AMOR LETRA POR LETRA (Heo Young Saeng)

capitulo 33

Vane: ok more y que bien que pediste la opinión de Heo en cuanto a la ropa o si no, hum! ellos dicen que no celaran más, pero ambas sabemos que es mentira, ellos esa parte no la cambian. No ves hyun? Él también es celoso, solo que Heo es el rey, le gana.

María: si ese lleva la batuta adelante.

Vane: bueno listo quedamos así chao. Se despidieron.

María: amor mañana iré al gimnasio y si no quieres que valla con ropa sexy, mejor me llevas a comprar ropa que se adecue a tu gusto, vamos?

Heo: ahora? Y Hwa Young?

María: amor ya tiene 5 meses, dejémoslo con madre.

Heo: bueno como digas mi señora. Fueron dejaron al bebé con la abuela y Heo la llevo a comprar ropa no tan sexy o reveladora como decía él. Le compro varios conjuntos de licra que más bien parecían sudaderas semi ajustadas con suéteres con manga cuello redondo, pues también estaban bien, fuera de eso le cambio el closet, en voz baja le escogió la ropa que él quiso.

María que se para delante de su esposo con sus dos manos a cada lado de la cintura, al ver la ropa que este está escogiendo para ella le dice: te aprovechas de mi nobleza verdad cariño?

Heo: hmmm un poco, solo lo necesario. La toma por la cintura la atrae hacia él y la besa. Ella no puede replicar más. La muchacha del almacén solo veía las muestras de cariño de Young Saeng para con su esposa y sonreía apenada. Él decía: ya es hora que dejes de vestirte tan deseosamente fuera de casa, me molesta cuando los hombres te miran tan ardientemente, como con deseo. Es verdaderamente molesto. María no tuvo de otra, así que acepto. No quería otra pelea ni enojarse con Heo. . Puedo pedirte que cambien de instructor? Es que la verdad no me cae y quiero evitar problemas.

María: está bien. Lo hare, buscare una entrenadora mujer. Contento?

Heo: siiiii y la vuelve a besar.

Trabajadora del almacén hmm hmm aclara su carganta y con pena se acerca a ellos: podrían por favor regalarme una foto juntos, los 3?

María: claro!! Y los 3 posan para la foto.

Pasaron los días, María y vane seguían yendo al Gim. Heo se sentía más tranquilo dejándola ir. En el Gim María le explico a vane que era el tan dichoso cocomordan.

Unos días después. Heo la invito a pasar la noche y el día fuera de casa. Fueron a una casa en el campo. Dejaron a los niños en la casa con la señora Yon y la madre de Heo al pendiente. Se fueron a las 4 de la tarde y llegaron a su destino a las 7 de la noche. Cenaron y salieron al balcón que había en la habitación. María se recuesta en las barandas mirando el cielo, Heo se le acerca por la espalda apoyando las manos en la baranda del balcón y poniendo su barbilla en los hombros de María.

María: que noche tan hermosa, mira cuantas estrellas desde aquí. El cielo se ve realmente estrellado y contigo a mi lado lo tengo todo.

Heo: te gustan tanto las estrellas? Entonces me convertiré en una para brillar solo para ti todos los días las 24 horas del día.

María dando la vuelta para quedar frente a él le dice: no hace falta, ya te tengo junto a mí y eres todo lo que necesito para ser feliz y poniendo sus manos alrededor de su cuello le suelta un TE AMO más que a mi vida. Me harías el amor?

Heo sin más la besa con mucha ternura, coloca sus manos en la cintura y la aprieta con fuerza, pasea sus manos por su espalda y le dice yo TE AMO MAS y caminan hasta la cama sin dejar de besarse esa noche hicieron el amor solo con la luz de la luna y la estrellas. A la mañana siguiente se dirigen a una parte alejada de la casa a caminar iban agarrados de la mano y toma por sorpresa a María besándola frenéticamente.

Heo: quiero hacerte el amor y empieza a sobar sus piernas y mete sus manos por el vestido que María traía y las acaricia con fuerza.

María: qué? Espérate. Heo no paraba. Young Saeng que haces nos verán.

Heo: morena te deseo tanto. No sé qué me hiciste pero no puedo dejar de pensar en solo hacerte el amor todo el día, me tienes atrapado, obsesionado con solo tenerte entre mis brazos y sentirme dentro de ti.

María: estás loco? Que te pasa? cálmate.

Heo: no puedo calmarme, mírame como me vuelves, estoy que exploto, dime que me has hecho para tenerme todo el día pensando en ti, ah? No sé qué me pasa pero quiero hacerte mía ahora. Y la besa nuevamente, acaricia sus piernas otra vez, su cintura luego sus senos.

María: amor me da pena estamos al aire libre nos verán, lo vamos a hacer aquí?

Heo: si aquí. Al aire libre, bajo el sol. La toma de la cintura la carga y da vueltas con ella en el aire.

María: no!!!

Heo: pero quien nos vera? No hay nadie aquí. La baja. Estamos solo los dos y solo nos puede ver el cielo y Dios. No te asustes. Heo se quita el suéter para colocarlo debajo de María. La sienta delicadamente en el suelo y le baja las tirantas del vestido a María, este cae hasta la cintura, dejándola en brasier empieza a besar su cuello, arriba de sus senos y los mismos. María entra en un frenesí de placeres y tira sus manos a la espalda de Heo baja hasta su cintura las pasa por delante quita su cinturón desabrocha el pantalón y Heo la ayuda terminando de quitárselos con todo y bóxer ya no podía más. María también quita su vestido y queda solo en panty Heo se apresura a quitárselos y colocarlos a un lado.

Heo: me vuelves loco, tu belleza es exuberante y eres solo mía. Si musito ella. Él se apresuró a entrar en ella, gimieron los dos a la misma vez. Y él le pregunto: sientes mi cuerpo caliente? El hacía movimientos lentos pues no quería terminar rápido, mete y saca su miembro dándole más placer a María. Luego él toma su miembro con su mano y acaricia la entrada de la feminidad de María, separa sus labios mayores y luego sus menores y frota su esencia con la punta de su miembro. María gime y gime.

María: ya no aguanto, apresúrate.

Heo: qué lindo es acariciarte donde tanto te gusta. Los poros de tus pechos se dejan ver, tu vientre hace que mi piel haga desastre en ti. María lo hala hasta su pecho haciendo que Heo entrara nuevamente en ella. Él mueve sus caderas en un vaivén cada vez más fuerte hasta que llegan al clímax juntos.

María: oh Dios nunca me imaginé que haría tal cosa y se tapa la cara por la vergüenza.

Heo: no amor por que te tapas? no es ninguna vergüenza, y si dos personas se aman como tú y yo, menos debería serlo. Eso es el amor, entregarse sin condiciones, a plenitud y yo te amo mi vida. Y le quita las manos de la cara a María ella sonríe y lo abraza. Él se recuesta a su lado.

Heo: nos vestimos o... nos quedamos así y lo volvemos a hacer?. María ríe. Eres un demente y lo besa, pero prefiero vestirme.

Heo: está bien, pero luego. Ahora solo quiero disfrutar de ti un momento más. Pasados unos minutos Heo se levanta se coloca su interior y recoge las prendas de María se las da, ella se viste, él también termina de arreglarse y regresan a la casa. Llegada la noche tuvieron que irse. Ya en su casa en su cama.

María: amor gracias por amarme como lo haces nunca pensé que llegarías a hacerlo. Este fue el mejor paseo que he tenido.

Heo: no agradezcas cuando se ama de veras con el corazón, todo se da por la felicidad del otro. Yo te amo, daría todo por ti y lo que más deseo es verte feliz. Además te tengo un obsequio.

María: otro más? Pero mi mejor regalo eres tú.

Heo: lo sé. Pero sé que querías mucho esto y le entrega una cajita. Cuando ella la abre ve que es una tobillera que ella había visto en una joyería y le había comentado a Vane que le había gustado. Ella le tiro el dato a Heo y ahí estaba el regalo.