Capitulo 1

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-¡¿Es en serio?! - exclamó mi amiga en un tono algo alto llamando la atención de los que pasaban por nuestro lado, mientras caminabamos por los largos pasillos a nuestra primera clase "Geografía" - ¿Pero que no le has dicho todavía? - preguntó refiriendose a mi madre. Ella queria que vayamos a cenar a la casa de los Canela este viernes. La señora Mariana y mi madre eran muy amigas. pero no quiero ir porque obviamente estará él, Jos.
-Es complicado -sonreí de lado.
-¿Qué es complicado? -se escuchó una voz a nuestras espaldas.
-Freddy -sonreí. -Llegaste temprano. -reí. -lo cual es raro, ya que casi siempre llegas segundos antes de que entre la profesora al salón. -Él deja escapar una pequeña risa.
-Bueno, ayer me dormí algo temprano.
-¿Y eso? Que yo sepa tu eres el último en quedarte dormido. -comentó Daniela.
-Digamos que ayer mi prima me obligó a acompañarla al centro comercial. Tenía una cita y a la muy genia se le ocurrió comprar su "outfit" a último momento. -dijo haciendo comillas con los dedos
-¿Por que te obligaria?
-Dijo que queria saber mi opinión acerca de si le quedaba bien, que si yo fuera el chico me gustaria, o no -sonrió de lado. Dann y yo soltamos una carcajada. -¿De qué se ríen?
-Freddy... -habló mi amiga. -te quiero, pero...si yo quisiera la opinión de un chico acerca de un outfit, serías el último en el que pensaría. -rió.
-Como sea. -bufó. -Es asqueroso. -dijo haciendo una mueca y deteniéndose en la puerta del salón de Fisica.
-¿Tu vista para los outfis? Porque...
-No. -me interrumpió. -Hablo de eso. -hizo una mueca de asco. Dann y yo giramos hacia dónde él miraba.

Mis ojos se encontraron con la espalda descubierta de Valeria quién tenía los bazos rodeando el cuello del pelinegro y sus piernas a cada lado de su cintura, mientras éste tenía una mano en su pequeña cintura y la otra subiendo cada vez más la blusa de la rubia, mientras la atraía más a él, si es que eso fuera posible. Ambos se basaban con tanta pasión como si no les importara en lo más mínimo si el lugar estuviera vacío o no.

-¿Que nadie les piensa decir nada? -dije dándome la vuelta ignorando aquella escena.
-La verdad ni ganas de meterme con el engreído ese. -sonrió de lado.
-Y por si lo olvidaste _____, ese idiota no hace caso a nada ni nadie. -se cruzó de brazos. -Además él solito se está destruyendo, mira que chantajear a los profesores no es algo del cual sentirse orgulloso.

El timbre sonó

-Mejor nos vamos. -comentó Freddy. -No llegué temprano por nada. -y comenzó a caminar nuevamente al salón. Daniela y yo reímos para después seguirlo.

(...)

-Entonces... ¿Vamos a la cafetería por algo de comer? -propuso Danny una vez saliendo al receso.
-Yo... No
-Vamos _____, muero de habmbre.
-Yo también, mis tripitas rugen. -hablo Freddy con voz de niño pequeño
-Vayan ustedes, yo al rato los alcanzo.
-¿A dónde irás? -lo ignoré.

Comencé a caminar del lado contrario a la cafetería a pasos rápidos, casi corriendo. Paré de repente cuando vi como a cinco metros de distancia el casillero con un pequeño grafiti con las iniciales "J.C." en la esquina superior. Mi pulso se aceleró cuando vi al pelinegro caminar a este con unos cuadernos y libros entre sus brazos. Se detuvo frente al casillero e introdujo su respectiva clave haciendo que este se abriera dejando ver, por dentro, más libros, cuadernos, carpetas, su horario pegado en la puerta rodeado de fotos en las que está él y en algunas su gata, Luka. Y por último, estaba en una esquina la pequeña nota. Jos se percató de la presencia de este objeto, sonrió y dejó los libros que traía entre sus brazos junto a los otros, y entonces, tomó la nota. Mi corazón comenzaba a acelerarse cada vez más mientras veía como él leía la carta.

-Lo hiciste otra vez... -escuché de repente provocando que me sobresaltara.
-¿Yo? Qué, ¿Qué hice? No entiendo. -dije tratando de disimular un poco, aunque sabia perfectamente de qué me estaba hablando. -Dann suspiró.
-Algún día te van a descubrir.
-Ya lo sé, es solo que... No puedo dejar de hacerlo. -sonreí de lado.
-¿Qué harás si te descubre? O peor aún ¿Y si Valeria se entera? No creo que esté nada feliz al saber que le envían cartitas anonimas a su novio.
-Trato de ser lo más discreta posible... -giré sobre mis talones, quería ver nuevamente a Jos, pero él ya no se encontraba ahí. Lo busqué con la mirada, pero nada. -¿Dónde te metiste?- pensé
-Seguro ya se fué a clase. -habló, como si leyera mi mente. -es lo más lógico, puesto que faltan dos minutos para la siguiente clase. -dijo mirando su celular. -¿Vamos? -asentí. Caminé hacia mi casillero, el cual quedaba a unas tres del de José, tomé mi cuaderno y libro de la siguiente clase y volví con Daniela quien había hecho lo mismo.

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⏰ Última actualización: Nov 06, 2016 ⏰

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Eres Mía || Jos CanelaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora