*Narra Asun*
Suena el despertador para que haga mi rutina mañanera de todos los días.
Pero hoy es diferente, no sé, será por las clases de canto.
Estoy segura que poco a poco conseguiré lo que más quiero: hacer disfrutar a la gente con mi voz.
Salgo de casa y veo a mi simpática mejor amiga.
Nos sonreímos y vamos caminando para el instituto.
-Tía, ¿cómo conseguiste el puesto de trabajo en el bar?
-Eso digo yo.
-Tú ahí ten cuidado por favor, que solo entran viejos y no me gusta nada.
-Lo tendré.-le sonrío.
A primera hora tenemos matemáticas, un buen despertar(nótese la ironía).
Las clases transcurren como siempre hasta que llego a casa.
Almuerzo y veo que son las 15:03 así que en una hora me da tiempo de hacer la tarea y luego a la noche estudiaré.
Y así hago hasta que el reloj marca las 15:55.
Me echo colonia y cojo mi móvil.
-Me voy.-espeto.
-¿A dónde?-pregunta mi madre.
-Otra vez...a casa de Laura.
-No tardes.
-Voy a tardar porque es muy largo.
Sin dejar que me conteste salgo de mi casa hacia la de los vecinos para sacar la basura y los perros.
Estoy yendo con los perros hacia un parque para que jueguen un poco hasta que el perro más grande se escapa.
Corro tras él pero va muy rápido y no logro alcanzarlo.
¿Y ahora qué hago? La dueña me va a denunciar y mis padres se enterarán y a la mierda todo.
Me siento en un banco mientras lloro hasta que escucho una voz.
-¿Se te ha escapado este perro?
Levanto mi mirada hasta toparme con un chico guapísimo.
Es alto, rubio, ojos claros y con una dentadura que para mirarla tienes que ponerte gafas de sol de lo que brilla.
Le sonrío y me levanto.
-Sí.
-Aquí tienes, ten más cuidado la próxima vez guapa.
Mis bragas están volando.
-Muchas gracias...-digo esperando a que diga su nombre.
-Sergio.-sonríe.
-Yo soy Asun.-digo dándole dos besos.
-Me suenas de algo.
-¿Yo? Pero si yo no...-digo riendo.
-¿Subes vídeos a Instagram cantando?
-Sí.
-Pues de ahí, me encanta tu voz.
-Gracias.-digo sonriente.
-Bueno me tengo que ir, adiós guapa y a ver si nos vemos.-dice dándome otros dos besos.
-A ver, adiós Sergio.-digo cogiendo a los perros.
Miro el reloj y son las 16:47 tengo que darme prisa para que me de tiempo de llegar a la escuela.
Voy andando a paso ligero y dejo a los perros con sus respectivos dueños.
En total he recogido 6 euros.
No está mal.
Voy caminando hasta la escuela hablando con Laura por Whatsapp.
Llego y saludo a la profesora que me atendió ayer de la cual no sé su nombre aún.
Hay 4 niñas y 3 niños más.
Nos sentamos en sillas y la profesora comienza a hablar.
-En primer lugar, buenas tardes a todos.-dice sonriendo.-Hoy vamos a comenzar con las clases de canto pero antes vamos a presentarnos. Comenzamos por ti.-dice señalándome.
Justo cuando voy a decir mi nombre suena la puerta.
-¡Adelante!-dice la profesora.
La puerta se abre y no me lo puedo creer es...
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¿Quién creéis que será?😏😈
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