Capítulo 4: Soy un hombre no un patán

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Capítulo 4: Soy un hombre no un patán

Aaron.

Comencé a secar mi cabello en la pequeña toalla que tenia, fui a la sala y prendi la televisión y claro no había nada pero bueno sólo necesitaba un poco de ruido en esta casa más bien que se oiga un poco de voces.
Desde hace un mes estado un poco preocupado por lo que paso en la fiesta no era porque me haya acostado con una virgen y que le haya quitado lo más importante para una mujer lo que me preocupaba era que no recuerdo haber usado condón, no lo recuerdo. Unos toques en mi puerta me hicieron salir de mi pánico, tire la toalla al sofá y tome la playera que estaba ahí, fui a la puerta y al abrirla vi a una Zoey asustada y triste.

—¿Zoey? —. Que yo me acuerde nunca le di mi dirección de eso si me acuerdo—. ¿Zoey que pasa? —.

—Pu-puedo hablar contigo—. Su voz se oí triste ella se veía así triste e indefensa no tenia ese brillo que la hacia hermosa porque si Zoey es hermosa y más el día que la conocí lucia muy bien no digo que ahora se vea mal es solo que no veo ese brillo que podría decir la hace única.
Me hice a un lado para dejarla pasar, cerré la puerta y caminamos hacía la sala donde tomamos a siento.

—Zoey dime que es lo que pasa ¿Como llegaste aquí? —. Ella trago duro y por fin me miro, porque presentía algo malo ante todo esta situación.

—Aaron...se que va estar mal lo que te voy a decir y que te vas enojar mucho pero...—. Rompió en llanto y eso me rompió el corazón —. Estoy embarazada —. He ahí mi temor más grande y lo que me tenia preocupado por un mes, no había podido tocar a una chica en un mes de tan solo pensar lo que paso. Mi mirada estaba pérdida, el corazón se me paró, el cuerpo me temblaba...iba a ser papá.

—¿Aaron? Di algo por favor...—. Parpadee y por fin note que ella solo era una niña de diecisiete años, asustada, con miedo de que yo le dijera un no quiero al bebé y desparece ella tenía mucho por vivir pero todo se complicó por hormonas desatadas y alcohol.
Me levante de mi lugar para ir abrazarla, sentí como se tensó cuando mis brazos la rodearon y mi cabeza se pego a su sien.

—Yo cuidare de ti—. Cuando dije eso ella se separo de mi para verme y ahora corresponder a mi abrazo.

—No quiero que te hagas cargo de algo que no quieres Aaron, yo puedo cuidar de el bebé, tu tienes una carrera que terminar—.

—Zoey yo ya viví lo que tenia que vivir, mi carrera esta casi terminada y pronto tendré entrevistas de trabajo y podre darles a ti y al bebé todo lo que se merecen—. Limpie sus lágrimas con mi dedo pulgar, Zoey sonrió un poco ante todo lo que le dije.

—La única que lo sabe es mi hermana y Zayn me da miedo decirle a mi mamá —. Tembló ante ma idea de que su mamá le dijera algo.

—Nada malo va a pasar Zoey yo estaré contigo, yo tomare responsabilidad —.

—El problema no es el que tu este Aaron, si el problema sera de que yo soy aun una niña de diecisiete años y tu de veintitrés años—. Volvió a llorar y yo me dedique a consolarla.

Así estuvimos por unas horas platicando sobre como le diríamos a su mamá sobre el incidente que tenemos, Zoey al principió ella se negaba a que yo fuera con ella pero como soy me negué a hacer eso además de que soy alguien muy terco.
Así que cuando se calmó decidimos irnos, en el auto mi mano no dejo la de Zoey, se sentía muy bien estando con ella.

Cuando llegamos a casa de Zoey ahora yo me sentía nervioso pero nada inseguro se lo que hice y no iba a dejar a la madre de mi bebé sola, soy un hombre no un patán,  tome la mano de Zoey un poco con fuerza y ella a mi también. Zoey saco las llaves de su casa para así poder entrar a ella.

—¿Zoey eres tu amor?—. La voz de una mujer se oyó y en pocos minutos una señora de al menos unos cuarenta o cincuenta años apareció con su traje de enfermera, pero al ver a su hija agarrada de mi mano y yo a su lado fruncio el ceño—. Zoey ¿Quien es él? —.

—Mamá tenemos que hablar—. Su madre se cruzo de brazos y la miro que para mi forma de ver estaba molesta.

—Sobre que tenemos que hablar Zoey Taylor Payne —. Zoey se pego más a mi brazos, podía sentir su miedo y su nerviosismo.

—Disculpe señora Payne... —. La señora me miro mucho más molesta de lo que estaba.

—Disculpa pero esta discusión es entre mi hija y yo además y ¿Tu quien eres?—. Cuando iba a contestar Zoey se adelanto dejándole completamente asombrado.

—¡Estoy embarazada!—. La casa se quedó en completo silencio, la mirada de su madre era de asombró y molestia porque su cara comenzó a tornarse roja.

—¡¿Que tu que?!...¡Tu no puedes estar embarazada! —. Dijo exaltada.

—Pues si lo estoy, voy a tener a mi bebé, solo venía a recoger mis cosas así no podrás sufrir con una hija embarazada —.

—Ahora tu eres la ofendida, no puedo creer que todo lo que te he dicho lo que contrae estar embarazada a temprana edad y tu vas con el primer hombre y le entregas las nalgas como una zorra—. Las lágrimas de Zoey no paraban por las hirientes mis brazos la tomaron de los hombros y para poder irnos.

Zoey estaba destrozada, estaba completamente herida y me rompía el corazón verla así, así que lo mejor que hice fue dejarla dormir en mi habitación  y yo dormiría en la habitación de huéspedes pero puedo decir en cierto punto me sentía asustado y feliz de que iba a tener un bebé.
Sólo espero que sea un buen padre.

Ligeramente embarazada |Aaron Johnson|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora