He is Keith (PROXIMAMENTE)

5. Jugar

Aunque la maestra quito esa duda de que Keith la había "Asesinado" en la mente mantenía sus precauciones, mantenía a Milly a una cierta distancia del pequeño.

<<Falta poco pequeño>> la voz le repetía una y otra vez, Keith solo se sentaba en aquel sofá como si esperara a alguien.

— He traído algo para ustedes — dijo la maestra sacando de su bolso dos juguetes en donde el de Milly era un canario en jaula y el de pequeño era un carro a control remoto.

— ¡Gracias mami! — grito emocionada Milly tomando la pequeña jaula den canario, Keith solo acepto el juguete sin decir una palabra. Pasaron nos día y Milly le había contado a todos de su nueva mascota, el pequeño estaba cansado de oírla hablar todo el día de su pájaro.

Si lo matara se callaría y a la vez sería una excelente trampa.

Keith se dirigió a las puertas para cerrarlas bien en especial la puerta de la maestra, tomo unas almohadas y se dirigió al cuarto de Milly, al abrirlo noto como la pequeños dormía plácidamente es una pena que el la mate mientras duerme.

Keith alzo silenciosamente las almohadas pero el loro comenzó a hacer ruido haciendo que la pequeña se levante confundida, miro a los lados pero no vio a nadie, Keith se movió incomodo debajo de la cama haciendo que una de las maderas suenen, la pequeña asustada se dirigió sutilmente para ver lo que había debajo de su cama pero cuando estaba a punto de descubrir a Keith este le jalo de los cabellos haciéndola caer.

— ¡Mama! — alcanzó a gritar la pequeña pero Keith se colocó encima de ella cubriéndole la cara con los cojines.

— ¡Keith abre!- — grito la maestra desesperada, pero el pequeño colocaba más fuerza mientras ahogaba a la mocosa, el cuerpo de la pequeña dejo de patalear, eso quería decir que estaba agonizando y eso le gustaba, al pequeño le gustaba ver a la mocosa debajo de el pidiéndole ayuda, la puerta se abrió y lo único que vio el pequeño era como los brazos de la maestra lo apartaba bruscamente del cuerpo de su hijas — ¡¿Que has hecho?! ¡Monstruo!

— Aun no está muerta...

La pequeña Milly dio una respiración por la boca muy fuerte, la maestra tomo a su niña y salieron de la habitación, Keith corrió atrás de la maestra, ella agarró el teléfono para llamar a la policía pero Keith le quito el teléfono haciendo que este cayera lejos de ella, la pequeña niña movía su cabeza recobrando la conciencia.

— Me he cansado de ti — dijo el pequeño Keith apretando sus puños — ¡Me he cansado de cómo me tratas siempre! ¡Luces fuera! — las luces del lugar se apagaron, la maestra temblaba abrazando a su hija cuando las luces se volvieron a encender el pequeño estaba sentado sobre la mesa tambaleando los pies.

— No nos hagas nada malo, por favor — suplicó la profesora mirando del miedo.

— Ya es tarde- — se bajó de la mesa dirigiéndose a Milly tomando un mechón de su cabello — Pero como la maestra me agrada no morirán tan pronto.

— ¿Qué es lo que quieres?

— Jugar a las escondidas— sonrió — Y esta vez de verdad.

***

Hola amores <3 En el otro capitulo se pondrán buena las cosa jaja ¿Morirá alguien? ¿Que quiere jugar Keith? ¿La maestra lograra escapar? Estamos en el #99 wow se que seguiremos subiendo y estara junto Lydia, por cierto Lydia esta en el numero 1 en misterio suspenso ¡GRACIAS! Estare dedicando capitulos a varios lectores que leen la historia.

Voten y comenten que los ama mucho Kind <3