El viaje no fue tan malo como pensé, Luzu era muy buen compañía, a pesar de tener un carácter duro y la cara típica de muchacho que te quiebra con solo tocarte, tiene un gran corazón.
Me contó que está enamorado de una chica de allí, es hija de una de las cocineras y siempre acompaña a su madre con las tareas del lugar. Su nombre es Lana y tan solo tiene un año menos que Luzu.
Es muy codiciada por los chicos de allí, ya que al ser la única mujer, todas sus hormonas aletean cada vez que la ven, sin embargo nunca salió con nadie.Podría ser amigo de esta chica, podría servirle a Luzu
Al llegar, ambos bajamos casi corriendo por nuestros equipajes. Mi nuevo amigo me contó que la mayoría de los varones no tiene mucha ropa y las valijas de los recién llegados son perfectas para esta gente.
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-Buen día jóvenes.- Alzó la voz un hombre, no tenía pelo y era de estatura baja, además que su panza estallaría en cualquier momento.
-Buenos días.- Dije desanimadamente.
-La mayoría de ustedes saben que se encuentra detrás de este vallado.- Comenzó diciendo, mire hacía atrás de su enorme panza para darme cuenta que había unas vallas de metal.- Pero, para los que no, les avisaré que este no es un campamento para cazar mariposas y ver el lago, aquí se trabaja. Se les asignará un nuevo sitio cada día y tendrán que hacerlo, sin protestar ni chillar, ya saben lo que ocurrirá si lo hacen.
Se formo un silencio entre nosotros, no éramos muchos, supongo que se nos dividió en grupos para nuestra llegada. Miré a Luzu, y él con una mirada, me dijo que me lo explicaría luego.
-Si cumplen todo, volverán a sus casas como nuevos y otros volverán a Eastwood más renovados que nunca.- Aclaró su garganta.- Feliz estadía y que la suerte este siempre de su lado.
Effie, ¿Saliste de los juegos para venir hasta aquí?
Reí por dentro.
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Las puertas se abrieron y lo primero que observé fue el largo prado verde y en el fondo un lago celeste. El sol brillaba haciendo todo más hermoso. Mi boca quedo abierta al ver semejante lugar más lindo.
-Es hermoso.- Apareció Luzu a mi lado.- No todo es malo aquí, solo la mayoría.- Reí junto a él.
Mientras más me adentraba en el campamento podía ver con más claridad las cosas, hay un comedor al aire libre y una bandera al alto del mástil. Estaba todo muy bien distribuido.
Hay cabañas, por lo cual no dormíamos en el piso.
A lo lejos, pude ver un grupo más grande de muchachos sentados en bancas.
-No hay que perdernos el show.- Dijo Luzu arrastrándome a su lado.
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Ya sentados, esperamos unos cinco minutos hasta que apareció un hombre con traje militar, un cuerpo muy trabajado y el pelo corto.
-Bienvenidos al campamento Eastwood.- Comenzó diciendo.- Espero que su estadía sea la mejor posible y que no ocurra nada de lo que no está planeado. Yo seré su guía en este lugar, les asignaré su trabajo y cabañas, además que los estaré vigilando para ver si cumplen con su ocupación.
Ojala que me toque con Luzu en la cabaña
-Ya que hoy es su primer día y el sol baja dentro de dos horas, dejaremos que se acomodan en sus respectivos puestos de descanso, pueden desempacar y dormir.- Su voz es grave y de verdad me da miedo.- No les diremos como sus madres a que hora deberían dormir, ya son grandes, sin embargo, a las 6 A.M tienen que estar ya levantados. No aceptamos demoras. Después de las 10 PM, tienen sumamente prohibido salir de sus cabañas. Vayan y disfruten de su día libre, ya que no habrá muchos, a la hora de cenar les daremos más indicaciones.- Y bajó del estrado.
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-Los apellidos que empiecen con A hasta la K, procedan conmigo.- Señaló otro hombre militar.
-Ese soy yo.- Le dije a Luzu.- ¿No vienes?
-Mi apellido empieza con L, lo siento.- Ahora sí que estaba cagado.- Suerte con tu compañero de habitación.- Rió.
-Púdrete.- Le mostré el dedo del medio, sin antes despedirme.
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-Guillermo Díaz.- Leyó en el papel el sargento Midle, mi comandante de grupo.- A usted le tocará con Samuel De Luque, cabaña 136.- Extendió sus manos para darme las llaves y las tome sin mucho gusto.
Mi compañero no estaba presente todavía, así que decidí meterme solo.
Unos pasos bastaron hasta llegar hasta el deseoso hogar, a decir verdad, era bastante acogedor y al ser de madera, le daba un estilo más hogareño.
Esperé a mi nuevo compañero para saludarle, pero el sueño me ganaba y al cabo de cinco minutos mis ojos se cerraron y mi cuerpo descanso en la cama fría de la izquierda.
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Sentí como alguien entraba y arrojaba sus cosas bruscamente sobre la cama derecha, al parecer no se dio cuenta de mi existencia.
Me levante lentamente y pronuncie un "Hola" débilmente, no podía ver a mi compañero porque las luces estaban apagadas.
Pero sabía que estaba sonriendo.
-Hola, soy Samuel De Luque.- Hizo una pausa.- Puedes decirme como gustes, conejito.
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HOOOLAAAA <33
Nuevo capítulo, el salseo está viniendo...
GRACIAS POR LEER, COMENTAR Y VOTAR
LOS QUIEROO <33
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Campamento Eastwood Wigetta
Romance"-Conejito.- Susurro lentamente. -No me llames de esa forma.- Intento escapar de su agarre. -Tanta bondad existe en tu alma.- Tocó su barbilla.- No sabes donde te has metido Conejito" El campamento "Eastwood", mejor conocido como el centro de rehabi...