Little girl. | s stan | one shot.

03

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Cruce mis brazos sobre mi pecho mientras observaba a los actores y actrices hacer una escena, incluso con la cortina verde detrás de ellos sabía que iba a ser una escena épica de Infinity war.

-¡Corten! –oí que uno de los directores Russo grito hacia el elenco, no alcanzaba a escuchar lo que los actores hablaban, pero alcance a ver a Sebastián ofuscado gritando, así que comencé caminar hacia ellos.

-Jamie, ven por favor. –Joe Russo me llamo y me hizo una seña para que me acercara a él, me dio órdenes para preparar a los actores para la siguiente escena, cuando él se alejó, volví mi atención hacia la disputa de hace un momento.

Tom yacía en el piso con una mano sobre su boca, mientras Chris empujaba a Sebastián lejos de la pelea. Camine rápidamente hacia Tom y me indique a su lado.

-¿Qué paso? –dije claramente preocupada por él, el alejo la mano de sus labios y jadeé sorprendida cuando vi sangre en su labio y entre sus dedos.

-Ven conmigo, -dije rápidamente, me pare, le tendí una mano y lo ayude a ponerse de pie.

-Bien, es solo una pequeña cortada, solo que salió mucha sangre, -dije una vez que limpie delicadamente la herida, me abrí paso entre sus piernas para comenzar a maquillar la zona afectada que ya comenzaba a ponerse morada.

-Jamie, ¿Ya está listo? –termine de darle el ultimo toque y me aleje de Tom. Él rápidamente se aproximó a su lugar.

Me fue inevitable no buscar con la mirada a Sebastián, realmente no sabía que le sucedía, nunca lo había visto ponerse agresivo. Los directores Russo estaban hablando con él en una zona apartada de los demás, solo negué con la cabeza y me aleje de ahí.

...

No estaba acostumbrada a esto, tal vez nunca lo iba a estar.

Me observe en el espejo de cuerpo completo que tenía en mi habitación y me mordí los labios, nerviosa, pero que estaba pensando cuando deje que Liz y Scar me convencieran de ese vestido.

Los hombros y parte de mis pechos lucían desnudos, ya que el vestido era strapless, el corsé me apretaba un poco los pechos haciendo que estos lucieran más grandes, y ni hablar del escote, esto era simplemente demasiado para mí. No estaba acostumbrada a ese tipo de vestimenta. Seguí observando el vestido en mí, di media vuelta, este se ceñía como un guante sobre mis glúteos, haciendo que la tela cayera libre hasta mis pies, fue inevitable para mí no sonrojarme.

Pero no tenía otra opción, no tenía otro vestido para la ocasión. Después de seis meses de arduo trabajo las grabaciones habían finalizado y esta noche era una fiesta de celebración por nuestro trabajo.

Me dirigí al tocador y tome el collar con pequeños diamantes en él, lo coloque en mi cuello, para después colocarme los aretes a juego.

Inspeccione mi rostro por enésima vez, nunca había usado mis poderes, como decían algunas actrices, de maquillaje en mí. El delineador estaba en su punto al igual que las finas sombras que coloque en mis parparos así como las pestañas lucían arrebatadoras, haciendo mis ojos más grandes. Pero lo que más me llamaba la atención eran mis labios rojos carmesí, que eran del mismo color que el vestido, me hacían sentir diferente, más madura, sensual tal vez. Por ultimo me calce las zapatillas de tacón, que valga la redundancia también eran rojos.

Ahora solo faltaba que llegara Tom, quien me iba a llevar a la celebración.

...

Sebastián.