Recordandote...(Yaoi)

#3

Me tendrá que explicar más tarde todo lo que está pasando.

Me sentía muy mal, ya que no había dormido bien las noches anteriores, sentía mis piernas temblar.
-¿Basti? ¿te sientes bien? Preguntó Adams

-S-si es sólo que... no alcancé a responder ya que todo se volvió negro. Lo último que escuché fue un grito de Adams.

Desperté en la enfermería, no sabía que había sucedido. Cerré mis ojos cuando sentí la puerta abrirse. Miré hacia la puerta y ahí estaba ¿Adams?

-H-hola - dijo entre cortado

-Hola - susurré

-¿Estás bien?

-E-eso creo... ¿porque te preocupas? La primera vez que me viste me gritaste maricón.

-Eh de verdad lo siento no sabía que eras tú, lo siento.

¿Que era yo? Pensé.

Adams se acercó a mí peligrosamente. -¿Qué estas haciendo? - Dije asustado.

-Solo te quería ver de más cerca.- Dijo tomando mi mentón.

-Estás más lindo que antes bebé.

Yo me sonroje al instante, sus ojos me tenían loco pero esta vez mire a su carnoso y rosados labios, quería besarlo, sus labios me llamaban pero sólo miré al suelo y lo alejé.

-¿Permitirías que te besara? - Preguntó.

Estaba rojo como un tomate, miré hacía arriba y ahí estaba el. Adams tomó mi barbilla y besó mis labios.
Sentía sus carnosos labios, el pasó las manos por mi cintura y pasé los míos por su cuello. Cuando nos separamos el me miró con cara de deseo y volví a sentir sus dulces labios.
Sentí como mis mejillas se enrojecían mucho más,  era tan suave. Abrí un poco mi boca y la lengua de Adams no tardó en llegar, nuestras lenguas danzaron por algunos segundos hasta que nos quedamos sin aire, el beso estaba lleno de deseo y pasión.

Me quedé mirando a adams, no sabía que decir, estaba muy nervioso.

El me abrazó fuerte.

-Ah! - Grité

-¿Que pasa bebé?

-N-nada es sólo que... nada solo olvidalo.

El comenzó a subir mi polera. Miré su rostro, el cual se veía horrorizado, mi cuerpo estaba lleno de moretones y cortaduras.

- ¿Qué te pasó? ¿Quién hizo esto? Los voy a matar

-Adams, no hagas nada, ni si quiera lo intentes.

-Pero esto es horrible, ¿Tu que haces al respecto?

-Nada...

- ¿Ves? Bastían, reacciona. Así como vas, terminarás en el hospital.

Mientras el decía esto, se acercaba cada vez más, me tenía demasiado nervioso.

- No voy a terminar en el hospital, de que hablas... - Miré hacia otro lado, no quería verlo a los ojos.

-Bebé, hazme caso, por favor... - Me miraba triste

-¿Por qué te preocupas tanto? Ni si quiera me conoces...

-Huh, nada. Solo olvidalo. Me tengo que ir. -Dicho esto, me besó durante unos segundos, no se movió, y yo tampoco...

Dicho y hecho esto salió, y volví a quedarme solo. Su última frase fue fría, cortante, me sentí extraño cuando me besó, sentía como si ya hubiese probado sus labios antes, mucho antes de este día.

He estado pensando este rato que he estado aquí sobre que es lo que está pasando, nada me encaja. Yo no conozco Adams, pero el me conoce a mi, y pareciera que de años.
Es demasiado extraño, no sé cómo explicarlo, nunca antes lo había visto, ni hablado con el ¡Nada!
Me siento inservible, invisible.

Camila me dijo que me contaría todo. Ojalá que después de eso todas las piezas del puzzle logren encajar.