CAPITULO 5

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Cuando abro mis ojos y veo la hora solo había dormido 2 horas eran las ocho de la noche, así que lo más probable es que los chicos ya hayan comido, mejor me di una ducha me puse mi pijama y fui a comer algo para luego dormir, cuando baje pude escuchar algo mientras estaba avanzando

-ahhh- escuche un grito proveniente de donde estaban los chicos, cuando corrí para ver que era, veo a mi hermana parada como una estatua con ambas manos en su cara y al mirar hacia abajo, veo a Evan con una rodilla en el suelo la otra la tenia doblada para sujetar su brazo y subiendo su brazo tenía su mano con una pequeña cajita con un anillo verdaderamente hermoso, apenas al ver esa escena lucí me pego una mirada con sus ojos emocionados y hermosos, enseguida le hice un gesto hacia Evan con un sonrisa gigante, nada me hacía más feliz que ver a mi hermana con el hombre que ama, llevan 4 años juntos, cuidándose ambos para tener una vida hermosa en Dios, y ahora que se casaran al fin ella podrá darme unos hermosos y tiernos sobrinos
-si quiero, si quiero- cuando dice eso evan no duda en tomarla en sus brazos y besarla dulcemente

-me haces el hombre más feliz del mundo- dijo con su voz muy emocionada

-déjenme felicitarlos- corrí hacia ambos, ellos eran como mis padres/hermanos, y los amo con intensidad.- les deseo de verdad lo mejor, que sean aun más felices y que todo lo que se propongan sea cumplido, y recuerden que mientras Dios este con ustedes siempre serán felices- al decir esto los dejo solos para que disfruten su momento

Con esa escena ya se me quito el hambre, me alimente de la felicidad de ese par de cursis así que me fui a mi cuarto, arregle todo para el siguiente día y me acosté a dormir, sin antes de orar, y dar gracias a Dios por ese hermoso día que me había brindado.

Me Enamore De Un Yugo Desigual Donde viven las historias. Descúbrelo ahora