♡❀A través de una red social❀♡ Chardre

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Se encontraban dos pequeños, uno rubio y uno castaño, jugando en su escondite el cual se encontraba alejado de sus casa. No se preocupaban por si se llegasen a perder ya que sabían bien donde se encontraba su salida. 

—Mh... Charlie, duele demasiado.— Comentó el pequeño Leondre de apenas unos 5 años, en un tono bastante entre cortado ya que estaba a punto de llorar. 

— Tranquilo Leo,  ya pasara solo es cuestión de tiempo para que deje de doler ¿Si?— Le respondió el ya nombrado Charlie de 7 casi 8 años, tomando a su pequeño amigos en brazos intentando calmarlo. 

— La herida está sangrando cada vez más y arde... ¡Charlie! — Rompió en llanto abrazando a su amigo por el cuello moviendo sus piernitas de arriba abajo haciendo un berrinche. 

— A ver... — Sentó al de menor edad en una piedra grande así comenzar a quitarle aquella sangre con un pañuelo que tenía él en su bolsito, para luego, cuando ya no tuviese más sangre, depositar pequeños besitos en su herida los cuales causaron que el pequeño comenzara a reír. 

— Gracias Charlieee~ —Se tiró encima del más grande comenzando a dejar pequeños besos sobre ambas mejillas al mismo tiempo que enrollaba sus piernas en la cintura de él. 

— De nada, ahora vamos a casa...—

(...) 

— Charlie... ¿No íbamos a casa? ¿Qué hacemos aquí? ¿Por qué no volvemos ya? —Preguntó el más pequeño de ambos mirando hacia los lados apegándose al más alto, ya que en verdad tenía miedo... Mucho miedo. 

— Aquí podremos hacer algo que nos podrán dejar hacer allí... —El rubio se colocó en frente del castaño tomándolo de su pequeña cintura así seguidamente dejar un corto beso en sus labios. 

Su amigo quedó congelado al sentir los labios del más alto sobre los suyos, pero debía admitir que a pesar de su muy corta edad era el mejor beso que le habían dado... A comparación de los que le daba su madre, claro. — Bunny... ¿Por qué hiciste eso? — Sus mejillas se tornaron de color carmesí preguntando en un tono demasiado bajo y tímido. 

— Porque a tu Bunny le gustas... —El rubio alzó a su pequeño mostrando-le una muy amplia sonrisa.— Leo... ¿Quieres ser mi pequeño? ¿Aceptas explorar este mundo conmigo por siempre y para siempre? 

— Si si quiero... ¡Bunny te quiero! — Comentó Leo en él tono más dulce y tierno que podía tener, abrazandole fuertemente a su gigante. 

Leo, a comparación de su amigo, no entendía mucho lo que estaba pasando ya que tan solo tenía unos 5 años y su mente aun era demasiado inocente, pero lo que si sabía era lo mucho que quería a su rubio, que nunca quería estar lejos de el y... Que enserio deseaba explorar el mundo junto con él, pasar por miles de cosas con él, sacarle sonrisas y hacer feliz su vida. Mientras que Charlie deseaba lo mismo para su ahora "Novio" y mucho más, lo que menos desearía es verlo triste y más si es por su culpa, por lo que se prometió a él mismo hacerlo feliz y  cumplir cada uno de sus caprichos de ahora en adelante. 

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¡Holissss! ¿Cómo están mis amores? Espero y que muy bien. 

Lamento no haber publicado antes el especial pero tengo una razón.... ¡Soy muy colgada! ¡Lo tenía escrito en el Word y tipo, de pura floja no lo hacia! En fin... Espero que les guste, es mi kk lo se.

Por cierto... ¡La historia ya llegó a los 1K! ¡No saben lo agradecida que estoy con ustedes, enserio miles de gracias por sus leídas tanto como sus votos y comentarios! 

¡LAS AMOOO! ♥