Free Soul. [Libro #1 Lysandro: Punk] Saga: Feelings Through Rock

No Future

24 de Septiembre de 1995

Aún recuerdo ese dia, aquel dia en el que escapé del que fué mi "hogar", en realidad era una completa porqueria. Desde la muerte de mi madre, mi hermano mayor Leigh se gastaba nuestro dinero en alcohol y porros, yo por mi parte tenía que ir a la escuela. Con la ropa sucia y vieja, con hambre y ganas de suicidarme, tenía que ir aquella tortura de 8 horas, en realidad eran 4 porque me saltaba la mitad, que por dicha cosa tuve problemas después. Si exacto reprobe el año, decidí dejar de engañarme y salí de la preparatoria, ese era mi último año. Como era de esperarse me uní a mi hermano en el mundo del alcohol y la marihuana, con tan solo 17 años, un mundo del cual es difícil escapar para muchos.

Sumido en la drogadicion, mirando al techo con la mirada perdida y una sonrisa idota en los labios, además mi lado Tobby un dragón de un escandaloso color morado, me reía descaradamente por las cosas que miraba en el techo y los chistes que contaba aquel escandaloso dragón. Cuando sin esperarlo un balde de agua sucia cayó sobre mí, sacándome de mi transe, mientras veía como Tobby se esfumaba junto con el humo de la hierba. Era mi hermano estaba sobrio.

—¡¿Qué te pasa idiota?! —. Gruñi, el agua apestaba y mi cama estaba mojada de esa mierda, seguro era agua que había sacado del sanitario. Me levanté de la cama con las greñas mojadas al igual que mi ropa. De verdad esa cosa apestaba, y el olor de la marihuana no se podía distinguir por tal asquerosidad.

—Una patrulla se está paseando por afuera, y no tengo intención de ir a prisión y supongo que tu tampoco —. Habló con la voz ronca mientras me miraba con desprecio. Me daba igual la forma en la que él me mirará, pero que hacían policías por aquí. Camine hasta la "ventana" y moví un poco el cartón que cubría la parte donde debería haber cristal. Efectivamente la policía estaba estacionada enfrente de nuestra casa.—Parece que nuestros vecinos no entienden los horarios —dije mientras reía.

—Y parece que tú tampoco mocoso, parece que quieres ir a prisión por cinco años y no tengo dinero para pagar ese número obsceno de dinero—. Riñó mi hermano, lo ignore no tenía caso discutir con él, ni la secundaria termino. En realidad me daba igual ir a prisión es mejor que estar aquí. Salió de mi habitación con su mal humor tras él.

Enhorabuena, pensé mientras aún miraba como se llevaban a mis vecinos, pobres tipos, una vez se fue la patrulla, tomé mi guitarra comencé afinarla, y a tocar algunas melodías mientras estaba sentado en una silla de plástico que tenía en mi habitación.

Unos minutos después mi querido hermano Leigh llegó interrumpiendo mi tranquilidad con Samantha a un costado, mientras se veían muy cariñosos —Lysandro, quiero que te vayas—miró a Samantha.—Ya sabes no es nada personal,bueno si, pero ya sabes la intimidad—dijo burlón, que pensaba este tipo al correrme de mi casa, si quería acostarse con esa cualquiera que lo hiciera en un callejón.

Sí, Samantha era una prostituta,la prostituta del barrio, no tenía ni idea de con cuantos tipos se había acostado, solo sabía que mi hermano estaba locamente enamorado de ella, y ella solo quería plata.

—No me voy a ir Leigh, si quieres vete tú con esa, porque yo no me moveré—estaba molesto, y al ver la cara su mujerzuela me hizo sentirme mejor. Aunque eso no duró mucho cuando vi la cara de cólera de Leigh.

—Mira,en primer lugar a ella le tienes respeto imbécil, otro punto yo soy el mayor enano y debes hacer lo que te diga, y si no quieres irte no te vayas, pero tendrás que aguantarte —. Dicho esto se fue de mi cuarto azotando la puerta, como si la puerta tuviera la culpa.