Alaska, ¿Cómo es la 4? ✈Joseph Birlem

27

-Joey-grité una vez más con fuerza.

Corrí por los pasillos de la escuela. Todos salían de sus aulas contentos de que por fín era viernes.

-Joey, por favor espérame- dije y el se frenó.

Volteó para mirarme y yo frené frente de él. Traté de recuperar el aire e intenté hablar.

-Joey...¿cuándo... te... vas?-dije respirando hondo.

Me miró unos segundos, vi como sus ojos se humedecieron. Volteó la cabeza hacia el costado.

Me miró nuevamente.

-En un mes.

Lo abrazé. Esos abrazos que nunca olvidas.

-Entonces no perdamos el tiempo y vamos a divertirnos- dije tratando de ocultar una lágrima.

Fingía estar bien, obviamente deseaba que ese mes no pasara tan rápido.

Mi mejor amigo se iba a ir.

Vi como Joey corría con los helados en la mano hacia mi, sonreí. Las lágrimas comenzaron a caer sin que yo lo permitiera.

-Oye-dijo tomando mi mentón para que lo mire- tenemos un mes, vamos a pasarla genial- sonrió.

Mil mariposas me atravesaron el estómago.