I. La llegada

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Había estado viviendo toda mi vida en Oxford, pase allí mi niñez y adolescencia, ahora que  tenia 21 años empezaba a madurar y tenía  que salir de allí para abrirme paso a mi nueva vida.

Tenía que empezar por acabar mi carrera. Estudiaba fotografía, era mi segundo y ultimo año de carrera. Empezaba en un mes en la London College of Fashion, gracias a una beca claro, ya que allí no van muchas personas que vivan en un quinto piso sin escaleras a las afueras de la ciudad. No había visto aún la casa pero por lo que se veía en las fotos tampoco me puedo esperar mucho.

 Estaba  en el taxi que me llevaría a mi nuevo hogar. Mi sueño desde que era una niña era vivir en Londres, y aquí estoy, en un taxi de 3ª clase viendo las gotas caer y a trabes de ellas viendo los paisajes que tantas veces he querido ver.

Había algo que no se me había ocurrido, ¿como voy a subir 4 enormes maletas por las escaleras a un quinto piso? Cuando me disponía a empezar esta hazaña escuche una voz que me hizo levantar la mirada.

-¿Eres la nueva?- me pregunto una chica.

-Sí, supongo que soy yo, a no ser que tengáis una vecina nueva cada día-dije bromeando, pero me arrepentí al instante, siempre igual, diciendo lo primero que se me ocurría.

Pero a ella no le pareció molestarle porque se río y me dijo:

-Yo te ayudare a subir todo esto- dijo señalando el desastre que había armado en un momento.

-Gracias eres muy amable- le respondí algo sorprendida- ¿Tú dónde vives?

-Pues justo enfrente tuya-dijo mientras cogía una maleta y una mochila.

Me pare a observarla mientras lo hacía, era alta, de tez blanca y cabello castaño claro, tenia los labios carnosos y un lunar justo debajo de ellos. Tenía unos preciosos ojos verdes, era muy guapa.

-Bueno,¿ y como te llamas?- me pregunto abriendo los ojos.

-Melinda, pero me llaman Meli- la verdad es que así solo me gustaba que me llamaran mis amigos, pero mi instinto me decía que esta chica lo iba a ser muy pronto y mi instinto , nunca falla.

-Yo soy Sara encantada- me dijo mientras estrechaba mi mano- y,¿que te trae por aquí?- me pregunto con curiosidad.

-Vengo a terminar mi carrera de fotografía.

-¿Vas a la LCF?- dijo sorprendida, al darse cuenta que lo note me dijo- no es que crea que no seas lo suficientemente buena, solo es que que la gente que va allí no suele vivir aquí- me explico.

- No te disculpes,yo he conseguido ir gracias a una beca, la verdad es que me ha costado bastante- le respondí con una sonrisa.

-Vaya, así que tengo una cerebrito de vecina - dijo riéndose mientras subíamos las escaleras.

-Deja que te invite a un té Sara- le dije con esperanzas de hacer una amiga para no estar sola.

-Con mucho gusto. ¿Mañana a las 18:00?

-Perfecto -dije dándole dos besos de despedida


Cuando entre a mi casa lo primero que vi fue el salón, tenía un sofá verde oscuro de tres plazas y en frente un sillón granate, una mesa de café es lo que tenia en medio y todo eso debajo de una alfombra negra.Había una tele delante de los sofás con dos librerías vacías a los lados.Me quede asombrada al ver un sillón de ventana con una enorme arriba, me encantaba la vista, se veía el parque al de al lado, era precioso.

Justo a la izquierda me encontré una pequeña cocina con una encimera delante, al la derecha del salón estaba el dormitorio, había una cama de matrimonio que ocupaba casi todo el espacio y un pequeño escritorio al lado, frente a otra ventana, justo al lado estaba el baño, pequeño pero practico.

Al fin y al cabo mi casíta no estaba tan mal.



LAS SIETE CARASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora