𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐓𝐫𝐞𝐬

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Un año después

Un año pasó y Yugi a cambiado; esa sonrisa que lo caracterizaba se había ido, sus ojos ya no tienen su brillo hermoso, casi todos saben el porqué, menos Yami, Tea ya sabía el porqué Yugi estaba así, decidió no decir o hacer nada al respecto, en cierta forma, ella no tenía la culpa de que Yami la haya elegido a ella.

Yugi iba de camino al colegio, Yami acompañaba a Tea desde que consiguió su cuerpo propio. En su camino se encuentra con su mejor amigo y confidente Joey.

—¡Hola Yugi!—dijo Joey con mucha alegría.

—Hola Joey—respondió suavemente con una pequeña sonrisa, Joey es un gran amigo, se merece un mejor amigo que este a su nivel.

—Oye, que te parece ir después del colegio vamos por un helado y te cuento un secreto, no estaba preparado para decirlo, pero tengo que contárselo a mi mejor amigo—dijo sonriendo.

—Sí, esta bien, de todas formas; no tengo nada mas que hacer. Yami irá con Tea como siempre y me quedaré solo—un suspiro triste salió de sus labios al decir lo último.

—Vamos no pongas esa cara... ¡arriba el animo! Debes intentar superarlo Yugi, hay mejores personas en el mundo—dijo para después pasarle su brazo sobre los hombros en forma de apoyo.

—No lo sé Joey. Ya no sé para que voy al colegio, solo sería más sufrimiento para mí. Estar en el mismo salón y tener las mismas clases y que solo se la pase con ella, duele, ¿Qué tenía que hacer para enamorarlo? ¿Si hubiera sido una chica se enamoraría de mí? ¿Por qué a pesar de que acepte su relación ya no pasa tiempo conmigo? ¿Me odia? ¿Sabe que lo amo y le doy asco?—un par de lágrimas rodaron por sus mejilla—él se consiguió su propio cuerpo, para estar con ella; todo lo hizo por ella, yo comprendo que no tengo derecho a quejarme, pero ¿Por qué nunca me comento eso?—sorbe su nariz mientras débiles sollozos salen de sus labios—ya no quiero seguir viviendo, amo a mi abuelo y tú eres una persona maravillosa, pero no soportó este dolor y desarrollé más problemas, que a pesar de intentar superarlos no lo logro, no puedo hacerlo solo—susurró entre gimoteos, tras calmarse, él y Joey, fueron al colegio, intentando olvidar un poco lo sucedido; al terminar las clases fueron a una heladería cercana y hablaron, Joey le dijo a Yugi que era novio de Seto Kaiba desde, hace más de un año, no lo había dicho porque pensó que Seto no iría en serio con él, Yugi lo felicitó y le deseo mucha felicidad en su relación, Joey le dijo también que él podría apoyarlo en todo lo que necesite.

Al llegar a su casa-tienda, lo primero que hizo fue ir a la habitación de su abuelo, agarrar un frasco e ir de regreso a su habitación. Lo había decidido, a pesar de el apoyo de Joey y de su abuelo, él simplemente sabía que nunca podría estar en paz. El frasco tenía pastillas para dormir, él se tomó todo el frasco, bueno, la mayoría del frasco; luego se sintió mareado y cansado se fue a su cama y se acostó a dormir profundamente.

Al cabo de una hora, llegó el abuelo, que se había ido a comprar unas cosas para cenar, cuando se encontraba dentro de la casa, esta todo en silencio fue al cuarto de Yugi, haber si había llegado. Lo vio dormido así que lo dejó descansar y se fue a hacer la cena.

Una hora después llego Yami, el abuelo le dijo si podía despertar a Yugi para cenar, este le hizo caso y fue a la habitación de Yugi.

—Yugi, Yugi despierta—decía en susurro pero al ver que no respondía lo llamo un poco más fuerte, sin resultados—¡Yugi, Yugi despierta!—decía desesperado al ver que no reaccionaba, un sonido sordo de algo cayendo al suelo llamó su atención, era un frasco de pastillas casi vacío, esto preocupo mucho más a Yami—¡YUGI, YUGI DESPIERTA! ¡ABUELO YUGI NO DESPIERTA, LLAMA A UNA AMBULANCIA!—gritaba alterado y muy preocupado, apunto de caer en llanto, el abuelo hizo lo pedido rápido y preocupado. A los 5 minutos llegó la ambulancia, cuando llegaron al hospital los doctores se pusieron a revisar a Yugi.

En la sala de espera, estaban el abuelo de Yugi y un Yami con los nervios a flor de piel, cuando ven acercarse hacía ellos un doctor con expresión muy sería.

—¿Familiares de Yugi Moto?—preguntó mirándolos.

—Sí, ¿Cómo está mi nieto doctor?—decía el abuelo preocupado hasta los huesos.

—Lo siento mucho... Él, lastimosamente, a muerto de intoxicación, tratamos de ayudarlo, pero ya era tarde—informó el doctor serio y sintiendo lastima por ellos, Yami estaba impactado y llorando por la pérdida de su adorado hikari, por no haberle protegido como era debido y por descuidarlo demasiado, no había notado que tantos problemas habrá tenido su luz.

—¿Cómo pudo pasar esto? Él era un buen chico... él no tenia malos hábitos—decía llorando por la perdida de su nieto.

Al día siguiente Yami, deprimido, fue al colegio y les explico a todos sus amigos lo sucedido.

—... Y eso nos dijo el doctor—Yami había terminado de relatar lo sucedido de ayer, con unas cuantas lágrimas de por medio.

—Así que, él, pero ayer estábamos bien comiendo helado y platicando-las lágrimas empezaron a salir-Todo esto es... es ¡TÚ CULPA YAMI! ¡POR TÚ CULPA ÉL POR FIN TERMINÓ DE ROMPER SE! ¡NO PUDO MÁS POR TÚ CULPA! ¡ÉL TE DIO TODO! ¿¡Y COMO SE LO PAGASTE!? ¡HACIÉNDOLO SUFRIR! ¿¡COMO NO TE DISTE CUENTA!? ÉL TE AMABA... Él... Él dijo que conseguiste tu propio cuerpo para estar con Tea, y él se sintió decepcionó, te mencionó varias veces que le gustaría abrazarte, ni siquiera le dijiste. ¿Por qué sigues buscado tus estúpidos recuerdos? Eres feliz con tu novia ¿No? Sabes creo que, Yugi tomo la mejor decisión, aun que suene horrible y me duela, él merece paz y tranquilidad, merece ser feliz, algo que tú y tu novia, la cual sabía los sentimientos de Yugi hacía ti y no te lo informó, le quitaron. Esperó, seas feliz, porque ya no hay vuelta atrás—y sin más que decir Joey se fue del colegio y Seto fue con él para consolarle.

Yami esta procesando lo que dijo el de ojos miel cuando cayo en cuenta, los ojos se Yugi no tenían brillo y su sonrisa ya no era sincera, todo por no darle atención a esas señales fue que perdió a su hikari, a su aibuo, a su todo, irónicamente descubrió que estaba enamorado de Yugi, muy tarde se dio cuenta de ese gran detalle, se tiro de rodillas al piso lamentando lo idiota que fue al no darse cuenta antes, el dolor que siempre sintió en su pecho no era su dolor, era el de Yugi, pero como dijo Joey ya no hay vuelta atrás.

—10/08/2020

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𝑼𝒏𝒂 𝑴𝒂𝒍𝒂 𝑬𝒍𝒆𝒄𝒄𝒊𝒐́𝒏Donde viven las historias. Descúbrelo ahora