David, tengo miedo

18 2 0
                                    

Salimos del manicomio y nos fuimos deprisa hacia el pueblo de nuevo. Queríamos llegar cuanto antes, así que fuimos por otro camino.
Cuando nos alejamos un poco, David se quedó mirando al edificio y se dio cuenta de que el vagabundo nos estaba mirando sonriendo. En ese momento un escalofrío recorrió nuestras espaldas.
Seguimos caminando y cada vez era más de noche, entonces, paso un coche por nuestro lado, y alumbró una figura que nos resultaba conocida.

Era el vagabundo, y no sabíamos de donde salió, seguía vestido igual y nos sonreía mientras tenía la mirada clavada en nosotros.
Nos fuimos por una zona en la que podíamos llegar más pronto y encontrarnos a más gente, pero no había nadie.
No sabíamos que pasaba, teníamos miedo y queríamos llegar a casa, pero entonces a la vuelta de la esquina estaba él, y me cogió de la mano y me intentó clavar un cuchillo oxidado y con manchas de sangre. En ese momento me desmayé.

 En ese momento me desmayé

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El vagabundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora