Capítulo uno.

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—¡Al fin! Unas jodidas y merecidas vacaciones.

—Baekhyun, no te alegres tanto, total que tendremos trabajo.

El pequeño había arrugado su nariz tras escuchar al amargado de su líder. Podía notar que estaba muy feliz con esa camisa floreada que decidió usar para tomar el avión a Hawaii pero de todas formas lo lindo no le quitaba lo gruñón.

<Lay, por favor, cuando volvamos follalo de una buena vez, gracias.>

Decidió mejor ignorarlo mientras sus otros compañeros y pocos que iban, comenzaban a dejar su equipaje en la sala del departamento. Daba saltitos internos con solo saber que su tarado y alto novio iba a estar para él las veinticuatro horas de día, como agradecía que sus agendas hubiesen coordinado para poder ir al dichoso viaje juntos.

El lugar era hermoso, lo sabía y esperaba que fuese así pues cuando lo buscó en internet así lo pintaban el montón de imágenes que el buscador le tiró.

Para nadie era un secreto que el vivaz vocalista estuviese tan contento de ir a la playa. Claro, ahora tenía unos abs que lucir, por supuesto que solamente a Chanyeol, a nadie más, ajá. Podían decir lo que quiseran las redes sociales tal como "el Baekyeon tendrá su momento de disfrutar", "quién fuese Taeyeon para disfrutar a semejante bombón", "EXO va a tener tanta suerte de ver a montones de chicas en bikinis" ¡No, señor! Baekhyun hacía honor a su homosensualidad. ¿Mirar chicas? ¡Por favor! en algún momento sus fans entenderán que a él no le van las tetas.

—Baek, podrías quitar esa pose tipo de vencedor o lo que sea que hagas, por favor. Yixing esta a punto de sumarse a tu causa.

—Debería, Chen, debería. ¡Por un mundo sin bubb..

—Oh por Dios, Baekhyun, cállate, no has dejado de molestar desde que te levantaste.

Y era cierto. No era de los que solían despertar temprano, pero a las cinco con treinta minutos de la mañana anduvo por los pasillos con un par de sartenes tocándoles como si fuesen platillos. Kyungsoo estuvo a punto de asesinarlo, él no era de los que estaban en la lista para ir y quería descansar mucho, sin embargo, un Chanyeol avergonzado y somnoliento fue a detener el espectáculo de su pareja, también le había jodido que le hubiese despertado de esa manera.

—Bien, si estamos listos, vámonos, la camioneta ya esta esperando.

El líder había vuelto a retomar su sonrisa. Se despidió amorosamente de su chino bobo y partió con el resto de niños que tenía que cuidar.

La llegada al aeropuerto fue de lo más grata. Para nadie —mundialmente y aquellos que conocieran el mundo del kpop— era un secreto que la SM Ent tenía organizado el viaje para toda su empresa.

Los chicos siempre estaban agradecidos con sus fans, aquellas que llegaban horas antes para despedirlos o recibirlos de cualquier viaje al que tuviesen que ir. Quizás era un poco tedioso tener que caminar entre las olas de personas que se formaban, sonreír en todo momento o actuar serio era decisión de cada uno.

Por supuesto que Chanyeol era el más sonriente del grupo, el happy virus siempre regalaba un poquito de alegría a cada lugar al que iba. Sus expresiones podían tomarlas exageradas, pero vamos, es como estar viendo a un niño grande con sus queridos amigos, moviendo sus manos en cualquier dirección para saludar.

Baekhyun no era tonto. Sabía que debía dar esa ración de Chanbaek ahora mismo, sabía que a las chicas les encantaba, y, ¿quién era él para impedirlo? por lo que se apresuró a caminar para estar al lado del rapero, costándole eso sí seguir sus pasos, pero aún así tuvo éxito.

We Are Fucki... Going To Hawaii. [ChanBaek|Baekyeol]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora