El Príncipe Y Rey De Egipto Primera Y Segunda Temporada {one Shoot} (jb)

Dos

Capitulo dos.

Justin.

--Señor faraón, tenemos a las Doncellas para el príncipe Justin-- Me encontraba sentado el lado de mi señor padre, hoy es el gran día para poder escoger a una bella doncella para que sea mi esposa.

--Hazlas pasar-- Dice el faraón hacia adelante observando a cinco bellas doncellas, cada una lucia un vestido de tela fino y joyas.

--La primera se llama cristal, tiene veintitrés años y es hija del capitán Robert-- la chica pasa adelanta y hace una reverencia. 

El criado paso así, la verdad ninguna de las cuatros que han pasado me han interesado, ojala que la doncella numero cinco sea de mi gusto.

--Pasad la numero cinco, ella se llama Giselle tiene veinticuatro, hija de el gran sacerdote.

La doncella pasa adelante y hace una reverencia, levanta la vista y quedo imnotisado por sus ojos almendrados de un color negro potente, levanto una ceja, encontré a mi princesa.

--Padre-- Le susurro al faraón--Me gusto Giselle

--Que pase adelante la numero cinco-habla el faraón, la hermosa chica pasa adelante y nos sonríe--Seras la futura princesa.

~

--Hola madre-- Beso su mano sentándome al frente suyo.

--Hijo mio, ¿Ya has elegido a tu futura esposa?-- Le sonrió.

--Si madre, ella es hermosa su nombre es Giselle.-- Mi madre me sonríe con orgullo.

--Se casaran mañana mismo-- fruncí el ceño.

--¿Tan pronto madre?

--Si hijo, es la tradición así Amón-Ra los tendrá protegido.-- la miró con ambas cejas alzadas.

--¿Podemos casarnos la otra semana?

--Consultarlo con tu padre-- Asiento frunciendo el ceño--ah hijo a llegado una nueva criada, si necesitas algo no dudes en pedírselo a ella.-- asiento robándole un poco de uvas para comerlas.

--¿ah si?-- me hecho otra uva en la boca-- ¿Cuando llegó?

--No hables con la boca llena.

--Lo siento madre-- me rio.

--Y a tu respuesta, llegó hoy.-- la miró sacándole una manzana y salgo corriendo antes de que me regañe por comerme sus comidas.

Llego a mi cuarto y ordenó a los criados que me dejen solo, dejo la gorra a un lado y me miro al espejo, ordeno mi cabello.

Se preguntaran como que el príncipe no se a rapado ya que es una tradición, adoro mi cabello le tuve que rogar a mi padre a que me lo dejara crecer ya que de pequeño me lo han rapado.