El Misterio del Diamante Oscuro

Capitulo 2

Febrero, 2016, Chicago, Illinois.

  840 N Lake Shore  

Ryan en menos de diez minutos baja hasta el estacionamiento. Tarda al rededor de unos cinco minutos tratando de buscar su auto hasta que recuerda que fue dejado en la comisaria. "¡JODER!". Pensó.

Saca su  móvil del bolsillo de su  pantalón para hacer una llamada

Repica tres veces, a la cuarta responden.

-Habla Green.- Dicen desde la linea

-Necesito que pases por mi ahora, es de urgencia, Luke.- Dice Ryan

-Estoy allá en dos.- Cuelga.

Exactamente dos minutos después, llega Luke, en su Audi S5 convertible color rojo, había dejado el auto descapotado para mostrar su piel morena, cabello ondulado y lentes oscuros ocultando sus ojos celestes. Con su típica sonrisa impecable, el amigo de Ryan, era unos años menor que el, y de carisma increíble.

-¿Que pasa bro, como estuvo la resaca?- dice con una sonrisa

-Excelente, pero temo que no hay tiempo para hablar de eso, llevame al hospital Lake Shore, ahora.- Dice Ryan angustiado

-Como digas, bro, pero en el camino debes contarme que paso, abróchate el cinturón.- habla Luke tomando el volante y pisando el acelerador.

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Amelia esta en el regazo de su esposo, el Sr. Taylor. La cual se encuentra en emergencias por un infarto, esta destrozada por que su amor esta en esas circunstancia. Entra Ryan a la habitación..

-Como se encuentra..-Interrumpe el lamento de su madre.

-Lo entubaron y les pusieron un montón de cosas...- Los ojos azules de Amelia se quiebran en llanto.

-Todo estará bien, mamá.- dice mientras le acaricia su cabello rubio corto  -vamos, tomemos un café..

-¡NO!.-Sube la voz.- no me quiero alejar de el, no quiero...

-Vamos, mamá.. Te encuentras mal, un café te hará bie.. -

-No.. ¡No! ALÉJATE DE MI ANIMAL.- le da una bofetada.

En ese momento entra una mujer caucásica de unos treinta y muchos, cabello liso negro  por los hombros y ojos a juego con el cabello,muy formal, tan ejecutiva como siempre. La Señora Alice.

-Déjala en mis manos, Ryan. Amelia-Le habla con paciencia- Ven, daremos un paseo.. La toma por los hombros y se la lleva.

Ryan, sorprendido, aunque acostumbrado por esos tratos de su madre, su enfermedad ha ido agravando con el pasar de los años.. Saca su móvil y escribe un mensaje.

Para: Luke Green

"Avísale a Owen que no iré por hoy, Adam sigue igual

-R."

Sale de la habitación y se encuentra con su nana, Rocio.

-Mijo, como esta.- Le da un beso en la mejilla. - ¡Que te ha pasado allí,eh?.- Pregunta angustiada.

-No es nada..- Dice girando la cabeza.

-La niña Amelia lo hizo otra vez, no?

-Si..

-Pobre de mi niña...- Dice con lamento.- Temo que empeore aun mas

-Eso no pasara, nana. Mi madre estará bien, ella y Adam lo estarán.

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Pasa el día, y Ryan se encuentra sentado en la cafetería, pensando en que estaría en la comisaria, esperando a su nuevo ayudante, ya que el anterior era Luke y fue cambiado de puesto a la zona Informática.. Resulto ser un genio en una. Así que Owen le prometió que le llevaría otro luego, Cuando de repente llega Logan, un hombre de tez morena y barba, vestido de traje, el abogado de la familia.

-¿Como estas, Ryan?

-Bien, tío Logan.- desde pequeño siempre fue muy apegado a el.

-Apenas supe lo de Adam, vine corriendo.

-Los doctores aun no han dicho nada.. ¿Como esta Ema?

-Esta muy bien.. Se encuentra en su taller, no pudo venir, estuvo ocupada en algunos asuntos....

Ema es la prometida de Logan, una mujer asiática de unos treinta años, es la diseñadora personal de Amelia... En ese instante, suena el móvil de Ryan, un mensaje. tal vez era un mensaje de Luke preguntando por Adam, o de Owen su jefe, o tal vez de Ashley, una chica de melena castaña muy atractiva que había conocido ayer la cual intercambiaron números.. Desbloquea la pantalla y lo lleva directo a un mensaje que no era de ninguna de sus opciones anteriores, era un mensaje en anónimo.

De: Anónimo

"El Sr. Taylor no seguirá sufriendo por sus ataque al corazón, le hice un favor. ¡Agradéceme! 

Tienes treinta segundos para despedirte de él, el tiempo se te agota.

-A."

Ryan ve a los lados y no ve a nadie sospechoso y sale corriendo al segundo piso, sube las escaleras con gran velocidad, la adrenalina empieza a despertar en su ser.

Al llegar al piso, escucha los gritos retorcidos de su madre... Sabia lo que había pasado. Llega a la puerta y ve a su padrastro, muerto. Lo mas curioso que vio fue una piedra preciosa de color negra que encontraba en la mesita de noche la cual no estaba allí. Cuando recibe otro mensaje.

De: Anónimo.

"Cuídate las espaldas, Ryan Gold.

-A."