Don De Vida

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Hace ocho años Mariela era muy joven, a penas tenía 20 años. Ella era completamente diferente a todas las chicas de su edad. No creía en el matrimonio, ni mucho menos en los hijos. Sin embargo; Mariela cambiaba de novio como cambiaba de blusa. En ciertas ocasiones sus amigas la escucharon decir que la vida era tan corta como para pasarse el resto de vida junto a un sólo hombre. Un día su mamá le dió un consejo: <no te dejes llevar por el placer ni mucho menos por un hombre guapo porque la belleza exterior tarde o temprano se acaba, todo es fantasía. No vaya a ser que por darle rienda suelta a tus deseos vayas a terminar con tu peor pesadilla> Mas las palabras sabias de aquella madre jamás entraron en su mente.
La vida siguió su curso, y Mariela le dió rienda suelta a los placeres. Una noche no muy lejana Mariela se va de fiesta. La luna era inmensa y las estrellas cantaban su melodía más dulce al amor. En aquella fiesta bajo aquel cielo vestido de la luna más bella y estrellas, Mariela conoce a Pablo un joven de 22 años, elegante e imensamente bello. Se saludaron y desde el primer instante conectaron.
Pablo estaba deslumbrado por la belleza de Mariela, pero al igual que ella sólo creía en vivir el momento, nada de promesas y creencias en algo tan falso como el matrimonio. En esa noche Mariela y Pablo bailaron hasta las dos de la mañana, y después se retiraron a un hotel. Días después Mariela dejó de salir, las fiestas no le llamaban la atención. Si antes las fiestas llamaban a Mariela, ahora la cama le suplica que se quede. Mariela había caído en depresión. Lo extraño era que ni ella misma sabía el por qué, si la había pasado de maravilla con Pablo.
Un mes después Mariela decide ir al doctor. Todo es tan extraño que empieza a preocuparse. Después de unos estudios y una charla el doctor le dice: <tú estás pasando por una etapa de depresión, pero si vienes a terapia todo podría cambiar. Es mas; te recomiendo que lo hagas, también deberías de estar feliz, el don de vida completa a la mujer y tú vas a ser madre> Mariela sentía morir, ella no creía en los hijos, los bebés le daban pavor. A como pudo forzó una sonrisa, le dió las gracias al doctor y se retiró.
Cuando llevaba dos meses de embarazo, Mariela toma la decisión de abortar, pero no sin antes hablar con el sabio de la ciudad. Después de unas cuantas cuadras de caminar Mariela llega con el sabio. Ella le dice: <buenos días Maestro, disculpe que venga a molestarlo, pero estoy pasando por mi peor pesadilla> el Maestro escucha detenidamente, mientras que Mariela explica: <yo jamás he creído en el matrimonio, ni en los hijos, le tengo un tremendo miedo a los bebés. Resulta que ahora estoy embarazada, pero no lo quiero tener; he decidido abortar, no quiero dar a luz a esta criatura>
El Maestro habre los labios y le dice: <en esta vida cada una de las consecuencias son producto de nuestras acciones. Cuando se es irresponsable se paga las consecuencias. Mas sin embargo; ser madre o padre no es ningún pecado. Deberías sentirte orgullosa. Existen muchas mujeres que sueñan con ser madre, pero por que Dios así lo quiere, no pueden. Si en realidad no quieres tener a esta criatura, puedes darlo a luz y si aún después de darle vida, no quieres quedarte con el bebé, lo das en adopción>. Mariela le respondió: <Maestro yo lo creía más inteligente, yo no quiero tener este embarazo> A lo cual el Maestro respondió: <la mujer embellece con el don de vida pero fallece por dentro cuando niega vida> Mariela le dijo: <de sabio no tiene nada> y se marchó.
Han pasado ocho años, Mariela no tuvo a su bebé, pero su filosofía ha cambiado. Se casó hace nueve meses, y desea ser madre. Mas sus acciones del pasado la siguen castigando. Ahora se arrepiente, y todas las mañanas dice: <cuanta razón tenía el Maestro. La mujer embellece con el don de vida, pero fallece por dentro cuando niega vida>.

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Dios los bendiga.

Besos.....

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