Historia Suicida. ❤

Pesadillas.

Tengo 7 años, me llamo Sofia, este es el comienzo de mis pesadillas, de tanto dolor a tan corta edad. Todo empezó cuando entre a la nueva primaria, mi madre me inscribió en una de tiempo completo ella decía que tenía que trabajar mucho, después de un tiempo a mitad del año, me cambian a otra, ya que en la otra me maltrataban como les comente anteriormente, aquí es donde comienza lo peor.

Nueva escuela, pensé que todo seria diferente pero me equivoque.

-Buenos días chicos. - dijo la profesora

-Buenos días, profesora Laura. - contesto la clase

-Les eh traído a su nueva compañera, su nombre es Sofia, puedes presentarte. - me presentó la profesora

-Hola, mi nombre es Sofia, tengo 7 años. Un gusto en conocer a todos, espero conocer nuevos amigos. - Sonreí pero al mismo tiempo me sentí demasiado nerviosa.

-Hola, Sofia. - contesto la clase, sentí todas las miradas hacia mi y las criticas llegaron en seguida.

(Después de un rato, comenzó el receso.)

Mi abuelita me había mandado lunch, pero mi mamá me dejo $10.0 pesos para gastar, salí rápidamente a comprar algo compre unas frutas con chile, regrese en seguida al salón tome uno de mis libros y comencé a leer mientras comía lo que me habían mandado. Cuando note ya había sonado el timbre, todos entraron corriendo y unas tres niñas se acercaron a mi.

-¿Te mandan todo eso de comer? - me pregunto una de ellas.

-Si, ¿por qué? - respondí, tengo que admitir que me gusta comer mucho.

-Por eso estar fea - me dijo otra de ellas.

-(me quede callada y no respondí nada)

-Ningún niño se te acercara por fea y tonta.

-Chicos, saquen su cuaderno de matemáticas. - ya había llegado la maestra, la verdad es que me salvo de haber llorado y haber dado mas problemas.

-La verdad yo soy muy participativa, pero esta vez no supe que me paso. Paso una semana y la verdad no sabia porque todos me herían.

Llegaba a la casa con una sonrisa como la de siempre, disimulaba todo para que no tuvieran que lidiar mas conmigo cada día me aislaba mas de las personas, llegaba, me encerraba en mi cuarto a jugar con mis juguetes y pensar en que hacia mal. Después llego el día mas doloroso de mi vida, un viaje. Mi mamá se iba y no sabia por cuanto tiempo.

-Hija, te amo y quiero que te portes bien con tus abuelos y tus tíos.

-¿Cuándo regresarás? - le dije llorando

-En cuanto pueda, te traeré muchas cosas de Cancún, lo prometo.

-¿Puedo ir contigo? - le pregunte

-No puedes, sabes que no puedo llevarte, estaré demasiado ocupado y no estaré todo el tiempo contigo.

-No me importa, me portare bien, lo prometo. Pero llevame, no me dejes aquí.

-Lo siento, tengo que irme. Te llamare todo los días, mi amor. - me dijo sin decir mas y se marcho a su vuelo.

Nadie podía consolarme, al llegar a casa, me encerré en mi cuarto, no dejaba de llorar hasta que quede profundamente dormida. La verdad es que no quería hablar con nadie, me sentía muy triste, no solo por mi madre, también por la escuela, en realidad por todo.

Cuando regrese al colegio, todo era igual;

-Sofia. - me dijo la profesora

-¿Qué? - yo seguía pensando y estaba como en otro mundo.

-¿Cuánto es 17+26?, ¿puedes pasar al pizarrón?

-Claro. - respondí y resolví perfectamente la operación

-Bueno, su única tarea son, 5 sumas y 5 restas, esta sera su tarea por lo que resta del año ¿entendido?

-Todos acentimos.

-Es todo por hoy, hasta mañana.

(Al siguiente día)

¡Ya, basta! - grite.

Todos/as me pegaban sin parar. Era mi segundo día y ya me tenían harta.