Hoy era el día de mi cumpleaños hacía ya varios años que no lo celebraba, desde que murió mi padre deje de hacerlo. El murió exactamente este día, desde ese horrible día mi madre había caído en el alcohol y se había olvidado de que tenia un hijo, tan solo tengo 8 años, es horrible depender solo de tu madre y que ella sea una alcohólica que no se preocupa por nada. Por suerte mi padre nos dejó suficiente dinero para el resto de nuestras vidas, siempre habíamos sido una familia de mucho dinero, pero eso a mi no me interesaba, yo solo quería a mi padre de regreso, pero sabia que eso era totalmente imposible.
De este día sabia que lo único bueno que saldría era que vería a mi mejor amiga, una pequeña niña rubia que conocí cuando tenia 3 años solamente, a los 7 ya se había vuelto lo mejor que me había pasado, ella estuvo allí cuando la necesité cuando murió mi padre, aunque suene patético ella era la que me defendía en el colegio, yo nunca fui de tener muchos amigos, solo tenía a mi primo Luis, a un niño que conocí hace 2 años llamado Steve y a ella, la hermosa y tierna Chloe, mi primo era mayor que yo por un año y medio, pero curiosamente estaba en la misma clase que yo.
Llegue al colegio en pocos minutos ya que no vivía muy lejos, me tenia que venir solo y caminando ya que mi madre era una asquerosa alcohólica que no se preocupaba por mí.
Iba caminando por los pasillos del colegio hacia mi casillero y aún no había visto a Chloe de seguro venía retrasada, aunque ella tampoco vivía muy lejos la mayoría del tiempo llegaba tarde, pero nunca había llegado tarde en mi cumpleaños. Algo me huele mal aquí...
Escucho que alguien me llama y volteo a ver quién era, aunque reconozco esa molesta pero divertida voz.
-Feliz cumpleaños primito- Dice Luis abrazándome más fuerte de la cuenta.
-Vaya que estas viejo amigo mío- Añade Steve alborotando mi cabello.
Les dedico una sonrisa amable a ambos y les doy las gracias, todos nos dirigimos al salón, pero lo que me extraña es que aún no se nada de Chloe, ya me estoy empezando a preocupar...
Ya estando en el salón aún no tenía señales de Chloe, estaba medio dormido en clases porque sinceramente esta clase me aburría a un nivel descomunal, escucho la puerta del salón abrirse y escucho una respiración agitada, levanto la cabeza para ver quién había llegado y sonrío de oreja a oreja al ver quién es.
-Perdón por la tardanza, me quedé dormida y el auto de mi madre ni quería encender.-Dice ella caminando hasta su asiento.
Me relajo al saber que está bien y linda como siempre, cuando toma asiento a mirarla y ella me da una sonrisa cálida y amigable.
-Feliz cumpleaños Ed.-Dice ella guiñándome un ojo.
Ella era la única que me decía así. Llega la hora de salida y me despido de Luis y Steve y me voy con Chloe.
-Me tenías preocupado, no me vuelvas a asustar así.- Le dije en un tono un poco seco.
-Está bien, Novio- se ríe al escuchar lo que acaba de decir. En cambio a mi no me ha hecho gracia, tuve que voltear a otro lado para que no viera que me ha hecho sonrojar.
La acompaño hasta la entrada del colegio donde está su mamá esperándola, se despide de mi con un abrazo y se va.
Llego a mi casa y al abrir la puerta me encuentro con que todo está vuelto un desastre, camino muy asustado entre todo el desastre y al llegar a la puerta del cuarto se mi mamá veo un líquido rojo que sale por debajo de la puerta. Abro la puerta lentamente tratando de contener las lágrimas que se acumulaban en mis ojos por el miedo, cuando entro en la habitación no se ve nada, está todo obscuro y lucho por encontrar el interruptor de la luz, cuando por fin lo encuentro presiono el botón y se enciende la luz, cuando volteo a ver qué era lo que había pasado en este cuarto me llevo una sorpresa.
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Consumido Por La Oscuridad
HorrorEdward es un niño inocente que posee una habilidad muy destructiva que descubre a una corta edad, para su mala suerte su padre murió cuando el tenia 4 años de edad exactamente el día de su cumpleaños lo cual hace que el deje de celebrarlo desde ento...