Porqué evitar tu suave toque,
Si hace olvidarme del dolor.
Porqué evitar el cruce de nuestras miradas,
Si en ellas puedo vivir sin temor alguno.
No es mi orgullo pisoteado quien habla,
Ni he claudicado a tu presencia.
Sabio el tiempo, estricto maestro
Que no perdona ni olvida.
Porqué evitarte, hermosa criatura de fuerte veneno.
Cobardía del hombre que escribe sin ser leído,
De amar sin ser correspondido
Y de ocultar el sentir miedo de ti.
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Cartas a una ex-amante, una solitaria pluma
PoesíaEstas no son solo las palabras de un corazón destrozado No son solo las heridas abiertas de un deambularte del destino No es solo el gesto errático de la ira comprimida Son las lágrimas nunca caídas al frío suelo Son las noches de un durmiente sin s...