Capitulo 4

10 1 0
                                    

- ¡Sólo callate, no me dejas concentrar!- yo solo me pregunto si este chico sólo sabe gritar.

- Bien te dejo que lo intentes, grita todo lo que quieras, así nunca podrás- me doy media vuelta y me siento en el pasto a una distancia lejana a Park, está loco este tipo, llevo dos semanas tratando de ayudarlo, haciendo lo mismo que Rich me enseñó, pero nada funciona, sólo grita como loco y se golpea el mismo.

Siento a Rich acercándose, es raro, hace poco me enteré que sentimos cuando alguien viene, a un hombre lobo se siente muy diferente que a un humano o a un vampiro, pero se siente mucho más ese sentimiento cuando se acerca un hombre lobo.

- Así que aún no puedes, tu maestro estaría decepcionado-.

- ¿Estas decepcionado?- niega con la cabeza- bien, no puedo avanzar nada con el, siempre está enojado y así no se puede- a lo que me recuerda- Oye nunca te pregunte,¿Como supiste que todo lo que me enseñaste serviría?-.

- Digamos que en el pasado tuve unos muy buenos amigos lobos mayores, con muchas historias que me contaron, de hay supe todo- se queda viendo hacia Park pensativo- si lo piensas bien es raro que un vampiro entrene a una chica lobo-.

- Ni que lo digas-.

- Y como vas a ganar esa apuesta, aún no has averiguado tu habilidad- y ahora con Park no me puedo concentrar del todo en eso- si no mal recuerdo ya se acerca el mes número siete-.

- Sabes, me estoy empezando a poner nerviosa- no puedo soportar estar con Lila- pero bueno, ahora quiero ayudar a Park, ¿algún consejo?-.

- Solo uno, pregúntale por su madre y su hermana- al principio no lo entendí del todo, pero se me vino una gran idea, sólo espero que no salga de sus casillas y funcione.

Me levanto y empiezo a caminar hacia Park, todavía está gritando, ¿que no se cansa? me detengo enfrente de él.

- Muy bien intentaremos algo nuevo, y quiero de respondas a todas mis preguntas- solo me fulmina con la mirada- ¿Donde está tu familia?- creo que lo arruine, se está enfadando.

- ¿ Y a ti que mierda te importa?-.

- Oye yo solo quiero ayudarte de acuerdo- le hablare con tranquilidad, si lo insulto y le grito no servirá de nada- ahora contestame, esto no saldrá de nosotros dos- parece pensarlo, hasta que por fin habla.

- Solo a mi madre y a mi hermana, eran mi única familia, ¿Tu que crees?- maldita sea Rich, en que me has metido.

- ¿ Y tú padre?- agacha su cabeza para mirar sus pies, cuando eleva su mirada, me mira fijamente y puedo notar que sus ojos están cristalizados.

- El las mato, las mato en un accidente de auto, el iba borracho discutiendo con mi madre, mi hermana Mia, tenía 9 años, era dos años menor que yo, era mi hermanita sabes, pero mi estupido padre las mato en un accidente de auto- mierda ahora no se que hacer.

- Y has pensado en tu padre cada vez que practicamos ¿no es así?- el sólo asiente, mirando hacia abajo, aveces se lleva su mano hacia su rostro, limpiando sus lágrimas.

- Mira alomejor esto no te agrade pero quiero que pienses en tu madre y tu hermana, quiero que en tu mente les des vida a ellas, sólo inténtalo ¿si?- y sólo asiente de nuevo, levanta la mirada y la fija atrás de mi, por lo que esta mirando a Rich, así que cambió de lugar para que el le de la espalda y yo lo mire de frente- Ok, ahora has lo que te dije, pero no pienses en los momentos tristes, piensa los momentos felices-.

Se queda quietó con la mirada baja, y empieza a llorar en silenció, esto es un poco incomodo.

- No te averguenzes de llorar, no llores por las personas que amas, que te amaron- vuelve a asentir- ahora cierra los ojos y piensa en transformarte pero no dejes de pensar en ellas, nunca lo hagas-.

Levanta su mirada, me mira unos minutos mientras lágrimas caen por su rostro muy marcado de facciones.
Cierra los ojos, se está concentrando, sólo espero que funcione, miro a Rich que está sonriendo, ¿porque carajos está sonriendo?, no me doy cuenta cuando Park ya está a cuatro patas, sólo veo a un lobo con su pelaje café oscuro, lo logró.

- Lo ves- le digo mientras me agacho para quedar a su altura- tu les das vida, y ellas te dan vida a ti, ellas siguen aquí contigo y nunca se van a ir- y me atrevo a llevar mi mano hasta su pecho, Park no es un chico loco o con problemas, sólo es un chico destrozado por dentro.

Derrepente ya no está en forma de lobo, está de rodillas igual que yo, desnudo y llorando, afortunadamente tenía unas sábanas así que se las paso y el se tapa rápidamente, y no me puedo resistir asi que me acerco a el y le tomó la mano, como veo que no hace nada para quitarla, lo abrazo, y asi estamos de rodillas, el llorando en un mar de lágrimas, con la cabeza recargada en mi hombro, y la mía en el suyo, me aprieta tan fuerte que no me puedo separar de el.

- Gracias, muchas gracias-.

Este chico sólo era un tronco duro de roer, y ahora está llorando, abrazándome y dándome las gracias. Nos quedamos asi hasta que Park se tranquiliza derrepente, ya no llora y siento que me está soltando lentamente, me mira fijamente.

- ¿Como hiciste eso?-

- ¿Como hice que?- ahora no entiendo de qué está hablando.

- Esa es tu habilidad Maite- ese fue Rich que está muy cerca de Park, Matías está al lado de el, no me di cuenta cuando llegó, no entiendo nada, sólo lo miro para que siga hablando- tu habilidad es tranquilizar a las personas, y le acabó de poner el nombre de tranquilizadora, ¿genial no?-

-¿Encerio?- si esa es mi habilidad estoy más que feliz, me dirijo hacia Park- ¿tu lo sentiste?-

- Si, se sintió muy bien, muy tranquilizante- no me pude aguantar reír.

- Yo quiero saber qué se siente, prueba conmigo- así que Matías será mi muñeco de pruebas, perfecto.

- De acuerdo- me levanto seguida de Park y me paro enfrente de Matías quien entiende su mano hacia mi- ¿te tengo que tocar para que funcione?-

- Si, pero si trabajas en ella puedes llegar a hacerlo con tan solo ver a la persona- ¿ y como carajos de nuevo Rich sabe todo eso?- y por si te lo preguntas, lo sé por las historias, y porque veo el futuro- cierto.

- Bien- así que tomó la mano de Matías y sólo pienso en que se relaje, se tranquilize como dijo Rich, y creo que lo hice demaciado porque callo al suelo como un saco de papas.

- Oh si se me olvidó, también puedes llegar a dejarlos inconscientes- eso es genial.

- Pero, ¿porque no me lo dijiste idiota?, ¿y cuanto tardara en despertar?- espero que no sea mucho, no lo puedo dejar aquí tirado en el patio.

- No lo sé, supongo que lo vamos a averiguar-

- No puedo dejar a mi hermano aquí tirado por quien sabe cuanto tiempo- nos quedamos pensando en cómo despertarlo.

- Chicos, ya está el pastel- grita mi madre desde la puerta de la casa.

- ¡Pastel!- y los tres vamos casi corriendo hacia la cocina.

Matias estará bien, tarde o temprano despertara, y como ya se mi habilidad eso significa que ya puedo acompañar a papá y a Iván, y lo que eso me recuerda.

Gané la pizza gratis, gané la apuesta.

Ojos LobunosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora