Capitulo 3.

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El auto arranca y Baekhyun presiona más los dibujos contra su pecho. Las lágrimas no han cesado, los gritos si pero Baek es alguien que llora en silencio y se traga los gritos que quieren salir de su ser. No hay forma de comparar el dolor porque este dolor que estruja su corazón y hace a su cuerpo temblar es el mayor dolor que él alguna vez haya sentido.

-¿Qué está mal?-El hombre que conducía lo ayuda a bajar del auto. El chico parece seriamente preocupado.

-Nada...-Baekhyun niega con su cabeza y camina tras el joven que solo le ha dado una pequeña sonrisa de consuelo. El edificio es enorme, el más grande que Baek ha visto.

Baekhyun ha visto pequeños edificios antes cuando salía a robar comida pero este edificio es totalmente nuevo para Baek. Es gigante, enorme y Baek no sabe que más palabras ocupar para describirlo. Mientras camina y sigue de forma tranquila al hombre, Baek seca el resto de lágrimas que se encuentran en sus mejillas con sus dos manos, sorbe un poco su nariz.

-Creo que esto puede ser de ayuda.-El joven conductor le entrega un pañuelo. Baek suena su nariz sin ningún tipo de delicadeza, lo hace como lo haría si estuviera frente a sus amigos.-Puedes conservarlo.-El chico le sonríe al ver la intención de Baek de regresarle el pañuelo.

Su cerebro parece volver a trabajar y se pregunta qué rayos hace en un edificio de la ciudad. No ha hecho nada malo, no al menos algo que él recuerde. Si fuera por sus robos lo hubieran capturado antes pero Baek sabe que siempre huye antes de ser visto. Mientras su estómago se contrae al pensar que podrían hacerle algo malo, sus ojos buscan una posible salida por donde poder huir pero lo cierto es que dentro de esa caja metálica que sube no hay donde escapar. ¨Un ascensor¨ recuerda el dibujo que su madre le ha dejado. No es una mentira decir que su madre le ha dibujado cientos y cientos de cosas.

-Espere un momento por aquí.-El alto y según Baek simpático joven abre una puerta y Baek aun sin preguntar qué sucede entra al lugar.

Hay muchos chicos dentro y reconoce uno cuantos del lugar donde vive y entonces como un poco de agua fría recuerda a sus amigos.

-¡Baek!-Gira su vista y corre a los brazos de Heechul.-¿Te hicieron algo malo? ¿Y tu madre?-Las lágrimas no tardan en rodar, el alivio de ver a alguien conocido con quien poder compartir su dolor ha terminado de destruir su yo fuerte.

-Mamá....-Baek no es capaz de decir las palabras, de solo imaginarlas siente como el mundo se viene abajo.

Heechul no es tonto, tampoco es del todo distraído y puede que tenga una idea del porque tanta falla está reunida en un solo lugar. Heechul entiende lo que ha sucedido y solo abraza más al pequeño Baekhyun. Con un movimiento de labios le explica a sus niños lo que supone ha pasado con la mamá de Baek, tanto Lay como Soo se lanzan a abrazar a su amigo. No hay consuelo que unas simples palabras puedan darle a Baek pero el solo hecho de estar entre brazos conocidos y reconfortantes lo hacen sentir cálido y las lágrimas van de poco en poco disminuyendo.

-Todo estará bien Baek. Yo definitivamente no te dejare ir de mi lado.-Baek se abraza más a Heechul.

-Siguiente.-Un hombre vestido de blanco se acerca a ellos.-Es el turno de ustedes cuatro.

Heechul toma de la mano a Baek, de forma inmediata lay toma su otra mano mientras soo camina junto a baek. El hombre los lleva a otra habitación donde hay unas pequeñas divisiones dentro de la misma habitación. Cada uno es separado y llevado a un cubículo diferente.

-¿Chicos?-Cada uno contesta un ¨Si¨ y el corazón de Heechul se tranquiliza. Sus niños están cerca y Hee está decidido a defenderlos y protegerlos de quien sea.

Falla. (BaekYeol)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora