XIV

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Día X del Mes O


Hoy se jodió todo, a decir verdad.


Todo empezó esta mañana en el entrenamiento estándar, todos los cadetes, sin excepción, nos reunimos para ejercicios básicos (flexiones, trote, etc) antes de ir cada uno a los ejercicios característicos de cada unidad.


Después de haber terminado la rutina básica, me dirigía al campo en donde los Vanguardias entrenamos, pero me cruce con Jean y otros de sus amigos por el camino, quise pasar rápido, pero ellos me detuvieron.


¿Te vas tan rápido, fenómeno? -pregunto Jean, tratando de provocarme, quise alejarme, pero me tomo de uno de mis brazos y me arrojo contra la pared.


¡No vas a ningún lado, maldito engendro! -grito el, tan solo quería salir de allí, tenia una toalla en mi otra mano, humedecida por el sudor causado por el ejercicio, así que como pude la tome y, luego se soltarme, se la arroje con toda la fuerza, el problema no fue que Jean la esquivo, sino que aterrizo en el rostro del Capitán Rivaille, quien justo pasaba por allí.


Todos nos quedamos paralizados, mas aun cuando el Capitán se saco la toalla de encima y, a pesar de su austera fachada, pudimos sentir como nos estaba asesinando con la mirada.


¿De quien es esto...mocosos? -pregunto, levantando la toalla como si fuera alguna cosa inmunda para el.


Todos me señalaron a mi, lo único que pude hacer fue ponerme en formación y hacer el saludo militar, tal y como hacemos siempre a un superior, los demás hicieron lo mismo, tal vez para aparentar que nada había pasado.


Cuando quise darme cuenta el Capitán estaba frente a mi.


¿Es tuyo? -pregunto, a lo que respondí, moviendo mi cabeza, afirmando.


Luego sentí la fría toalla golpeándome el rostro, seguido por un puñetazo que el Capitán le dio a mi estomago, dejándome en el piso, luego me pateo, una y otra vez, fue tan fuerte la golpiza que me dejo con sabor a sangre en la boca.


Cuando acabo de golpearme, me tomo de mi cabello (estaba tirado en el piso), me miro y me dijo -Vuelve a hacer algo así, y desearas que haya sido un Insurgente en vez de mi- a lo cual tomo mi cabeza y la azoto fuertemente contra el piso, luego de eso se retiro, dejándome allí tirado, mientras Jean y los demás se alejaron lo mas rápido posible.


Tuve que hacer el doble de ejercicios, llegue tarde por el retraso.


Bertholdt Hoover, soldado apaleado por Levi Rivaille.

Mi Confusa,Complicada y Extraña Relación con Levi.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora