17 . Penúltimo Capítulo

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[Alonso]

Tome el ramo de rosas blancas.
Mis manos temblaban, estaba demasiado nervioso.

Mi madre coloco una de sus manos en mi hombro y sonrió.

-Tranquilo hijo - Sonrió

-Me pone muy nervioso - Confesé

-Alonso, tu lo ayudaste a que llegara al mundo - Hablo Mariana.

-Anda, tranquilo - Mi padre me abrazo con fuerza - Estoy muy orgulloso de ti, me alegra que seas padre y se que serás mejor que yo.

Me aferre mas el, le agradecí sus palabras y camine hacia la habitación.

Era completamente blanca, con una enorme ventana aun lado, una televisión y enfrente la cama, aun lado está una pequeña caja de al parecer vidrio.
Hay un sillón en color azul y aun lado una pequeña mesa.

Escuche un tarareo, _______ tenia un pequeño bulto en una cobija blanca.

Lucía tan hermosa, llena de vida, era ella, mi amor, mi vida, ellos son mi razón de existir, y aunque en algún momento lo tome como pretexto siempre lo quise, desde que supe aquel día que llegaría.

Deje el ramo en la pequeña mesa y me acerqué tembloroso a ellos.

-Es hermoso ¿No crees? - Pregunto con dulzura

-Cómo su madre - Alzó la vista y me observó.

El pequeño hacia pequeños sonidos con la boca, al parecer estaba despierto.

Ella lo miraba como lo más hermoso en el mundo, y así lo era.

-¿Quieres cargarlo? - Pregunto

-¿Puedo?

-Claro.. Con cuidado - Me lo entrego.

Era tan pequeño, su piel era pálida y tenia poco cabello rubio. Sus ojos, esos sin duda eran los mios, tan azules como el cielo, no podía evitar, quería llorar, estaba feliz, soy feliz.

-Alonso, gracias

-¿Que, por que? - La mire Confuso

-Después de todo, habernos equivocado fue lo mejor, me diste lo que mas amo, y a pesar que te desmayaste a medio parto - rió - Lograste que Santiago naciera.

-Crei que te habías decepciona por mi corta ausencia en el parto - Sonreí - Yo debería agradecerte.
Acabaste con mi monotonía, me diste lo que mas amo y, me amas, amas a este futbolista malo para bailar y todo lo demás

-Te amo Alonso - Dijo con una sonrisa.

-Te amo______

Dejo a Santiago con toda la delicadeza en su cuna, camino con cuidado y tomó lugar en el pequeño sofá frente a esta.

Me senté a su lado y la rodee con mis brazos.
Bese su frente y sonreí.

El pequeño dormía plácidamente tenia una de sus manitas sobre su rostro, se tallada el ojo y daba un gran bostezo para quedarse dormido otra vez.

-Es hermoso - Hable

-Se parece a ti - Dijo.

-¿Sabes? Es una locura comenzar con esto, y se que fue un error obligarte de alguna manera a que te casaras conmigo. Pero, si me tuviera que equivocar contigo otra vez, volvería a tu departamento aquella noche y lo repetiría todo, por ti, por Santiago.

Me acerqué a ella para besarle pero el ojiazul comenzó a llorar. Reí y camine hacia la cuna.
Lo tome en mis brazos y lo arrulle.

Mañana vendrían los de la prensa, nuestra familia y amigos, le harían una fiesta a Santiago como Bienvenida.

Eran las 11 de la noche,____ dormía en el sofá y yo cuidaba a Santiago mientras miraba la televisión.

-Campeón, no sabes cuanto te esperamos - Bese su cabecita- Mamá se desvelo pensando en ti muchas noches. Mire el reloj - Ya es tarde, hay que ir a dormir.

Me levanté para llevarlo a la cuna de mi recamara.
Salí del espacio de la sala y camine hacia la escalera del salón principal. Apenas toque el primer escalón cuando el timbre sonó.

Abrí la puerta con mi hijo en mis brazos.
Jackson estaba enfrente de mi, tenia un regalo en sus manos.

-Alonso - Susurro casi para si

-¿Que haces aquí?-Pregunte

-El otro día estuve aquí y discutí con tu esposa, me sentí mal, supe que a pesar de lo que pasara yo la ame y no puedo cambiar el pasado.
Me sentí tan apenado, recordé que a la habitación del pequeño le faltaba algo, pero no pude saber que..

-¿Cómo sabes sobre la habitación de mi hijo? - Pregunte algo asustado.

-Contrataste a un decorador para su habitación, yo era uno de los trabajadores - dijo- Es para el - Apunto hacia Santiago.

-No debías..

-Si, el niño no tiene la culpa de mi estupidez - Me entrego el regalo - Lo siento, y espero que algún día me perdonen.

Metió sus manos en los bolsillos de sus jeans y se fue.



El flash de la cámara era cegadora, los paparapzis cantaban cada momento de la cena de Santiago.

______ lo tenia en brazos, sonreía y no apartaba su mirada de el, lucían tan perfectos juntos. Yo me abrazaba a su cintura en las fotos y aunque no teníamos un fotógrafo las fotos parecían ser sacadas de las revistas.

-Es hermoso - Susurro Marina quien tenía en brazos a mi hijo-Se parece a Alonso - dijo

Jos paso uno de sus brazos por mis hombros y bebió un poco de su vaso.

-Lo lograste - Hablo con una sonrisa - Le diste todo lo que ella deseo algún día.

-¿Que cosa? - Pregunte

-Tener un futuro mejor contigo.

-¿Conmigo? - La mire, su sonrisa era tan hermosa, brillante - ¿Porque yo? No soy lo suficiente para ella.

-Tu eres su todo. - Sonrió

-Y ella es el mio.



Eres el error perfecto
Tan bueno tan incorrecto

Somos mas allá de un corazón, somos vida y amor, sin importar que tantas veces caigamos nuestro mundo seguirá brillando como aquel día en la estación del tren.

Error Perfecto *Alonso VillalpandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora