Vídeos.

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En los siguientes meses, la clase fue dando menos importancia a lo que había ocurrido aquellos días. Apenas recordaban las crueles palabras que muchos de ellos me habían dicho.

-Tengo que enseñarte una cosa… - dijo Cody, levantándose de la silla de mi habitación.

-¿Qué es?

-Me da vergüenza… - se frotó la cara. Me levanté y le hice un gesto de “por favor”. No pudo evitar la mirada, y al instante se agachó y cogió un montón de papeles que tenía en su mochila.

Me acerqué a él pero me los tapó, e intentaba asomarme encima de su hombro para verlos, pero como era tan alto no llegaba y al final, no pude ver qué había escrito en esos papeles, Cody reía todo el rato.

-¡No me hace gracia! Ya sé que soy enana, pero es que tu eres muy alto…

Cody me respondió con un apasionado beso.

-Ahora te lo dejo ver… - se giró y me tendió los papeles. 

En ellos había garabatos, letras, palabras, frases. Era la letra de una canción.

-Esta la escribí cuando fuimos a la playa – movió las hojas colocando una encima. Se titulaba “Paradise”.

-¡Es preciosa…! ¡De veras! ¿Y… la has escrito para mí?

-La escribí aquella misma noche. 

Seguí mirando el montón de páginas, llenas de sus sentimientos. Y todas tenían alguna cosa de nosotros dos. Le pasó lo mismo que a mí: sentía algo desde el principio.

-Y esta… Ésta la escribí cuando pasó aquello con Lizzie. Lo de la clase, bueno ya sabes… 

La canción se llamaba “Torn Up”. 

-Y esta de cuando me dijiste que tenías novio – rió. La canción tenía por título “If You Left Him For Me”.

-Wow… estoy realmente impresionada, Cody. Esto es precioso. ¿Tienen melodía?

-¡Claro! Pero necesitaría una guitarra y un piano para tocarlas, y tu no tienes nada de eso aquí, ¡o sea que me salvo!

-Bueno… pues vamos a tu casa – le guiñé el ojo, y él respondió con una vergonzosa cara - ¡no pienses mal! ¡Guarro! – los dos reímos y decidimos ir a casa de Cody.

Allí lo pasamos realmente genial. Cody tocó para mí y yo cantaba las canciones. 

-¿Por qué no las subes a internet? Tienen lo necesario y mucho más para que les guste a la gente… 

-No lo creo, y además solo no voy a salir ni loco.

-¡Claro que sí! ¡Si quieres yo puedo darte ánimos detrás de la cámara!

-Oh… - me miró con cara interesante – podríamos convertir estas canciones en dúos y cantarlas juntas, grabarnos y subirlas a YouTube.

-No creo que eso sea posible.

-¿Por qué?

-¡Porqué son canciones tuyas! Y me sabe mal, además estas canciones son perfectas tal y como están, y si me añado las destrozaré…

-¡Pero si las canciones están escritas para ti! – al momento se sonrojó y se giró; a consecuencia de esa reacción me reí, mucho y estuvimos toda la tarde pasando las canciones a dúos.

Durante unos días, estuvimos grabando una canción. Para grabarlo, habíamos comprado una buena grabadora (todos mis ahorros y los de Cody los perdimos ahí) y con ella pudimos hacer unas grabaciones realmente geniales. Cuando acabamos de grabar la primera, “Paradise”, decidimos subirla a YouTube. Creamos un vídeo sencillo, con tan solo el título de la canción en él y nuestros nombres. 

***

El grito de Cody me acabó de despertar del todo por la mañana. Estábamos en nuestro sitio, donde siempre nos encontrábamos antes de ir al colegio. Me giré, un poco asustada y vi que Cody venía con su teléfono móvil y una gran satisfacción en sus perfectas facciones.

-¡Mira!

-¿Qué pasa?

Miré la pantalla del teléfono, y en el salía nuestro vídeo.

-¡Afloja eso que está muy alto y lo va a escuchar todo el mundo! – le dije.

-¿Qué no lo ves? ¡Mira las reproducciones! – el vídeo tenía más de 500 reproducciones - ¿no es genial? ¡Lo colgamos el sábado y ya tiene todas esas visitas!

No podía contestar, estaba demasiado impactada, en estado de shock. ¿Cómo? Nunca había pensado en que pasaría aquello. Bueno, sí que lo había pensado, ¡pero desde luego no tan rápido!

-¡¡Si que es genial!! – pude articular, al fin.

La ola que inundó mi vida {Cody Simpson}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora