El Preludio de mi Obsesión

Capítulo 4

Narra Gomez.

Después de dejar a Morticia con su hermana y teniendo un mal sabor de boca fui con Jessica para detener todo esto, abrí la puerta y la vi sentada en su cama con una mirada lujuriosa sobre mi pero no contesté a su petición visual y me senté en una silla lejos de ella.

-Te vieron saliendo de tu habitación con esa... ¿te acostaste con ella?- preguntó y no contesté nada, sólo la observaba fijamente pero prosiguió- no sería la primera vez que me eres infiel, lo que me preocupa es que cada vez te buscas mujeres más feas que yo, se trata de mejorar Gomez, no de ir hacia atrás.-

-No me acosté con ella...- dije intentando cortar la conversación pero se paró de la cama y se acercó a mí, sentándose sobre mis piernas.

-¿Debo creerte?-

-Piensa lo que quieras, poco me importa...- saqué mi billetera para tomar un poco de tabaco pero de mi bolsillo salió una hoja que había escrito.

Jessica fue más rápida que yo y la tomó, comenzó a leerla pero tomé sus muñecas fuertemente y se la arrebaté. Sus muñecas quedaron rojas, no medí mi fuerza, me miró dolida y eso hizo sentirme mal pero no tanto como para pedir disculpas, guardé la nota en mi cartera y encendí un pequeño cigarro frente a ella.

-Me tengo que ir, tengo cosas que hacer...- le dije y ella intentó acerarse para besarme pero lo evité y me pegó una bofetada.

Sin rebajarme salí de su habitación y me dirigía a la biblioteca donde me encontraría con unos compañeros, pero antes de salir del edificio de las mujeres me detuve frente a la puerta de la habitación de las dos señoritas Frump, estuve a punto de tocar la puerta, pero bajé mi brazo y me fui.

Por el camino me encontré a una vieja amante, Aura Bast, la historia de su madre era impresionante, me la contó la primer vez que "salimos", alta pero no de mi estatura, pelo castaño como una cascada cayendo sobre su espalda, ojos grises labial marrón y su piel tan pálida como si fuera gris, pero fuera de lo sexual nos habíamos vuelto amigos íntimos. Como era de costumbre acercó su mano a la altura de mi boca, la tomé y le di un beso pero más de ligue de respeto, era una mujer brillante.

-Aura, no creía tan grande el campus hace tiempo que no te veo.-

-Exageras Gomez, ¿una semana sin mi y ya pierdes la cabeza?-

-Algo así, Aura, tendrás tiempo mañana para, entre clases charlar un poco... necesito contarte algo, pedirte un consejo mejor dicho.-

-Lo dices de verdad o ¿quieres que nos acostemos?-

-Lo digo de verdad.-

Accedió y se fue quitándome mi cigarro y llevándoselo con ella. Llegue hasta la biblioteca deseando no hacer nada, suelo estudiar pero el esfuerzo que empeño es poco, más bien "siempre me salgo con la mía" lo que hace pensar a todos que soy un alumno brillante cuando sólo tengo suerte. Saludé a mis dos compañeros de años, desde que era pequeño, nuestras familias siempre se han llevado de maravilla y nuestros padres tienen negocios juntos.

Bram un hombre alto quedándose calvo a corta edad, muy delgado y con una sonrisa de culpabilidad todo el tiempo, tremendas ojeras, dientes grandes y siempre porta una prenda azul medianoche, camisa, corbata, lo que sea, pero a pesar de su apariencia amabilidad le sobra. Y Drake, un poco más bajo que yo, mi mismo peinado pero en color castaño, ojos casi amarillos, una sonrisa impecable pero llena de pecado, un mujeriego total aún más que yo, pero ambos siempre han estado para mí.

-Cuánto tiempo tienen que llegaron las de nuevo ingreso y ya te tiraste a una...- dijo Drake burlándose de mi.

-No me acosté con ella...-

-Ay ajá, tu dormiste en el sofá y ella sobre tu cama.-

-Exacto, deberían preocuparse por eso...-

Les pedí dejar el tema a un lado y ponernos a trabajar, accedieron, doy gracias a que no son tercos y con pocas palabras entienden perfectamente. Estuve distraído todo el tiempo suspirando a causa de la falta de aire que tenía, me preguntaban qué me pasaba y negaba estar mal. Ellos hicieron todo el trabajo, si en algo se trababan les ayudaba pero poca disposición tenía en el momento.

Cayó la noche y estaba solo en mi habitación, Jessica había estado hace unos minutos conmigo, intentó seducirme para acostarnos pero no accedí y se fue enfurecida, me recosté a un lado de donde Morticia hace unos días durmió, los suspiros salen por sí solos de lo más profundo de mi ser, tomé mi celular para llamarle, no era tan tarde y quería escucharla, pero no contestó así que me dispuse a dormir en un pequeño espacio de mi cama respetando el lugar que ya le pertenece a Morticia.

Me levanté y había quedado de ver a Aura a medio día en la cafetería y así fue, me volé un par de clases pero fui puntual para estar con ella, al verla no pude evitar sonreír, se había vuelto una amiga íntima y necesitaba su opinión. Como siempre besé su mano y cuando levanté la mirada Morticia me estaba observando al otro lado de la cafetería, le sonreí y saludé desde lejos pero sólo me ignoró.

-¿Y ella quién es Gomez?- preguntó Aura con media sonrisa.

-Se llama Morticia, tengo poco de conocerla pero...- mis palabras se cortaron cuando me di cuenta que todo lo dije sonriendo.

-Ya veo de qué me quieres hablar...- indicó que nos sentáramos y accedí- dime Gomez qué pasa.-

-Nunca he estado enamorado, ni de Jessica aunque es mi prometida.-

-¿Cómo sabes que no lo estás de Jessica?-

-Siento que no lo estoy, sólo así, creo que para estar enamorado completamente tienes que perder la cabeza y sacarte el corazón para regalarlo, literalmente quisiera hacer eso. Pero no lo he estado nunca y sólo tengo de referencia las palabras de mi padre cuando me lo explicó.-

Me miró como si un niño pequeño le hubiera pedido un dulce y yo me sentía desesperado, ella sólo se burlaba de mi nueva faceta. Me explicó un poco su punto de vista, tampoco había estado enamorada antes así que poco me sirvió. Terminamos de comer y ella se tuvo que ir. Al momento en el que se levantó Morticia y su hermana lo hicieron igual así que decidí seguirlas, cuidadosamente para que no me descubrieran.

Llegaron al jardín botánico del campus, estuve espiándolas un poco escondido detrás de unos arbustos, Morticia recortaba la flor de la rosa dejando sólo el tallo y las espinas y su hermana le decía que eso no se debía hacer. Me fui antes de que notaran mi presencia sonriendo ante tan peculiar situación.

-¿Gomez? ¿Qué estás haciendo aquí? – preguntó Bram.

-¿Me seguiste?-

-Si y tu a esas dos chicas, ¿cuál de las dos te gusta?- dijo mientras las observaba- vaya son muy parecidas en la cara pero en lo demás no... ¡¿Hermanas?!... si que te vas a lo grande, me gustó la del pelo negro con trenzas.-

-¿Justamente ella?- le pregunté levantando la voz, lo jalé para irnos antes de que nos vieran.

-Gomez Addams, enamorado, nadie lo pensaría.-

-No lo estoy...-

-No te creo- gritó en mi cara mientras ponía mis manos en los bolsillos de mi pantalón- acéptalo, no tiene nada de malo hombre, es bonita. Termina a Jessica, rompe el matrimonio y ve tras esta chica gótica.-

-Soy un cobarde, dejaré que Jessica termine primero...-

-No señor Addams, iniciativa amigo, venga- contestó mientras golpeaba mi espalda y me encaminaba hasta la habitación.

*** PERDONEN POR EL EPISODIO TAN CORTO 

Y CREO que este es más un episodio extra pues no lo tenía contemplado pero se me hizo buena idea, en el siguiente seguiremos con la narración de Morticia.

Prácticamente es corto porque estoy a HORAS de salir de viaje <3 

DISCULPEN SI HAY ALGUNA FALTA ORTOGRÁFICA, NETA PERDÓN.

Agradecería el apoyo para seguir trayendo la historia <3 

Gracias c: ***