One-shots\\One Piece

CROCODILE

Aún no se acostumbraba, llevaba meses trabajando para él y aún no había asimilado ese cosquilleo que sentía cuando Crocodile la llamaba a su "despacho" Fue avanzando como siempre por los pasillos ¿no tenía el pelo muy mal peinado? al menos sabría que la ropa no estaba mal, muchas otras veces se había presentado ante él con los pantalones negros, con su sudadera amarilla favorita y la gabardina negra a los hombros. No, por la ropa no tendría problema, pero su pelo era más difícil de domar ya que su melena castaña le llegaba hasta las rodillas. Ya estaba ante la puerta, respiró profundo y llamó con suavidad:

-Adelante.

Pasó al enorme despacho, Crocodile estaba fumando un puro en su enorme sillón detrás del escritorio la miró indiferente:

-Siéntate Naomi.

La nombrada pasó cerrando la puerta detrás de ella y se sentó en la silla que había delante del escritorio aparentando normalidad (aunque por dentro temblase de vergüenza) dijo:

-Señor si se trata de lo del otro día...

-Crocodile apagó el puro en el cenicero que tenía al lado y afirmó:

Justamente de eso quería hablarle.

Naomi respiró profundamente cuando él se levantó ¿Qué iba a pasar con ella?

Estaban de fiesta, habían conseguido un botín importante y ella había comandado la misión. Hicieron un gran banquete y repartieron sake a todos los subordinados. Crocodile no salió del despacho pero le comunicaron a Naomi que el jefe quería que le presentase el informe de la misión. En esos momentos sus subordinados la habían echo beber más copas a las que estaba acostumbrada por lo cual no se encontraba en su mejor momento pero debía ir. Una vez entró al despacho intentó mantener la compostura mientras daba el informe pero cuando acabó pasó la catástrofe. Crocodile dijo:

-Ya puedes retirarte, sigue disfrutando de la fiesta.

En ese momento el sake se apoderó de su cabeza y dijo:

-Me temo que no puedo disfrutar de la fiesta en condiciones.

Él la miró curioso:

-¿Y eso a que se debe?

-A que me falta una cosa.

Se levantó de la silla, se estiró agarró su camisa y tiró de él hasta ella para poder besarlo en condiciones. Cuando le faltó el aire lo soltó y dijo:

-Ahora si puedo disfrutar la fiesta.

Y abandonó el despacho.

Ella sabía que eso estaba mal visto, se había enamorado de su jefe pero había sabido ocultarlo...hasta ese fatídico día...por mucho que le gustara el beso. Crocodile se inclinó sobre ella, colocó su garfio debajo de la barbilla y miró al ojo que no estaba tapado por el parche:

-Escúchame Naomi, nadie debe saber nunca sobre nuestro secreto.

-Entendido.

Crocodile acercó su cara a la suya y susurró:

-Si alguien se enterara tendría que matarte, y si lo hiciera no podría hacer esto.

Retiró el garfio y la besó, un beso lento pero extremadamente provocador...no pudo evitar seguirle. Cuando se separaron Crocodile acarició con su mano su mejilla:

-Eres hermosa. Júrame que me serás fiel, que no permitirás que otro te toque.

-Os lo juro. Durante el resto de mi vida, os seré fiel.

Él sonrió y le susurró:

-Gobernaremos juntos todos los mares, derrotaremos a todos esos sucios piratas.

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¿Está bien? no sabía como ponerlo, buf que nervios, el primer one-shot con una oc.