Capítulo 9; Muñecos Sexuales.
- Harry.. -sollozó suavemente ________.
Louis giró y vió a el enrulado chico que acababa de entrar al lugar, a pesar de que lo había imaginado miles de veces, escultural, simpático, coqueto, era tres veces más de lo antes pensado.
- ¡________! ¡Qué sorpresa! ¿Cuándo regresaste? - En un abrir y cerrar de ojos Harry ya estaba al lado de su mesa, se le veía sorprendido e incluso feliz.
- Hola Harry.. - titubeó la chica.
- Hola Harry - dijo Louis metiendose en la charla que se había convertido en una mala situación para _________.
- ¿El novio? - preguntó Harry refieriendose a la relación entre los dos.
- El amigo - El pobre pueblerino sintió aquello como un golpe bajo, si bien _______ era su chica, la amaba, de eso no había duda.
*Narra Harry*
Al _________ irse del pueblo mi relación con los chicos se fué desvaneciendo. Todos la queríamos, todos estabamos encantados y yo no podía permitir que alguien que no fuese yo la tuviese.
Ella me robó el corazón y me arrepiento mil veces por haberla tratado como un trapo sucio aquel día en estado de ebriedad. ¿Cómo fuí capaz de compartirla con otros hombres? Me repugno.
- ¿Me permites hablar a solas con ella? - le pregunté a El amigo de ________.
El chico dudó unos segundos y luego la miró fijamente.
- Estaré por allá si me necesitas. - dijo señalando unos asientos que había al fondo del lugar.
Ella solo asíntió. Estaba pálida.
El chico se fué y yo tomé asiento, ella me miraba, petrificada.
- _________... - No sabía como comenzar. - Lo que ocurrió aquel día...
-No, no me hagas recordarlo - dijo mirando sus manos, en un intento de nervios, su voz era diferente, era débil. - por favor.. - susurró en un intento por ahogar su dolor. No fué hasta ese momento que noté la mala vida que se había dado, estaba más pálida, mucho más delgada, sus rasgos seductores se habían convertido en muestras de lo indefensa que andaba, hasta su cabello había perdido aquel toque que lo hacía irradiar.
- Dame otra oportunidad, dejame comenzar desde cero. - por medio de su mirada dejó miles de interrogantes - Por favor, como si nunca nada hubiese sucedido.
Ella solo asintió. Ahí supe que me ganaría su corazón, que la volvería a tener para mí, no importaba el tiempo que debía esperar por ella.
