CAPÍTULO 9 : -Patada, puño, patada.

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Me levanté temprano como dijo Anthony.

Después de un gran desayuno, salimos a correr.

- ¿ Preparada ?

- Más que preparada.

Después de una media hora corriendo lleguemos a una barrio no muy bonito. Bajemos una cuesta y vi el cartel de un gimnasio.

Entremos y vi a gente entrenando en un ring y a otros pegando patadas a un saco.

- Sabes que este no es un lugar bonito para señoritas y menos para novias.- dijo un hombre mayor.

- Viene a entrenar.

- ¿ Ella ?- río

- Sí.

- ¿ Para qué quieres aprender a pelear bonita ? - me preguntó

- Para defenderme

- ¿ De qué ?

- De gente imbécil.

- ¿ Por ejemplo ?-insistía

- De un imbécil que me hizo daño.

- ¿ Te pegó ?

- No.

- ¿ Entonces ?

- ¿ Y si lo hace ? ¿ Y si no puedo defenderme ?

- Eres de las pocas chicas que no quieren que un chico la defienda.

- Si puedo defenderme sola, ¿ para qué necesito a un chico?

- Me gusta esta chica. Eres un chica diferente. Aquí las chicas vienen para ganar dinero. Tú no.
¿ De qué la conoces Anthony ? ¿ Nueva novia ?

- Es mi prima.

- ¿ Tu prima ? Nunca la había visto por aquí.

- No he vivido nunca aquí y nunca he estado aquí. Siempre he estado en California.

- ¿ Te has mudado ?

- Va a vivir conmigo un tiempo. Hasta que no aprenda a defenderse bien no se va a ir.

- ¿ Le tienes miedo a ese chico ?

- No. Ya no.

- ¿ Qué pasará cuando vuelvas ? - preguntó el hombre.

- Le pegaré por hacerme daño.

- Entonces, creo que hay que empezar a practicar pequeña luchadora. Y bienvenida al Noche Blanca .

- Gracias- respondí.

Anthony y yo nos fuimos a una esquina que estaba libre.

- Le has caído bien al viejo Sebastián. - dijo Anthony.

- Eso parece. Bueno, que es lo primero.

- Yo sujeto el saco y te le das patadas.

- De acuerdo, parece fácil.

Empecé a dar patadas y Anthony me paró.

- Si das las patadas así, no dañas ni a una mosca. - dijo- Así. - dio una patada que hizo que el sacó se moviera. - Tienes que meter el culo y girar la cadera. Así consigues que la patada sea más directa y que duela más.

- De acuerdo. - Me puse como él y di una patada. Unas manos estaban en mi cadera. Giré mi cabeza y vi a Pierre.

- Mira, gira la cadera para que quede de lado - giró mi cadera y así quedaba horizontalmente al saco. - Ahora tu sola. - Quitó la mano de mi cadera y obedecí. Di la patada y realmente me salió mejor que antes.

Conviérteme En Una Bad Girl (GBG1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora