Lo Juro.

Capítulo 3.

La semana se había ido rápido y las chicas se la habían pasado burlando de mi puesto que el chico siempre me chifleteaba cuando estacionaba mi moto y yo solo lo ignoraba o sacaba el dedo, el amigo de el Cameron con el que compartía biología, se burlaba de el siempre puesto que no le prestaba tanta atención.

Cara nos habia dicho que había una fiesta y que debíamos asistir pues era la primera del año, así que decidimos ir, pero cada una por su parte, se preguntarán ¿Porque?, pues a mi no me gusta como maneja Hannah y Lia se emborracha hasta caer muerta y Cara aun no sabe manejar y yo pues debo cuidar a Lia porque solo yo se como controlarla.

Llego a casa y veo una nota en la nevera que mamá había dejado.

"Hija no llegaré temprano el almuerzo esta en el horno al igual que la cena, voy a salir con Derek, jijiji... No me esperes, tu hermano esta con la vecina te veré mañana para contarte todo.
Att.: Tu madre.

Mi mamá en una ¿cita? Y con su jefe esto no me lo creo. Vamos debe ser alguna especie de broma vamos mi mamá. Eso si que no me lo creo.

Caliento el almuerzo y recuerdo que debo ir a preguntarle a la vecina si mi hermano se puede quedar con ella, puesto que no regresaré hasta tarde.

Termino mi comida y salgo a buscar a la señora Thompson y al tercer toque sale, con unos guantes de cocina, y al abrir un poco más la puerta mis fosas nasales se llenan de ese delicioso aroma a galletas.

-Taylor, querida no te esperaba hasta mas tarde incluso estaba horneando galletas con tu hermano-. Le sonrió yo sale para abrazarme y embarrarme de harina.

-No señora Thompson, venía a pedirle un pequeño favor.- Ella me observa y asiente le dice a mi hermano que la espere en la cocina y que vigile las galletas del ogro, esa tiene bastante imaginación.

-Dime, ¿Cual es ese pequeño favor?.-

- Será que Tyler, puede quedarse a dormir con usted.- Ella me observa y me mira seriamente, creo que dirá que no.

-Claro que si, hubieras visto tu cara, el es buena compañía, nos vemos mañana querida, ahora vete a arreglar para asombrar en esa fiesta.- La miro y quede helada, como sabia que iría a una fiesta, me sonríe y le devuelvo la sonrisa.

Después agradecerle una 10 veces, miro la hora era temprano, hice mis tareas y me quedaba tiempo así que tomaron una siesta para aguantar toda la noche.

Me levanto a las 7:45 según mi teléfono, así que decido darme una ducha de 20 minutos. Cuando salgo me dirijo al armario tomo un vestido que es 5 dedos arriba de la rodilla, me lo pongo y ese rojo no era tan chirriante, me pongo unos tacones negros y en ese momento recuerdo que voy en moto y me siento estúpida así que llamó a Lía y cuando logra contestarme le cuento y se ríe como una maniática, y me dice que pasara por mi pero hasta las 9:30 y me cuelga, así es ella cuando no ha terminado de alistarse

Me seco el pelo con la secadora y decido plancharlo y dejar una ondulaciones en las puntas, me levanto y me miró en el espejo y sorprendo de lo bien que me ha quedado, mira la hora y faltan 20 minutos antes de que aparezca mi lunática amiga, así que decido lavarme los dientes antes de maquillarme, cuando terminó me aplicó un poco de rimel en las pestañas, polvos en el rostro y un labial rosado no muy fuerte, ni muy apagado.

Cuando oigo el claxon de amiga, me encaminó hacia la entrada, cuando me subo a su auto me mira detenidamente.

-¿Quien eres? Y ¿Que has hecho con mi Taylor?.- Pongo los ojos en blanco y ella solo se carcajea mientras conduce hacia la fiesta me dice que no se puede creer que tenga puesto un vestido y lleve tacones, la verdad ni yo me la creo pero Cara, insistió en que debíamos dejar una buena impresión.

Cuando llegamos el lugar ya esta un poco lleno y Lia llama a Cara quien le dice están en la que parece ser una pista de baile.

Cuando entramos al lugar, el calor es perceptible y veo a unas cuantas personas ebrias, seguimos adentrandonos y miro a Hannah y Cara, bailando como si fuera el fin del mundo.

Cuando intento hablarle a Lia ella ya esta hablando con un chico castaño, y me rio porque mi amiga nunca cambiará.

Camino al lugar donde están las chicas y al igual que Lia no se pueden creer de como ando vestida. Bailamos y cuando me canso me dirijo a lo que se supone debería ser una barra.

Le pido al chico rubio, que me de un Ron con cola, y el asiente, luego de 5 minutos me la entrega y cuando bebo el primer trago siento como recorre mi garganta.
Luego de este trago mi cuerpo pide algo más fuerte, y pido un chupito de vodka, me lo bebo de un trago y le pido otro.

Y no se cuántos me he bebido solo puedo sentir el alcohol recorrer mis venas y la euforia que siento por bailar así que busco a las chicas y no las veo le pido a un chico la hora y me informa que son las doce a penas. Me asustó puesto que no veo a Lia y no con quien mas regresar.

Me encaminó a la salida como puedo y cuando llego a la puerta chocó contra algo, muy duro y blando, así que elevó mi mirada y es ese chico engreído hasta su nombre es de engreídos.

-¿Balcasa? Enserio eres tu.-