Emily POV
Estoy sumergida en el mar azul, solo hay disfrutando con se siente el agua en mi piel, siento que podría estar aquí toda mi vida, empiezo a nadar y de repente mi mente recibe miles de imágenes muy rápido, copas, la marca de acuario, una aleta, la luna llena, un hombre de espaldas, un estanque.
Todo se aclara dejándome ver una figura, es una chica su cabello es algo lacio, castaño claro, bastante largo, se ve normal pero no tiene piernas, no es que le falten, solo que hay algo que las remplaza, un aleta, una hermosa aleta que va desde su cintura, es verde agua marina, con algunos toques de morado, en la parte en que la aleta se junta con su piel tiene algo así como un cinturón de perlas pequeñas. No es si no después de verla un rato que me doy cuenta que es lo que veo, estoy justo en frente de una sirena.
-En la noche de luna llena todo se revela, sus destinos sellados estarán. – Trato de responder algo pero mi boca no reacciona al igual que mi cerebro, y todo se vuelve oscuro.
Despierto mientras mi corazón late a mil, veo a Santiago en el refugio de enfrente, todo fue sueño, un sueño que se repite desde que vi a esa sirena en el mar cuando caí de la roca, y desde entonces ella aparece en todos mis sueños.
Vamos 3 días atrapados en esta isla y mi calma se empieza a agotar, hemos sobrevivido con las frutas que yo suelo ir a recoger y los peces que Santiago logra atrapar. El ambiente que hay entre nosotros no es muy bueno, o estamos gritándonos o totalmente callados, ¿cómo es que Lili lo soporta?
- Hey, despertaste primero que yo, esto debería ser documentado. – Dice Santiago con la voz un poco ronca, admito que me gusta dormir pero no es como para burlase de eso, claro estamos hablando de la persona más irritante del mundo.
- Eres tan gracioso – Me levanto rápido sacudo la arena de mis piernas y tomo una banano para comer - ¿crees que nos estén buscando?
- Estoy seguro que nos están buscando, solo hay que esperar un poco más.
- Si bueno vamos 3 días aquí y mi esperanza al igual que mi cordura amenazan con desaparecer. – y es la verdad desde que vi a la "sirena" juro que me estoy volviendo loca.
- Nos encontraran estoy seguro, además tu cordura la perdiste antes de llegar aquí. Como si las sirenas existieran.
- Muy bien, primero estas aquí por tu culpa, segundo estoy más cuerda que tú y tercero te juro que vi a una sirena. – dije bastante alterada, quien se cree para decirme loca.
- Porque una persona cuerda ve sirenas. – pelear con él es inútil y además estoy demasiado cansada como para hacerlo.
Después de un largo día de silencio decido ir a nadar, eso aparte de dormir es lo único me distrae de la horrible realidad en la que estoy por lo cual nado mucho últimamente, me adentro un poco en la isla, no muy lejos de la playa hay una hermosa cascada desde que la encontré voy a nadar allí.
Me quito mis short y blusa, afortunadamente el día de la fiesta lleva traje de baño, tome aire y me lance a la laguna que se forma gracias a la cascada. El agua es deliciosa, me encanta la manera en que se infiltra en cada uno de mis poros, cierro mis ojos un minuto para disfrutar más la sensación y saco mi cabeza a la superficie en busca de un poco de agua, cuando abro mis ojos veo a Santiago sentado en la orilla viéndome fijamente.
- ¿Qué haces? – le grito para que logre escucharme sobre del sonido del agua.
- Te observo, no es obvio – grita con un tono irritante.
- Me refiero a ¿Por qué?
- No lo sé – dice mientras se levanta de la orilla y quita su camisa dejando ver su marcado abdomen, admito que él no está nada mal – estamos en una isla desierta sin mucho que hacer así que, te observo, cuando no me gritas no te ves nada mal.
- ¿Eso fue un cumplido? – él se lanzó al agua y se acercó a mí.
- Digamos que si vamos a estar aquí durante un tiempo no estaría mal que nos lleváramos bien.
- Estas harto del silencio verdad.
- Exacto – dijo con algo de risa.
- Muy bien, es un trato yo intentare no gritar tanto y ser un poco más tolerante contigo.
- Y yo intentare no hacer tantas bromas hacia ti y dejare de asustarte con los truenos, ¿trato?
- Trato.
Nadamos un rato más, empezó a anochecer y la luna llena se asomaba en el cielo, la cascada empezó a brillar con el reflejo de la luz, me siento atraída hacia ella, como si me hipnotizara.
- Voy a la cascada. – le digo a Santiago mientras me acerco a la cascada.
- Te acompaño – Santiago se acerca detrás de mí.
Nadamos y la atravesamos la cascada, llegando al otro lado de esta, donde hay una cueva muy hermosa, siento como si hubiera estado aquí antes, todo se me hace parecido, es como un déjà vu.
El agua del estanque en que estamos empezó a brillar y a burbujear, el agujero del techo que está justo encima del agua deja entrar la luz de la luna, unos pequeños pájaros azules llenan la cueva, y otros salen del agua empujándome hacia Santiago, quedamos frente a frente, solo a escasos centímetros, siento su respiración chocar la mía. Recuerdo las palabras de la sirena en mi sueño "En la noche de luna llena todo se revela, sus destinos sellados estarán".
El agua se alza en una torre rodeándonos, Santiago me observa a los ojos, siento miedo al ver como poco a poco el agua se atraviesa entre nosotros dejándonos a cada una en una pequeña torre de agua.
El estanque brilla cada vez más, mis piernas se entumecen y cierta parte de mí se empieza a aterra mientras otra está completamente en calma, en un momento ya todo se vuelve blanco y llegan a mi cabeza recuerdos de la primera vez que estuve en el estanque, las copas, "eso", los pájaros, todo se vuelve claro.
De repente se calma el agua, me siento limpia, completa, ¿más feliz? Tal vez más tranquila, como si las estrellas se alinearan y me dieran a mí la suerte. Veo al frente y un momento...
¡Estoy sola! Santiago no está, el pánico me inunda otra vez, escaneo la cueva con mi mirada, sola, tengo que buscarlo. Miro mis piernas y oh..
Calma esto es sueño, respira.
Me pellizco y solo logro un gran dolor.
Muy bien puedes entran en pánico.
Suelto un gran grito y observo otra vez, donde deben estar mis piernas hay una aleta.
***
Lo sabemos, nos demoramos demasiado.
De verdad LO SENTIMOS DEMASIADO, pero hemos estados muriendo lento
yo tenia una gripa de muerte,
y yo tengo, TENGO, una gastritis que me hizo perder ¡mi amor por todo lo comestible! es horrible.
Esperamos que nos comprendan y sigan leyendo, por favor comenten nos encantaría saber que piensan acerca de la historia y nosotras.
LO SENTIMOS MUCHOOO
Esta semana trataremos de subir mas capítulos, y como vimos que un horario fijo no nos sirve mucho, subiremos días cualquieras hasta lograr acomodar un horario, de igual manera dos capítulos por semana.
Los queremos no olviden darle en la estrella y comentar.
sugerencias o lo que quieran nos encantara recibirlo y leerlo.
Nos ENCANTA que nos comenten!!!
Soy muy insistente.
Con cariño nosotras
Val y Yes Fuera.
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Los Secretos del Agua
FantasyLos dos elegidos, los chicos de la profecía, la chica que será parte del agua y el chico que protegerá del ella, han llegado por fin. Portada por: @ValenMarruAlfaro