucha curiosidad sobre que estará soñando o con quién. Al principio él piensa que sueña a que es un sexy oso intentando coquetear a alguna voluminosa mujer pero Bruce lo conoce mejor que nadie y sabe que sus expresiones a las cuales mira cada yoctómetro de su rostro no expresa esa teoría. Ahora él piensa que puede estar soñando a que está en casa de nuevo, viviendo una vida normal como lo hacía en su adolescencia pero lamentablemente solo estaría soñando porque más adelante venían trabajos más complicados. Por suerte Danny había aprendido a volver de gira.

Ben solo quería saber sobre que estaría soñando, jamás se había sentido tan curioso desde que veía que sus cervezas desaparecían pero resultó ser de que Cameron se infiltraba en su casa a robarle sus licores.

-¿Sobre que estarás soñando, Danny? -preguntó en un susurro mientras iba hacia la puerta para irse y dejar a su amigo en la completa tranquilidad de la cama de Ben.

Antes de girar la perilla e irse a hacer otra cosa alterna a la banda decidió voltear y dirigir su mirada hacia el vocalista que dió un gemido tan suave que hasta al más hombre de hombres le daría ternura y eso pasó con Bruce en ese instante.

-En ti, Benjamin.

El chico de la puerta se puso nervioso, estaba tan nervioso que hasta temía que haya escuchado sus pensamientos, luego recordó por suerte que eso era imposible y lo que había preguntado no tenía nada de malo para que se sienta de esa forma.

-¿Qué? -preguntó con una enorme timidez que era fácil de notar.

-Que he estado soñando contigo. -contestó con seguridad mientras aun seguía echado en ese suave colchón.

Danny siempre creía ese mito de que si soñabas con alguien, ese alguien pensó en ti antes de irse a dormir, tenía todas las ganas de decirle sobre aquel mito urbano a su amigo pero pensó que lo iba a malinterpretar así que prefirió no arriesgarse.

-Oh, de seguro fue una pesadilla. -dijo tímido nuevamente provocando unas risitas de parte del ojiverde.

-No... Fue hermoso. -contradijo mientras esbozaba una pequeña risilla.

Hubo un silencio muy incómodo entre ambos, el de tatuaje de palomas se sentía rodeado por unas rejas imaginarias provocada por la sonrisa de Worsnop ya que tenía desesperación de irse pero al verlo sintió por su corazón que no debía hacerlo.

-¿Sobre que trataba? -preguntó luego de un largo rato.

-Estabas tú, con ese cabello tan negligente mientras fumabas un cigarrillo. Yo te vi, tú me viste, empezamos a charlar y..... Creo que eso es todo.

Ben lo miró confuso, sabía por dentro de que algo más tenía que decir, para él era muy raro de que soñar a que hablas con tu mejor amigo pueda ser un sueño tan hermoso en la forma en la que Danny lo dice. Definitivamente tenía todo el jodido derecho del mundo para sentirse completamente nervioso.

-¿Qué carajos está pasando? -dijo mentalmente Benjamin. -Quiero irme. ¡¡AHORA!!

Daniel se dio cuenta fácilmente de que su compañero se sentía muy incómodo, pero no deseaba espantarlo ya que debía hablar seriamente con él como sea de algo.... Digamos que no es bueno pero tampoco es malo.

-Ben. -dijo Worsnop mientras se levantaba de la cama.

El de tatuaje en los nudillos se dirigió al balcón e hizo una señal para que el otro lo siga.

Hasta el final //Brusnop (completada)//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora