Desperté tarde para ir a la escuela. Sólo me puse unos jeans ajustados, una sudadera y salí. Lastimosamente no me dio tiempo de peinarme o maquillarme.
Salí de mi casa y me tope a Cameron, me miré de pies a cabeza y lo voltié a ver con una mirada llena de vergüenza; él sólo sonrío y me dijo: -Wow! QUE LINDA! - En un tono sarcástico.
Sólo sonreí.
-Te acompaño?- Preguntó con una mirada que suplicaba que dijera que sí.
-Claro!-Respondí.
Caminamos juntos hasta la escuela, mientras platicabamos y él me pregunta sobre mí.
En ese momento, recibí una llamada, era Bryan
-Que quieres? -Contesté furiosa.
-Fui a tu casa a buscarte y no te encontré, donde estás?- Me dijo.
-Estás aquí?-pregunté- Que es lo que quiere? Que viniste a hacer?- Continúe.
-Lo siento- Suspiró.- Me equivoqué.
-Deberías irte, pierdes tu tiempo, no quiero verte- dije, y colgué.
Miré a Cameron y se veía confundido.
-Quién era? -Preguntó.
-Nadie, es mi exnovio- contesté.
Vi que la luz en sus ojos de apagó por alguna razón, pero no sé a que se debía.
Hablámos de lo que pasó mientras caminabamos.
Cuando llegamos a la escuela me miró por un momento y me dijo:
-Es un tonto, yo jamás te dejaría ir , eres maravillosa.
Unas ganas infinitas por besarlo se apoderaron de mí. Acaso me estaba enamorando? No lo creo, yo no era una de esas chicas que se enamoraban al ver su sonrisa. O si?
-Gracias Cam.- le dije tratando de que mi rostro no se iluminara o sonrojara.
-Te veo luego.- Dijo mientras se alejaba para ir a su clase de historia.
