Cambio de vida

Capítulo 5:

-Lily!- escucho que me llaman, pero no me quiero levantar- Oh no tu no te escapas- sentí como me quitaban la sabana. Ahí si me levante, pero como un zombie.

-Un ratito mas- hice un puchero, seguramente estaba con el cabello revuelto y parecía un panda.

-Nop, ahorita viene mamá y tienes que estar despierta, julia ya fue a recogerla-dice y me jala del brazo para salir de la cama.

Mamá vendrá....

Vendrá mamá!!!!

Se me iluminan los ojos, hasta parecerían dos faroles, okey si soy una exagerada.

-Yeiii!!-grito y voy corriendo al baño a cepillarme los dientes, mientras Flor calienta el agua para tomar un baño.

Terminó de bañarme y cambiarme, me puse un vestido floreado que me compro mamá en navidad y bajo con Flor.

Comimos el desayuno, mientras yo seguia con mi deslumbrante sonrisa que podría estar en un comercial de dientes perfectos okey exagere un poco.

Mientras daba saltitos de emoción, es decir..iba a venir mamá!!

-Ya parale pareces saltamontes-rie Flor.

-Hey!- hago puchero y le pego en el hombro- Yo no soy un saltamontes!- le saco la lengua

-Tienes razón no eres un saltamontes, eres una niña rata- dice y rie como foca asfixiada

Ella siempre me ha puesto ese apodo desde que una vez por curiosidad agarre una rata y se la enseñe, grito como loca y me hizo lavarme las manos mas de cincuenta veces y con desinfectante.

Ah y tambien porque de mas chiquita me encantaba el queso, ahora no mucho.

Agarre una tortita que aun no me había comido del desayuno y se lo tire en la cara, puso cara seria pero después se comenzó a reír y me tiro una de sus tortitas en mi cara tambien.

Comenzamos una lucha de tortitas en la cara de la otra, aunque no teníamos ya casi ninguna, reíamos como focas retrasadas, me encantaban estos momentos con mi hermana.

Se escucho un carraspeo, dejamos nuestra pelea y nos giramos a ver quien era, y la vi.

Era mamá!!

Estaba en silla de ruedas, pero no me importo, solo quería abrazarla y sentir su calidez denuevo.

Quería decirle lo mucho que la había extrañado y que me diera besos en la frente y me preparara su deliciosa comida.

Me acerque corriendo y la rodee con mis brazos.

Ella sonrió y me devolvió el abrazo, se sentía tan bien.

-Te extrañe mucho mamá, te amo nunca lo olvides- dije y ya sentía como me picaban los ojos, iba a llorar, no puse resistencia, es decir, solo tengo 10 años tengo derecho a llorar ¿no?

Aunque no soy de esas personas que creen que llorar es de débiles, yo creo que es todo lo contrario.

Llorar es de valientes, llorar es mejor.

Te desahogas.... limpias tu interior, demuestras con cada lágrima lo que has sufrido y que lo has podido soportar.

Entonces mi pregunta es, ¿porque no llorar?

No es debilidad, es librarse de un peso en tu interior.

Es mejor desahogarse a ahogarse en el interior.

-Yo te amo muchísimo mas mi niña, no sabes cuanto te extrañe, te quiero mucho - escuche sollozos, tambien estaba llorando y aunque suena maliciosa, me reconfortaba ya que estaba librandose, desahogandose y eso es mejor.

-Solo falta papá!- la apreté mas fuerte contra mi, estaba feliz, solo faltaba papá y volveríamos a ser la misma familia de siempre. Pero los sollozos de mamá fueron mas fuertes y no cesaron, me quede con una interrogante ¿papá volverá? ¿verdad? me paralice, no creo que sea de otra forma, es decir si mamá se pudo recuperar, papá tambien ¿verdad?.

Pero oi decir que papi estaba mas grave...

Y cuando lo vi, estaba muy palido, y en mi sueño...me produjo escalofríos.

-¿Porque papi volverá, verdad?-dije con mi voz frágil, no , no puede ser, papi volvería lo tengo seguro.

-Ehh...li-ly e-espérame un momento voy a cambiarme de ropa para ir a pasear y recuperar el tiempo perdido - me miro e intento hacer una sonrisa pero salio como una mueca.

Me preocupe mas, pero igual le hice caso, me fui a la sala y espere sentada en el sofá.

Luego de unos minutos mamá bajo, con otra ropa, Flor y tia juli la ayudaban a dar cada paso, después llegó a la silla de ruedas y la sentaron, la llevaron hasta las puerta y se giraron a verme.

-¿Que esperas? vamos a disfrutar del dia! - dijo mi madre, pero se notaba a kilómetros que ella no estaba entusiasmada y sinceramente yo tampoco lo estaba.

Todo mi entusiasmo se fue por el desague y solo mi cabeza tenía espacio para pensar en una cosa.

Mi padre...

Pero aun así hice mi mejor intento de sonrisa, me levante del sofá y me sali de casa con ellas.

-Y por cuanto tiempo estarás en la silla de ruedas mami?- le pregunte mientras nos sentabamos en una silla del parque de juegos con nuestros helados en la mano. No tenía ganas de jugar, y eso era poco común en mi, siempre paro saltando de aqui para alla, y lo admito si a veces hasta paresco un saltamontes.

Pero en estos momentos no tenia ganas de nada. Hasta creo que me estaba quedando dormida con los ojos abiertos de no ser porque escuche que mamá me respondia.

-Solo seran unas semanas, el doctor me ha dicho que tengo que guardar reposo y eso es lo que hare- sonrio, pero conocia bien a mi madre como para saber que era una sonrisa falsa. Suspire.

Nos quedamos ahi un rato mas y despues decidimos ir a casa, mamá estaba un poco cansada y no habiamos hecho nada desde que vinimos al parque.

Entramos y yo me fui directo a mi habitacion, era hora de almuerzo pero no tenia apetito, asi que saque debajo del colchon el viejo mp3 de mi hermana que me regalo calladito ya que a tia juli no le gustaba mucho la idea de que una niña de 10 años escuchara musica de una chica de 15, pero a mi me encantaba esa canciones y no me hacian sentir tan niña.

Escuchando la musica y acostada en mi cama abrazando a toby me sumergi en mis pensamientos.

Imaginando los brazos de papá en vez de los de mi osito toby...

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